El salón principal de Muelle de Loto se tiñó de rojo una vez más, la diferencia que esta vez no eran ríos de sangre ni las llamas consumiendo los antiguos edificios, sino los exquisitos ornamentos que decoraban las mesas y las finas cortinas colgando de las paredes los que le daban esa tonalidad que podía apreciarse incluso desde el exterior. Las puertas se habían abierto para aquellos que desearan externar sus felicitaciones y buenos deseos a la pareja que recién contraería matrimonio.
El recuerdo de aquellos que no están se mantenía en las mentes de aquellos que crecieron juntos y acababan de jurar como hermanos hace apenas unas horas, estaban seguros en sus corazones que estaban presentes en tan importante ceremonia.
Wei WuXian había insistido en conocer a su cuñada y no dejaría de fastidiar hasta que se encontrara con ella, así que los hermanos Lan se dedicaron a pasear por los al rededores como lo hacían la mayoría de los invitados, mientras que algunos otros permanecían en los pabellones que habían sido dispuestos para su descanso.
Al pasar frente al salón principal, Lan XiChen se quedó mirando un instante dejando que los recuerdos invadieran su mente, transportándolo en sus recuerdos muchos años atrás a un escenario distinto. Era la Torre Koi la que había dejado el dorado por un momento intercambiándolo por el rojo.
Sentimientos encontrados oprimían su pecho, ambos sabían que antes que sus más honestos y profundos sentimientos, se encontraba el deber y las obligaciones. Jin GuangYao le había dejado en claro el motivo de su matrimonio y no había tenido otra alternativa más que aceptar dejarlo ir por mucho que pesara en su corazón. Un líder de secta y aquel que entre infortunios se había convertido en el heredero no podrían estar juntos jamás.
"A veces hay que hacer grandes sacrificios por un bien mayor".
Una figura pequeña y delgada ataviada en túnicas rojas apareció frente a sus ojos, al girarse le dedicó una sonrisa y dijo con una voz suave: "Podemos imaginar por un momento que estoy vestido así para ti"
—A-Yao — murmuró, respondiendo a la sonrisa con una amable curva en sus labios pretendiendo ocultar el dolor que le causaba enfrentar la realidad.
—¿Hermano?
La voz de Lan WangJi fue el ancla que lo aseguró al presente y le impidió perderse en los recuerdos, añorando cambiar el pasado.
—El salón fue bellamente arreglado, es digno de la ceremonia de bodas de un líder de secta — comentó casualmente, esperando poder engañar a su querido hermano menor.
—Mmmn.
Como esperaba no podría engañarlo, al menos podía confiar en que no indagaría con la intención de obtener una respuesta; así que ambos continuaron con su paseo hasta que fueron interceptados por Wei WuXian que jalaba a Jiang Cheng del brazo.
—No me dejaron conocer a mi cuñada aún, pero me encontré al novio. Nunca creí llegar a verlo usando un traje de boda, así que quería enseñárselos antes de que se tenga que ir.
Los hermanos Lan se quedaron atónitos ante la escena que se desarrollaba frente a ellos. Lan Wang Ji desvió la mirada en desacuerdo y tal vez con un tanto de fastidio, mientras que Lan XiChen sonrió amablemente, sintiendo pena ajena por Jiang WanYin.
—Felicitaciones por su matrimonio líder de secta Jiang, en nombre del Clan Lan extiendo nuestros mejores deseos por la prosperidad de su secta y la pronta llegada de herederos— se inclinó en una respetuosa reverencia.
—Se lo agradezco ZeWu Jun, ahora si me disculpa debo retirarme. Los invitó a pasar al salón principal — Jiang Cheng se dirigió al líder Lan con respeto y después miró con furia a Wei WuXian —acompáñame, eres mi familia.
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Sin Restricciones (XiYao)
FanfictionLan Xichen ha pasado cinco años en reclusión expiando las culpas de haberle dado muerte a su hermano jurado más joven a pesar del amor que sentía, anteponiendo el deber y la justicia sobre sus sentimientos más profundos. Una idea cruza por su mente...