Elena era una princesa, más conocida como la hija de la Reina Elsa.
Educada, gentil, amable y con un gran corazón, ¿eso podría cambiar cuando conozca a un pirata malvado, arrogante y odioso?
Lo único que podemos decir, es que del odio al amor, sólo...
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Elena
Abrí mis ojos, sobresaltada. Mire a mi alrededor sin entender donde estaba. Mis ojos captaron a los árboles cubiertos de nieve blanca.
¿Pero que...?
Con un gran esfuerzo, obligue a mis piernas a pararse.
¿Donde mierda estaba?
No recordaba nada. Absolutamente nada. ¿Como había llegado aquí?
Di unos pequeños pasos cuando un ardor fuerte en mi rodilla derecha hizo que pare, la toque y mis manos se mojaron.
Era sangre.
Tenía una gran herida en mi rodilla. Carajo, hasta podía apostar que veía mis músculos. Para mi fortuna, traía una pequeña chompa delgada, me la saqué e intenté rasgarla. Al no poder, una parte de la chompa la puse entre mis dientes y con un gran esfuerzo, la rompí. Cuando lo hice, agarre el pedazo roto y rápidamente la envolví en mi rodilla. Con esto, la hemorragia iba a parar un poco.
Comencé a caminar dando pequeños pasos y a la vez dando pequeños quejidos por todo el esfuerzo que estaba haciendo. Mire el cielo y supe que pronto anochecería.
¡¿Donde estaba?!
¡¿Que había pasado y como había llegado aquí?!
Lo último que recuerdo es que ... estaba en el ¿bosque? Trate de hacer un esfuerzo sobre humano para recordar.
¡Eso es!
Estaba en el bosque con Diego, teníamos una cita. Después de eso, no recuerdo nada más. ¿Perdí la memoria?
"Eres una tonta, Elena" Me reprochó mi subconsciente. Si hubiera perdido la memoria no recordaría nada.
Continué caminando por un largo rato, hasta que horas después, a lo lejos observé una cabaña. Suspire aliviada.
Camine hasta llegar a esa cabaña y lo primero que hice, fue tocar la puerta.
La educación ante todo.
Volví a tocar la puerta. Talvez no me oyen.
—¿Hola? —Hable, mi voz salió rasposa y me dolía la garganta al hablar ... era como si hubiera gritado mucho.
Me asuste más al pensar que me había lastimado la garganta tratando de pedir ayuda.
—Ayuda por favor —Volví a decir algo. —¿Hay alguien aquí?
Al no obtener respuesta, decidida abrí la puerta. Metí mi cabeza para observar un poco a todo estaba oscuro. Lo más extraño era que la nieve caía dentro de la casa.
¡¿Que mierda?!
Aterrada, me di la vuelta para salir del lugar pero me topé con algo ... horrible. Ya no había tal bosque detrás mío, solo había oscuridad, era como si estuviera en una clase limbo o vacío y solo existiera aquella cabaña.
¿Que estaba pasando?
Respire profundamente, no lo iba a negar, estaba completamente aterrada y llena de miedo.
Repetí ese ejercicio un par de veces y totalmente decidida, me di la vuelta, la puerta seguía abierta y la nieve continuaba cayendo. Di un paso, temblaba de miedo, di otro paso más, y otro. Cuando finalmente entre por completo a la cabaña. Mire a mi alrededor y todo estaba oscuro, se podía escuchar el viento y también podía escuchar los latidos apresurados de mi corazón.
La puerta detrás mía se cerró en golpe seco y sobresaltada, me giré para observar pero no había nadie.
Comencé a adentrarme más a aquella cabaña. Sentía miedo pero a la vez curiosidad, parecía todo ... relativamente normal, pase por la cocina, por el comedor y todo estaba en perfecto orden. No había nada.
Suspire con alivio al pensar que no había nada aterrador cuando un pequeño grito volvió a alertarme.
—¡AYUDA! —Escuche como gritaron. La voz se me hacía conocida, muy conocida ¿quien era?
Escuche otro grito y comencé a buscar de donde provenía, busqué por toda la casa cuando llegue hasta una puerta color rojo.
—¡POR FAVOR ALGUIEN! —El grito definitivamente venia de allí.
Con las manos temblorosas, abrí la puerta y todo estaba oscuro, escuche pequeños sollozos venir de allí y también esa persona repetía "ayuda, ayuda, ayuda"
Por Hades.
Entre a la habitación, segura de averiguar quién era y que había pasado, quería ayudar.
La persona que grito tanto, estaba sentada en el piso con las manos en las rodillas.
Una de sus piernas al parecer sangraba.
Su cabello color plomo estaba desordenado y ella tenía un aspecto ...¡esperen! ¿Dije plomo?
Observé mi cabello con terror, el mío también era plomo.
Di unos pasos estaba llegar a la par de ella, estiré mi mano asustada, quería tocar su hombro y por fin averiguar quien era.
Unos centímetros antes de tocarla, ella se dio la vuelta.
Las dos nos miramos a los ojos.
Ella era .... yo.
Abrí los ojos y ella también, me observo y lo único que dijo fue "corre"
Abrí mis ojos y respiré pronfundo, una luz cegadora opacaba mi vista.
Me levante rápidamente sin reparar en cuenta de donde estaba. En mi muñeca tenía ¿sueros? Pero sin importarme por que los tenía, los arranqué y la sangre comenzó a gotear.
Una máquina que estaba al lado mío comenzó a pitear y más asustada, comencé a correr hacia la puerta cuando por Está entro ...Harry y Uma. Ellos al verme se acercaron rápidamente. Tratando de calmarme sin embargo no lo consiguieron.
Una enfermera entró y yo, no podía calmarme, ¿por que "yo" me había dicho a mi misma "corre"? Mis latidos cada vez incrementaban.
—¡Tienen que salir! —No sabia cuando pero ahora la habitación estaba llena de personas con batas blancas.
Trataban de sacar a Harry de la habitación pero el no quería.
—¡Suéltame perra! —El grito tratando de llegar a mi.
Yo seguía frenética.
Un doctor por detrás mío, agarro mi brazo fuertemente y me inyectó algo.
Comencé a ver borroso hasta que caí al piso, mareada y con ganas de dormir.
¿Que carajos pasó?
Hola. Muchas gracias por esperar la actualización. Como sabrán, ya entre a la universidad y estoy estudiando medicina, literalmente no he tenido tiempo ni para respirar. Espero sepan comprender! Los quiero y gracias.
