Admiración

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Mis citas secretas con Zayn no paraban y temía poseer sentimientos por él.

Nunca me había enamorado, no sabía qué se sentía estarlo. Decidí recurrir a gente experimentada. Supuse que Louis al ser más grande tenía más experiencias. Entonces, acudí a él. Tenía a Zayn pero ni de bromas le preguntaba eso cuando él era el que me había generado el problema.

—Oye, Louis, ¿qué se siente estar enamorado?

Escupió todo su jugo de naranja.

—¿Por qué lo preguntas?

—Bueno, tú debes tener experiencia en eso.

—¿Yo...?

No completó lo que me iba decir al notar que una figura erguida, alta, prepotente había subido al escenario de imprevisto y con cierta timidez al igual que seguridad. Louis se quedó mirando el escenario y a la figura que tomaba el micrófono.

Harry comenzó a hacer karaoke y creería que media audiencia no estuvo preparada para eso.

¡¿Qué demonios?! Estaba anonadado, el tímido rizado se había puesto a cantar sin importarle nada. Bueno, yo tambien sería como él si tuviera su angelical y perfecta voz.

Harry cerró sus ojos yendo a otro universo donde solo era él haciendo catarsis sin importarle nada. La manera en que manejaba los altos y bajos eran increíbles. Sus notas altas eran finísimas y delicadas. Su voz gruesa estaba moldeada para dar vida a grandes melodías. Tenía talento y potencial, muchísimo.

"Falling", nos anunció luego de terminar. Todos los clientes lo miraban estupefactos y cautivados por su voz. Louis a mi lado lo observaba como si fuera algo de otro mundo, un dios, un ángel, un héroe, la perfección. Admiraba al pequeño y dulce rizado, lo notaba.

—Wow —dije y vitoreé a Harry. Muchos me siguieron demostrándole su apoyo.

Miré a Louis quien seguía estático en su sitio. Lo codeé.

—Dile algo.

Caminó a Harry con sus ojos llenos de admiración. Se acercó y le palmeó la espalda con cariño. Le dijo que lo había hecho bien, muy bien. Harry se lo agradeció con una sonrisa. Louis le hizo prometer que la próxima vez hiciera lo mismo, a todos les había encantado su canción. A él también. Harry se ruborizó por eso y comenzó a actuar nervioso y torpe que tropezó con una silla. Antes que cayera, el castaño lo sostuvo. "Estamos por cerrar. Digo porque comenzó a llover. Podrías resfriarte", le dijo Louis esperando que el rizado aceptara su oferta de acompañamiento.

Reí divertido por ese par de tontos y cursis.

—¿Vamos? —preguntó Zayn minutos más tarde.

—Espera, quiero saber qué hará Louis. No lo encuentro por ningún lado. ¿Se estará arreglando?

—Louis tiene que terminar unos papeles, se irá luego. ¿Quieres esperarlo?

—¿No irá con él?

—¿Con quién?

—Con Harry. Se irían juntos.

—No tiene esas intenciones, al menos no hubiera aceptado quedarse rellenando formularios —se encogió de hombros restándole importancia. En cambio, yo me sentí fatal por Louis.

Cada viernes por la noche [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora