Y te sigo amando (Alastor x reader) PAUSADA

Capítulo cuarenta y dos

Me despierto de golpe siendo recibida por el frío del cuarto...

Mi respiración está agiatada muy agitada, teniendo que poner mi mano en mi pecho para que esta se tranquilice. Cosa que logro por poco, sin hablar que siento como mi corazón va a mil por hora.

Pero... y si eso no fue un sueño... y si Al de verdad esta muerdo...

Pongo mi mano sobre mi cuello en busca de el collar que el me dio... pero no esta, el collar no está.

Me levanto rápidamente para darme cuenta que estoy usando mi camisón y no mi ropa común como el el 'sueño', pero nadie sabe si fue de verdad o de mentira.

Así que sin pensarlo salgo corriendo de el cuarto, rezando mentalmente para que el este vivo, vivo y aquí, junto a mi.

Toco despacio la puerta, pero no recibo respuesta haciendo que mi respiración se vuelva más errática, vuelvo a tocar una vez más fuerte, pero nada, no hay respuestas.

Y si de verdad se murió y yo estoy acá como una tonta tocando su puerta esperando que algo me responda.

Pero no me rindo, es más ahora toco la puerta más fuerte que nunca, sintiendo como poco a poco mis ojos derraman lágrimas por el dolor y la desesperación.

Estoy por abrir la puerta... pero en eso está se abre sola dejando ver a Al adormilado mientras se frota los ojos.

No lo dejo ni hablar porque estoy abrazándome fuertemente contra su pecho, como si mi vida dependiera de él.

"Amor que paso?" Pregunta un poco asustado al ver mi estado de pánico.

Yo empiezo a negar con la cabeza y le explico todo lo que soñe con lujo de detalle, pero no le conté lo de los demás sueño, solo este.

El me mira por un momento y me limpia las lágrimas.

"Mon amour solo fue un sueño, nada de eso va a pasar" susurra mientras sus labios se apoyan contra mi coronilla.

Yo solo suelto un sollozo, negandome a soltarlo.

Siento sus manos tomarme de las piernas para después tenerme agarrada estilo nupcial.

"Bueno, si mi bella dama tiene pesadillas, será mi deber protegerla de estas" dice orgullosamente mientras me lleva hasta su cama, para dejarme en esta cariñosamente.

"Al no es necesario" digo mientras veo como se acuesta a mi lado y nos tapa a los dos con sus sábanas.

"Claro que si mi cariño" se recuesta de costado para verme, esperando que yo haga lo mismo.

Girando mis ojos lo hago y me consentro a ver su rostro sin ningún tipo de lentes.... totalmente hermoso.

"Te dormiste antes que termine de tocar el piano" dice mientras estira su mano para tocarme la mejilla "te veías tan delicada, como una hermosa muñeca de porcelana" susurra para después traerme a su cuerpo "así que te lleve a tu cuarto donde te deje en tu cama... nunca creí que tendrías una pesadilla" susurra despacio.

"Amor nadie sabe cuando van a pasar" susurro contra su cuello, sintiendo cada vez, más pesados mis ojos.

"Por desgracia tienes razon" dice en el mismo tono que yo.

Dando por terminada la charla cuando ninguno de los dos decimos nada dejando que el sueño se apodere de nuestros jóvenes cuerpos.

(...)

A diferencia de tantas mañanas que me despierto gracias a la luz del sol, hoy me temo que me desperté por el destestante sonido se la alarma de Al.