Cada viernes por la noche [Larry Stylinson]

Sin rumbo

Ya estábamos en abril.

El tiempo pasaba muy rápido. Me había hecho inseparable a ese bar. Contaba los días para que llegara el viernes y así poder ir a tocar por las noches. Era mi rutina favorita. Mis amigos también tenían la suya. Zayn cada viernes al finalizar su turno me acompañaba a casa y pasábamos la madrugada charlando de cosas insensatas. Y Louis amaba los viernes porque su viejo amigo venía siempre ese mismo día a la semana sin falta. Una única vez no pudo venir porque se encontraba enfermo. Louis no sabía y temió que nunca volviera. Esa noche estaba decaído y sin ganas de hablar. No era el mismo.

¿A eso le llamaban amor?

¿Amor era sentir dolor cuando el otro no unía su mitad con la otra mitad?

¿Dolía cuando la otra mitad se alejaba? ¿Se perdía una parte de uno?

Sin dudas, Harry lo había cautivado de tal forma que si no aparecía en la vida de Louis esta se encontraba sin rumbo. Harry era su impulsor, su guía, su brújula y no lo dejaría a la deriva en un territorio desconocido por ambos viajeros inexpertos pero con un único impulsor conocido como amor.

Nunca comprendí porqué Louis cambió tan drásticamente por el rizado. Lucía como un niñito enamorado de su juguete nuevo. En sus ojos ya no había perdición ni desolación sino todo lo contrario. Parecía que al fin había encontrado rumbo en la vida.

¿Acaso él gustaba de..?

Imposible, nadie se enamoraba tan rápido.

Debían ser alucinaciones mías.