NO puedo ser solo un amigo #1

15.

Tay sabía que Krist sabía.

El muy curioso los había seguido y escuchado su conversación aquel día en la facultad de bellas artes y, también, lo había confirmado el viernes, cuando habían ido al bar de P'Jennie y Krist no había dejado de alternar la mirada entre N'Gun, Arm y Off, sin mencionar que había estado muy silencioso desde que se habían reunido hace como media hora. Ahora, sentado con sus amigos, en una mesa de la cafetería de la facultad de ingeniería, una única pregunta rondaba la cabeza de Tay, ¿Qué haría Krist con esa información?

También estaba el hecho de que Gun, hacia como diez minutos le había enviado un mensaje preguntado donde estaban y que si Arm estaba con ellos. Era preocupante porque Tay no podía evitar pensar que, tal vez, hoy sería el día, pero, ya no tuvo más tiempo para ello, pues en ese momento pudo observar como Gun estaba cruzando la entrada de la cafetería, dirigiéndose hacia su mesa, con una expresión tímida y triste.

Uy.

– P'Arm –dijo Gun en cuanto hubo llegado a la mesa– ¿Podemos hablar?

– Claro –le respondió Arm, sin embargo, Tay, pudo notar como su rostro se ponía ligeramente pálido. A continuación, se puso de pie y siguió a Gun a la salida de la cafetería, pero, aun así, eran visibles desde la mesa.

– ¿De qué crees que están hablando? –le preguntó Singto a Krist, quien solo le dirigió una mirada interrogativa a Off y, este, a su vez, volvía la mirada hacia donde Arm y Gun hablaban o, más bien, para este punto, discutían, notándose por como Arm agarraba el brazo de Gun y este intentaba liberarse. También porque había escuchado un ligero gruñido proveniente de la persona a su derecha. Tay entonces posó una mano en el hombro de su mejor amigo, transmitiéndole calma y, además, Tay estaba seguro que, aunque sabía perfectamente que Arm jamás sería capaz de dañar a Gun, definitivamente no dudaría en ir a defenderlo.

– Están peleando –afirmó Sing– deberíamos detenerlos

– Es mejor no meternos –declaro Krist, viendo la escena al igual que todos en la mesa y Tay no era un experto en leer labios, pero, estaba casi seguro que Arm le estaba preguntando ¿Por qué? a Gun.

– ¡Ya basta P'Arm! –se escuchó un grito, llamando la atención de todos en la cafetería– Se acabó

Y entonces Gun se estaba dando la vuelta para alejarse de Arm.

Luego de un momento, en el que casi todo el lugar estaba en silencio, a excepción de unos cuantos murmullos, Arm volvió a la mesa.

– ¿Qué paso, P'Arm? –preguntó Sing una vez que Arm se hubo sentado.

– Terminó conmigo –respondió Arm, frunciendo el ceño y luciendo miserable, evitando la mirada de todos. Tay compartió una mirada un tanto nerviosa con New.

– ¿Te dijo por qué? –preguntó esta vez Singto.

– Dice que está enamorado de alguien más –respondió Arm, esta vez, alzando la mirada hacia la persona frente a él, con un semblante serio y sin emociones.

– ¿No te dijo de quién? –volvió a preguntar Singto, a lo que Arm solo hizo un gesto con la cabeza en señal de negación, manteniendo su expresión pétrea sin apartar los ojos de... ¿será posible?, se preguntó Tay– y, ¿no lo has visto con alguien últimamente?

Entonces Arm soltó una pequeña risita que nada tenía de alegre y más bien estaba cargada de sarcasmo y algo así como furia contenida.

¡Mierda!

Él...

¿En qué momento?

– Off, ¿sabes algo de esto? –preguntó finalmente, pero, aun así, Tay supo, no era una pregunta, era confrontación. Seguidamente Tay observo a su amigo levantar la mirada, encarando a Arm.