Amor de Luna

19. Toda la verdad I

Hope se levantó y se vistió rápidamente con la ropa que había dejado preparada el día anterior. Se puso una cazadora y una camiseta negras, unos vaqueros y unas botas militares negras.

Salió de su habitación y bajó a la entrada. Allí solo estaba Lizzie, que se acercó a ella le dio una abrazo y le dijo que todo iba a salir bien.
Más tarde llegaron todos los demás, tras repasar por última vez el plan, se montaron en el coche y se fueron. El plan era peligroso y arriesgado, podía terminar muy bien o muy mal, pero peor era no intentar hacer nada por esas personas que alguna vez confiaron en ella, esa era la escusa que ponía siempre Hope, intentando hacerse creer que no ponía en peligro a sus amigos por su causa.
El viaje en coche no fue muy largo y cuando llegaron a su destino, la antigua casa de su familia, empezaron a coger las cosas que anteriormente habían dejado preparadas en el coche y que les harían falta.

-Hope, ven un momento, quiero hablar contigo. - dijo Rafael mirando hacia el suelo.

-Claro, pero tiene que ser rápido, porque ya vamos a entrar.

-Mira sé que nada más pongamos un pie dentro de esa casa estaremos en peligro, sé que la persona que ha secuestrado a tus amigos sabía que veníamos y habrá preparado trampas o cosas peores. Quiero que tengas cuidado, si algo te pasase no me lo perdonaría jamás. - mientras Raf decía esto cada vez estaban más cerca, pero parecían no darse cuenta.

-Tranquilo, no me pasará nada, a nadie le pasará nada. Tampoco tienes que ponerte así, ya sé que somos mejores amigos, pero no tienes porqué preocuparte así. - nada más decir eso Hope apartó la mirada de los ojos de Rafael y se dio la vuelta, le había dolido a los dos.

Cuando Hope estaba andando en sentido contrario para terminar de coger las cosas sintió que la mano de Rafael le agarraba la muñeca, se giró y, esta vez, ninguno de los dos pudo contener las ganas de besar al otro. Era un beso suave y dulce. Los dos podrían haberse quedado así durante horas, pero tenían una misión que cumplir, así que se separaron y, con sus caras a muy poca distancia los dos dijeron: "te amo", sonrieron y se dieron otro beso, aunque mucho más que corto que el anterior.
Todos estaban listos, así que se dispusieron a entrar y a empezar el plan.

-Ha llegado el momento de separarnos. Tened cuidado y ayudaros mutuamente. Recordad que sois un equipo y debéis funcionar como tal. - dijo Alaric.

Todos asintieron y cada grupo tomó su camino.

Grupo 1;
Empezaron a caminar y poco después llegaron a una de las puertas que daba a la mazmorra, había varias, por ello el hecho de que hubiese más de un grupo. Empezaron a examinarla, pero no podían abrirla, ni siquiera con magia. Decidieron buscar otra entrada. Al encontrar otra entrada, que si se podía abrir, se dieron cuenta de que en aquellas mazmorras no había ni un alma. Penélope, haciendo uso de su magia, contactó Hope.

Grupo 2;
Estaban a punto de llegar a la puerta que daba a las mazmorras cuando Penélope contactó con Hope, no había nadie allí. Decidieron volver a la entrada y allí verían que hacer ahora. Cuando llegaron el otro grupo todavía no estaba allí, así que se dispusieron a esperar. En ese momento los vieron, estaban ahí entre las sombras de la antigua mansión, Hope se levantó y los desató con sumo silencio. Cuando estaban llegando al lugar donde estaban los demás unos pasos se hicieron presentes en la habitación.

-¿Cómo estáis? Yo feliz de que hayáis caído en mi trampa. Sabía lo de vuestro plan. Estuvisteis demasiado tiempo fuera, me dio tiempo a planearlo todo. - mientras decía esto la misteriosa voz se acercaba a la luz.

Estaban todos de pie, preparados para luchar contra la persona. No sabía porqué ni de qué, pero a Rafael esa voz le resultaba familiar. No pudo contener su expresión asombrada cuando vio a la persona que había causado todo esto.