Capitulo treinta y dos

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Chicos no puedo creer que estemos en esta cantidad de capítulos :"v

Después de el hermoso regalo seguimos bailando hasta que se hizo muy tarde, y Al tenia algunos asuntos pendientes, dijo que iba a ir a cazar por una semana completa, lo que significa una semana sin ver a Al.

Cuando llegamos a mi casa, Al paso rápidamente a saludar a mi familia para luego irse, diciendo que mañana a la mañana el partiría hacia el bosque para ver algunas cosas y cazar.

Que cosas iba a ver, no lo sé, porque me distraje hablando con mis hermanas sobre el regalo y no le pude preguntar.

"Hija puedo ver el dije que te dio Alastor" pregunta mi madre mientras entra a mi cuarto.

"Si" me lo saco y se lo doy dejando que ella lo inspeccione.

"Es bellísimo" lo coloca sobre la mesita de noche "son muy raros, es más me acuerdo que el abuelo le dio uno así a la abuela" se sienta a mi lado.

"Y que paso con el?".

Ella me mira y después de un momento habla "cuando el abuelo murió mi madre lo partió a la mitad, para que una parte lo tenga en abuelo en su tumba y otra la tenga ella".

"Y a ella la enterraron con la otra parte del dije?" Le pregunto mientras enciendo el velador.

"No lo sabemos... nunca nos pusimos a ver eso, pero creo que estaba dentro de la camisa con la que la enterraron.

"Que lindo" susurro "es lindo poder amar a una sola persona toda la vida por más que no esté presente" agarro el collar y abro el girasol para ver la frase.

"Si... pero eso ella no lo pudo lograr sola, nos tenía a mi y al tío Ethan que la hacíamos recordar de manera directa a su primer amor" levanto una ceja "somos muy parecidos a cuando el abuelo era joven... más tu tío claro" se levanta de la cama y camina hacia la puerta "hasta mañana mi pequeña".

"Hasta mañana".

Me acomodó en mi cama cubriendome con mis sábanas a la espera del sueño, peron parece que este no tiene ganas de venir así que decido simplemente ir a mi escritorio esperando a seguir esperando a este.

Pero al no dar señal, agarro un lápiz de escribir, una pluma, su gotero y como no una hoja.

A empezar a dibujar.

(...)

NARRA 3ra PERSONA

A las seis de la mañana empezó a sonar el despertador de el joven locutor de radio.

Pero esta llego un poco tarde debido a que este se levanto una hora antes para preparar todo lo necesario para un buen día de caza.

Había Guardado todo tipo de arma en sus fundas respectivas para luego poco a poco los valla transportando a el auto de su buen amigo Husk (el cual pudo tenerlo gracias a que gano una apuesta), por último y lo más importante se encargó de darse una buena caminata sobre la lujosa alfombra que escondía su secreto no tan secreto, ya que gran parte de sus amigos más cercanos y pareja sabían sobre sus hábitos alimenticios.

Levanto la alfombra y saco una pequeña llave que siempre lleva en sus bolsillos traseros, para abrir la pequeña puerta que da paso a donde estaba su comida. Solo que ahora estaba vacío.

El hombre que lo atacó hace unas semanas que fue cariñosamente noqueado por usted, ya se encontraba totalmente congelado como bonitas fetas de carne seca.
Pero en el momento de la preparación, el inmundo mancho con su sangre todo su piso, el cual le provocó algunos problemas a la hora de limpiarlo, pero tenía una muy buena amiga que la ayudo, también agregando de que sus sombras dieron los toques finales.

Y te sigo amando (Alastor x reader) PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora