Steve
Miré el estante de los cereales detenidamente por unos segundos hasta decidirme por tres variedades distintas y cogí tres de cada uno. Luego busqué los que no tenían gluten para Sue y le cogí dos.
– Mira esto, cariño –Tony me enseñó unas bolas de colores–. Bombas de sales para el baño.
– ¿Bombas?
¿Qué se suponía que era eso?
– Echas una en el agua de la bañera y tienes un bonito baño con sales, aromas y colores.
– ¿Qué ha sido de los baños de espuma tradicionales?
– Ok, boomer.
Fruncí el ceño mirándole extrañado. ¿Qué diablos significaba eso?
– ¿Qué?
– Cariño no te ofendas, ¿pero vives en nuestro siglo?
Definitivamente se estaba burlando de mí. E incluso descaradamente porque sabe que no le comprendo.
Comprendía que los niños entendieran todas las cosas de moda y se burlaran, es lo normal. Pero Tony sabía familiarizarse con las cosas modernas mejor que yo y a veces me molestaba que se burlara de mí solo para divertirse a mi costa.
Maria y Harley llegaron con la comida chatarra que Tony les había dejado comprar.
Iba a obligarles a racionarla por mucho que se quejaran. Como siempre debía ser yo el malo ya que Tony tenía tan malas costumbres como los niños.
– Pops, ¿estas eran las galletas que te gustaban? –Me preguntó Harley enseñándome un paquete de galletas con chispas de chocolate.
– No, dije brownies con chispas de chocolate.
– ¡Te lo dije! –Se quejó Maria.
– Pues toma, ve a cambiarlo tan lista que eres.
Maria miró con mala a Harley, pero se dio media vuelta con el paquete de galletas.
– ¿Por qué eres tan desagradable con tu hermana? –Le preguntó Tony
Él no respondió nada, tan solo se limitó agachar la cabeza y resoplar.
Tony fue tras Maria para asegurarse que no se perdiera y yo quedé mirando mal a Harley.
Últimamente todo lo que recibíamos de él era un gruñido. No quería pensar que pudiera estar pasándole algo que no nos contaba y por eso tenía ese mal humor siempre, pero Tony decía que debían ser las hormonas que le estaban llegando.
Dijo también otras cosas que debían causar sus hormonas en las que prefería realmente no pensar en absoluto. Me era difícil imaginar a mis hijos queriendo hacer tal cosa. No es que no sepa que van hacerlo, pero prefiero no pensarlo. Ni siquiera me gusta pensarlo de mi mismo, tan solo me dejo llevar con Tony, por lo demás me suele incomodar el tema sexual.
Me acerqué a él, tratando de no ser tan hostil, y pasé un brazo por sus hombros para darle un poco de ánimo.
– Oye, seguro tu puedes resolverme una duda –dije repentinamente, intentando sonar amigable–. ¿Qué significa "boomer"?
Harley alzó una ceja mirándome, para un segundo después echarse a reír.
– ¿Dónde has aprendido esa palabra?
– Tu padre me ha llamado así.
Su risa se hizo más fuerte, e incluso se apoyo en el carrito de la compra para no caer.
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SUPERDADS - Día A Día
Fiksi PenggemarSigue el día a día en la vida de Steve y Tony, después de 20 años casados, cuidando y lidiando con sus 6 hijos: Peter, Susan, Johnny, Harley, Maria y Morgan.