𝓑𝓻𝓾𝓽𝓪𝓵 𝓛𝓸𝓿𝓮 || 𝓑𝓲𝓵𝓵𝓲𝓮 𝓙𝓸𝓮 & 𝓐𝓿𝓻𝓲𝓵 𝓛𝓪𝓿𝓲𝓰𝓷𝓮

Capitulo 11

Y ahí estaba ella, viéndose en el espejo, Alex entraba de vez en cuando a ver cómo le iba, no había problema en que el la viera en ropa interior, ya que se tenían mucha confianza.

Optó por ponerse unos jeans negros que de alguna manera se veían elegantes, además de que tenían una pequeña cadena con una estrella que resaltaba, una sudadera de rayas y unos tacones negros. Callejero y elegante al mismo tiempo.

Cuando terminó de cambiarse se fue a la a sala a mirar la televisión mientas esperaba a que Billie llegará, estaba nerviosa.

Miraba tranquilamente el televisor hasta que sonó el timbre, se tenso un poco y se levantó a abrir mientras que Alex la miraba con autoridad de alguna manera. Ella abrió la puerta.

— Hola Billie.

— Hola linda, te vez genial —dijo apenado.

— Jeje gracias —ella se sonrojo.

— Bueno ¿Nos vamos?

— Wowowow ¿A dónde vas a llevar a mi niña? —dijo Alex abrazando de manera protectora a Avril.

— Solo iremos a caminar por ahí, cenar ver una película y esas cosas.

— Más vale que me la traigas completa y no muy tarde.

— Como diga el señor —dijo Billie tomando a Avril en sus brazos— nos vemos papá jaja.

— Muy gracioso.

Ellos salieron de la casa riendo.

Narra Avril:

Dios no se que hace Billie que me hace sentir tan bien, es agradable estar a su lado, no creo que pueda seguir negando lo que siento, me gusta, lo admito, pero no creo que el sienta lo mismo que yo , por lo que no diré nada.

— ¿Y a dónde iremos? —realmente no teníamos un plan

— Podemos ir al cine si quieres  o a la feria, dónde tú quieras.

— Pues la feria no estaría mal.

— Bien, hay una feria, está algo lejos, unos 30 minutos caminando, pero podemos tomar un taxi si quieres .

— No, prefiero caminar —sonreí.

Emprendimos camino y Billie todo el tiempo hacia comentarios graciosos sobre cualquier cosa y me preguntaba cosas personales, era realmente divertido, después de un rato llegamos.

— ¿Y bien? A qué te quieres subir linda? Espera, adivinare ¿Rueda de la fortuna?

— Me ofendes —dije haciéndome la indignada— quiero la montaña rusa.

— Wow.

— ¿Qué pasa?

— Nada, solo que creí que eras de esas chicas que le tienen miedo a ese tipo de juegos.

— Enserio que me ofendes ¿Vamos?

— Claro que sí.

Nos formamos para subir a la montaña rusa y note que Billie se tensó.

— ¿Todo en orden Billie?

— S-si, todo genial.

— Oye no subiremos si no quieres.

— ¿Qué? ¡No! Digo, te traje para que lo disfrutaras, no nos iremos.

— Pero si tienes miedo...

— No tengo miedo joder, es solo que nunca había subido a uno antes —no me la creo ¿Enserio?— además soy todo un macho y los machos no se asustan.