ᘔᑫ Eʟ ᴄʜɪᴄᴏ ɴᴏᴄᴛᴜʀɴᴏ. | Changlix.

🔦 11 🔦

"Seungkwan"

Ese era el nombre definitivo de mi pequeño hermano menor el cual creía haber perdido. Todo por fin estaba claro, todo lo que me lamentaba, culpaba, era completamente tiempo perdido que no tenía sentido.

Aun me sentía dolido al enterarme por lo que realmente había pasado con mi familia, aunque había algo mas que no podía sacarme de la cabeza... Changbin, fue el que me salvo en cada de momento, me apoyaba inconscientemente, avisaba a los chicos para que ellos fueran los que me ayudaran de parte de el, realmente trataba de protegerme, como esa vez que me había dicho en la cara mas siempre hacia caso omiso a todo lo que me decía en ese momento, quejándome en pequeñas palabras que hacia que no me importara el tema. Sentía afecto por él, debía de admitirlo... todo paso tan rápido, dentro de una semana, dentro de cuatro horas que simplemente que aunque me cueste olvidar, insistían en quedarse conmigo, en mi mente. Tenia que disculparme lo antes posible con el, no soportaría un mes mas sin hablar, sin verlo... era ahora o nunca en el que tendría que dar el primer paso.

Le dí un pequeño beso en la nariz a mi pequeño hermano que tenia en brazos y suspiré nervioso.

- Gracias padre... te prometo que no le pasará nada mientras yo tenga vida - le dediqué una pequeña sonrisa por lo que me la devolvió, presionando con sus dedos mi mejilla algo cerca de mis pecas.

- Sé lo mucho que cuidarás de el Lix - dijo el adulto tratando de sentarse más en la camilla mas no pudo por un dolor en la espalda que lo detuvo al instante. - Ojalá todos mis actos estos años que he hecho sean resueltos sin violencia o en contra de alguien... - habló bajo.

- ¿Qué actos te refieres, padre? - dudé frunciendo el ceño al no entender a que se refería exactamente.

Mi padre me miró fijamente, sin despegar la vista unos segundos tampoco parpadeaba sus ojos en dentro de dos minutos. Me desesperé un poco al sentir una corriente electrica recorrer mi espalda y hacer temblar mis manos.
Me acerqué un poco a mi padre, abrazando con un solo brazo al bebé que tenia y con mi otra mano la moví frente al rostro ajeno para ver si reaccionaba o despertaba.

- ¿Padre, estás bien? - pregunté con miedo hasta encogerme de hombros.

Solté un leve suspiro de alivio al ver como cerró con fuerza sus ojos y al volver a abrirlos, se le notaban unas oscuras ojeras en la cara. Hizo sonar unos cuantos huesos de su cuello antes de tocer apagado con la boca cerrada y comenzar a hablar.

- Nada, solo espero que Seungkwan y tu sean los últimos niños que vea en mi vida vivos - dijo neutro y desvió su mirada a mi hermano, que volvia a tomarlo con ambos brazos.

- ¿Ver... vivos? - avergoncé más confundido sin tener por todo claro en mi mente.

Mi padre asintió con la cabeza y me arrebató tratando de ser lo suave posible, que practicamente no fue a Seungkwan de mis brazos para tenerlo sostenido con sus manos por debajo de sus brazos y un poco en el aire, mirandoló fijamente.

- Padre, ten más cuidado con él - alerté preocupado y sobando mis manos por lo poco bruto que fue la acción de hace poco.

- Mi pequeño Kwan... - bufó y sonrió pequeño mostrando parte de sus dientes - prometo que tendrás un futuro sin personas que te molesten... por que las malas personas, siempre son las que tratan de muerte - amplió más su sonrisa y besó la pequeña nariz de mi hermano.

Me quedé perplejo ante las palabras de mi padre hacia Seungkwan, ¿En verdad mi padre se encontraba bien en estos momentos? ¿De donde habrá sacado esos temas y palabras para alguien tan pequeño?

Desesperé un poco por lo que comencé a mover mis piernas y ver la hora desde un reloj colgado en la pared en una parte de la habitación y me di media vuelta dispuesto a salir de allí y ir a la plaza pero una voz me paralizó en menos de un segundo.