Eres lo que necesito.

Capítulo 10

Narra Mayte

Había recibido un mensaje del Erick den donde decía que estaría con su familia por lo que hoy no había terapia así que podía irme a mi casa una vez finalizado mi turno en la clínica.

Cuando llegué a casa la Javi no estaba, tenía turno de noche así que hoy me tocaba estar sola en la casa. La verdad no hice mucho; una comida liviana y una ducha para dormir relajadamente.

Al otro día

Comencé mi rutina en la clínica, pero una supuesta fuga de gas nos hizo acabar mucho antes la jornada. Me subí a mi auto y manejé hasta la casa del Erick, toqué la puerta y me abrió la Gina, a decir verdad parecía sorprendida y nerviosa al verme en la puerta.

—Hola—La saludé—¿Pasa algo?.

—Mayte—Parecía muy sorprendida.

—Gina, ¿Qué pasa? —Insistí.

—¿Quién es? —Preguntó una voz femenina desde dentro de la casa—Hola—Saludó una chica delgada—¿Quién eres tú?.

—Hola, soy Mayte. La Kinesióloga del Erick—Le informé sonriendo.

—Estefy—Extendió su mano—La polola del Erick—No pude evitar sentir una sensación extraña.

—Un gusto—Articulé después de un pequeño trance—Gina, yo sólo venía a ver si necesitabas algo de ayuda—La miré buscando una respuesta.

—Puedes irte, no creo que el Erick quiera tener terapias—Se precipitó la chica.

—¿Quién es? —Preguntó otra voz femenina, era una señora que me sonreía—Hola—Me saludó.

—Hola—Respondí—Gina, nos vemos después.

—No te vayas—Me dijo la señora—Soy la mamá del Erick, tu debes ser Mayte.

—¿Cómo sabes, Karina? —Preguntó la chica.

—Sé no más—La cortó—Pasa

Entramos a la casa, la verdad yo sólo quería irme de ahí.

—Erick—Llamó su mamá y él se asomó por el pasillo.

—Mayte—Me dijo sorprendido y nervioso—¿Cómo estás? —Me besó en la mejilla.

—Bien—Trataba de no parecer tan afectada, pero estaba confundida.

—Yo olvidé llamarte para decirte lo de la terapia—Se notaba demasiado nervioso y creo que confundido igual que yo—

—Bueno, no te preocupes. Otro día retomamos—Me levanté del sofá—Un gusto de conocerlos—Me despedí de los presentes y salí a la calle por mi auto.

—Mayte—Me llamó el Erick.

—¿Qué quieres? —Pregunté mientras abría la puerta del auto.

—Déjame explicarte. No es lo que tú piensas.

—No de seguro que no—Reí sin ganas—Nos vemos—Iba a cerrar la puerta del auto cuando se opuso.

—Mayte, escúchame—Insistió—Mi mamá sabe todo, ella no quiere a la Estefy ni la invitó ella sólo se les pegó. Yo de hace tiempo que no la veía de hecho ni hablábamos.

—Si seguro. Ahora déjame irme—Intenté cerrar la puerta pero no me dejó—Ya Erick, dejemos todo hasta aquí.

—No, yo no voy a dejar las cosas así porque no son como tú crees.

—¿Y cómo son entonces?.

—Ella solo está conmigo por interés—Rodee los ojos—No hagas eso, te juro que yo voy a terminar con ella. Yo te quiero a ti Mayte.