El Club de las Ommas Desesperadas #Wattys2020

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Cuando era un poco más joven, antes de dar a luz a su primer hijo, Jiyong se dedicó en cuerpo y alma a trabajar como modelo para diferentes marcas reconocidas. Pero no siempre fue así, y como toda historia, ésta también tiene su parte mas realista (esto no quiere decir que el resto no lo fuera).

Jiyong fue descubierto un par de días antes de su cumpleaños cuando se probaba ropa en una prestigiosa boutique. Su acompañante le había pedido que desfilara cada prenda que se pusiera para que pueda lucirla y así escoger la mejor opción. A su salida de la tienda, luego de pagar por una casaca de cuero y unos zapatos, es interceptado por una señora de unos 28 años quien le brinda la tarjeta de su agencia de modelos.

-Hola. Buenas tardes -saluda la mujer de cabellera negra- Mi nombre es Sunmi y confieso que te estuve buscando desde mucho tiempo -admite sonriente-. Soy la directora de KModel Agency y para mí sería un honor el que aceptes formar parte de mi compañía.

-Hola. Buenas tardes -devuelve el saludo después de escuchar hablar a la agente-. Ahora me encuentro un poco ocupado, pero si me permite mañana mismo estoy en su agencia.

-Me parece excelente -le sonríe la mujer- Te espero a las 10. Puntual, por favor. Adiós. -se retira del lugar y un asombrado Jiyong la ve caminar hacia un auto negro aparcado en la esquina.

Jiyong aún no podía creer lo que le acaba de suceder. Él desde los 16 años se había dedicado a tomarse fotos y subirlas a su página de Instagram. Cada día se esforzaba porque cada imagen se viera perfecta y acorde al feedback que quería tener.

Los primeros seis meses su seguidores empezaron a aumentar de manera lenta por más de que su trabajo sea uno de los mejores en el ámbito que estaba. Al séptimo es invitado a la semana de la moda en Corea, evento que tenía como invitada especial a Bella Hadid.

El día del evento, gracias a una mentira blanca como él lo llama, consigue pasar al camerino y conocer a la súper modelo. Bella en todo momento se comportó de una forma tan única lo que hizo que Jiyong la admirara más.

Con cuidado llama a una estilista, le entrega su móvil y le pide que saque un par de fotos; en la primera saliendo posando y en la segunda recibiendo un beso en la mejilla por parte de la modelo. El castaño agradece el detalle y sale del lugar para poder llegar a casa, editar las fotos y subirlas antes de que se apague su móvil.

Al día siguiente desconecta su celular del cargador y entra a su página para ver cuantos "me encantan" habían obtenido las fotos. El chico tuvo que cerrar y abrir la cuenta varias veces al no creer lo que veía. En menos de 24 horas pasó de tener 100 mil seguidores a contar con más de 1 millón 700 mil. Al príncipio no entendía lo que ocurría hasta que leyó los comentarios, llamando uno su atención, diciendo lo siguiente:

"Bella no es de subir fotos con cualquier persona desconocida o que no sea de su interés o gusto personal pero ahora entiendo por qué lo hizo contigo. Cariño, tu Instagram es increíble."

En el buscador de la red social escribe el nombre de la modelo y le da click a su página. La última foto subida era de hace un par de horas y se trataba de un repost de su publicación.

"Si tuviera que describirte en una palabra, esa sería pasión. Desde el primer instante que nos vimos pude percibir eso de ti. Fue un honor el que te conociera. Cariño, naciste para ser modelo, y de los mejores. Escríbeme cuando desfiles en las pasarelas de Milán, estaré en primera fila para verte y sentirme orgullosa. Me hace muy feliz el ser tu amiga. Besos."

Esa publicación fue la que lo volvió viral en las redes sociales y lo hizo conocido cómo: "El amigo de Bella". Esto lo llevó a posar y firmar contratos pequeños con marcas como Zara, H&M, Adidas, entre otras. Básicamente esta es la razón por la cuál Sunmi lo esperó a la salida del centro comercial.