MALDITA OBSESIÓN

capítulo 12: Que te parece un trío

A lo lejo de mí conocimiento puedo escuchar que alguien pronuncia mi nombre. -Daniel... despierta. -Al hacerlo, veo a una chica de piel caucásica arrodillada chupando me el pene.

Por fin he logrado que te dispiertes dormilón, ¿sabes algo? -Tienes un buen paquete muy entretenido aquí abajo, creó que me quedaré un poco más jugando con él, no vaya ser que alguien más venga y no pueda divertirme yo sola.

-Deja mi cuerpo en paz, no soy un muñeco de porcelana para que vengas sastifaser tus adicciones sexuales conmigo.

-Escucha muy bien esclavo, aquí estás para sastifaser nuestros deseos. -apretandome demasiado fuerte los testículos con su mano.

Al terminar de haberme dicho eso, ella se arrodilló de nuevo y con su mano izquierda levantó mi miembro, para luego besar cada uno de mis testículos tranquilizando me el dolor. -Entonces fué sacando su lengua para volver a lo mismo en lo que estábamos antes que despertara.

Una pelirrubia entra a la habitación y llama ha la otra chica por su nombre "Génesis" que demonios estás haciendo con ese hombre.

-Pues nada "Grabiela", solamente me divertía haciéndole un oral.

-Tú sabes muy bien que no puedes divertirte sin mi, haz entendido.

-Si Grabiela, pero si quieres aún nos podemos divertir las dos con él. -¿que te parece la propuesta?.

-Pues la verdad me haz despertado las ganas, así que acepto.

Cada una de las chicas se pusieron un artefacto en la cintura, el cuál éste tenía un pene artificial de gran tamaño, que les quedaba justamente por encima de su vagina.

De igual forma me llevaron a la cama, sin antes proporcionarme una golpiza. -Y si no me sometía a sus juegos sexuales me electrucutaban con el simple hecho de apretar un botón, por medió de un collar que me habían colocado alrededor de mi cuello y por éste aparato ellas podían dominarme a sus antojos.

Me he acostado de espalda sobre la cama, mientras que la chica caucásica se arrodilla encima de mi pene abrazando mis muslos con los suyos, controlando la amplitud del movimiento vertical y orizontal para maximizar las sensaciones sobre su clítoris además de sus paredes vaginales, escogiendo ritmo y velocidad de ella misma.

Mientras que la pelirrubia le acaricia la espalda, introduciendole a la vez el consolador en el ano, ocasionandole más sensación a su pareja.

A partir de ese momento, la chica bascula hacia trás llegando hasta mis pies, debido que esta posición le permite retrasar la eyaculación.

Ahora la pelirrubia le dice que es su turno, poniéndose ella de espalda sobre encima de mi, estando yo siempre acostado en la cama.

Gabriela guía el pene hacia su vagina tomando una posición como si me estuviera montando, entonces bacula hacía trás tomando apoyo sobre sus brazos. -Iba y se venía verticalmente accionando sus piernas.

Por tanto Génesis se masturba estando aún costado de la cama, viendo como su pareja es complacida.

En ese momento Grabiela pierde el control por la sensación que está sintiendo en su cuerpo, debido por las caricias que le estoy dando en los senos y al mismo tiempo que juego con su clítoris. -Haciendo que ella moje la cama por un orgasmo, sin detener el nalgueo de sus nalgas en mi cuerpo.

Grabiela también hace de las suyas, provocándole a Daniel una sensación por la forma que ella mueve su cabello. -acariciandole con sus puntas el rostro, ya que se convierte en un estado agradable y la vez placentero para el hombre.

Grabiela se tumba de lado por la debilidad en su cuerpo, desplegando sus piernas en posición de acurrucada, Daniel se posicionó detrás de ella, esposandole los contornos de su cuerpo y penetrandola al instante.

Facilitandole para poder acariciar sus firmes senos y parte de sus cabellos naciente en su clítoris. -Ella comienza a gemir por la sensación y por la masturbación que le estoy otorgando.

A lo que Génesis se le acerca hasta la boca y comienzan a besarse de una a la otra apasionadamente.

Génesis se recuesta de espalda sobre la cama y me pide que se lo haga a ella, al posicionarme encima de Génesis aprieta sus nalgas y curva su cadera. Entonces ondula su cintura en un movimiento circular y vertical, favoreciendo me un desencademiento rápido, al obtener un orgasmo.

Salpicandole Daniel la vagina a Génesis, donde Grabiela pone su lengua para recoger algo de esperma.

Ahora que todo ésto había acabado, las chicas ya no necesitaban nada más de Daniel. Por lo tanto ellas se murmurean sin que Daniel pudiera escuchar una sola palabra de lo que dicen.

Estando desnudo enfrente de ellas, Daniel decide no mencionar una sola palabra al respecto, ya que recibiría una descarga eléctrica al interrumpir la platica.

Génesis se para aún costado de Daniel y con sus suaves manos acaricia el miembro de éste hombre. -Acercando sus labios en uno de sus oídos y diciéndole: haz hecho un buen trabajo cariño, pero ahora es el turno que mi pareja Grabiela decida si vives o mueres.