Y te sigo amando (Alastor x reader) PAUSADA

Capitulo veintiuno

A la mañana siguiente nos despertamos por la puta alarma de Alastor, que marcaba las 06:00.

"Porque tan temprana" respondo mientras abrocho los botones la camisa.

El se levanta y la apaga, para luego quedarse sentado en el borde por un largo rato, volviendo a mirar a la puta esquina.

"Cariño, los locutores de radio tienen un programa todos los dias" dice presiona sus dedos contra mi estómago.

"N-no estás resfriado-" no puedo terminar de decir bien la oración ya que una risa me corta "no me toques la pansa" advierto mientras me siento intentando de que no vuelva a tocarla.

Tocar mi estómago es uno de mis puntos débiles más fuertes.

"Así?" Pregunta mientras se pone los lentes "y a que se debe eso señorita Ferrer" acerca un poco más su mano a mi estómago.

Antes de que pueda hacer algo, tomo su mano y lo acerco a mi "mmmm no se si se lo debería decir a un asesino" susurro carca de sus labios.

"Solo las personas tontas confían en un asesino" respondo mientras acerca su labios para un beso, pero me alejo.

"Para mi suerte estoy saliendo con un asesino caníbal" le doy un rápido beso "son raros de ver pero existen" digo mientras me corro para levantarme e ir a buscar mi ropa.

"Creo que eso sería aún peor mi amor" responde también levantándose y yendo a su ropero, para sacar un saco, una camisa, pantalón, medias y su icónica corbata de moño.

"Claro cariño" digo prestándole importancia "y ya te sientes mejor por lo que veo".

"Si cariño, tus cuidados me dejaron como nuevo" se empieza a poner la camisa.

"Quien iba a decir que el caldo funciono" susurro mientras entro a la el baño para cambiarme.

"Que cariño?".

"Nada".

(...)

El desayuno fue más una guerra de quien cosina a quien en la cual el termino ganando por la superioridad de edad.

Diciendo que los jóvenes tienen que ver lo que hacen los adultos.

"Pero en unas semanas cumplo dieciocho" exclamó.

"En unas semanas cumplís dieciocho, pero por ahora sos una pequeña menor de edad" suelta una risa para agarrar el sartén.

Y aunque me cueste decirlo... pues su comida es casi tan Rica  como la de mi mamá, es más creo que por poco la iguala.

Pero bueno, debido a nuestra guerra, tuvimos que salir corriendo, ya que Al estaba llegando tarde al trabajo.

Y lo acompañé hasta lo máximo que pude, pero llego en un momento el cual si o si tendría que tomar otra calle, la cual para mi suerte es muy tranquila.

Alastor me toma cariñosamente de mis mejillas.

"Cuidate y trata de llegar lo más rápido a tu casa, no me sorprendería que nevara" dice lo último mirando hacia el cielo, dándome una mejor vista de sus mejillas preciosas sonrojadas por el frío, que poco a poco va poblando las calles de Nueva Orleans.

"Si Al voy a estar bien, hace tiempo que vivo por acá.... aparte voy a ver si me encuentro con ese amistoso borracho con el que hable en la noche pasada" digo mientras miro las calles, haciendo que busco a esa persona.

Alastor me toma suavemente de la barbilla para que lo mire, y UF con que linda carita me encontré.

"Que sucede amor" digo aguantando las ganas de reír al ver un puchero en su rostro.