°•SIETE•°

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El trío siguió hablando de temas variados durante una hora.

-Chicos- dijo Alex, levantándose del piso -, creo que me debería ir.

-¿Quieres que te acompañemos?- preguntó Luzu.

-No gracias, mi casa no queda muy lejos.

-Te voy a dejar a la puerta al menos- dijo el dueño de casa

El más alto dejó el pollito en el suelo y se levantó, Luzu hizo lo mismo, fueron a la puerta y se despidieron del menor, quien se retiró segundos después.

-Ahora que lo pienso- dijo Auron mirando al infinito, parado en la puerta que permanecía abierta -, necesito amueblar mi casa ¿Me quieres acompañar?

-¿Y por qué no haces los muebles tú mismo?- giró su cabeza y miró su perfil, de verdad era atractivo.

-Porque soy nuevo en lo de hacer muebles- volteó y lo miró directamente a sus ojos, pasaron así un rato, Auron quería ver si es que Luzu se podía llegar a poner nervioso por su mirada.

-Bueno, te acompaño- desvío la mirada, ya se estaba comenzando a poner nervioso y su lobo no lo ayudaba mucho.

Auron sonrió victorioso, cerró la puerta y comenzaron a caminar al poblado. Luzu se detuvo mirando el lugar en donde se encontraba su morada.

-Oye Auron- lo llamó, cuando él estuvo a su lado apuntó a la montaña -Mira hacia la montaña.

-¿Qué tiene de especial?- preguntó mientras la miraba.

-Ahí es donde vivo- sonrió.

-¿Y cómo subes?- se volteó a ver al más bajo.

-Por las escaleras de ahí- las señaló.

-Oh- dijo cuando vió las escaleras.

-¿No las habías visto?- preguntó con un tono burlón. No pensó que el alfa podía llegar a ser tan distraído. Este negó, dejando sorprendido al supuesto beta -Tío, son unas jodidas escaleras que suben a la montaña.

-No las había visto- dijo avergonzado

-Bueno, no importa, ahora sabes dónde vivo, vecino- le sonrió y el contrario también sonrió, un poco.

Reanudaron su caminata al pueblo, hablando y lanzándose bromas de vez en cuando. Cuando llegaron, Luzu llevó a Auron a una tienda de muebles que a él le encantaba.

-¿Qué necesitas comprar, Auron?

-Mmm...- pensó un poco -Una cama lo primero- después de decir eso, ambos se quedaron en silencio, pero no era incómodo.

-Mira, aquí venden camas- dijo cuando llegaron a una tienda en la cual vendían camas cómodas y algunas económicas.

Ambos entraron y Auron pasó viendo cama por cama, viendo cual le gustaba más y cual le convenía más.

-Mira esta Auron- le mostró una cama de dos plazas, con respaldo y hecha de madera oscura -¿Te gusta?

-Me encanta- dijo y tomó la etiqueta donde aparecía el precio y se asombro -Em...- era demasiado cara y necesitaba comprar más muebles -Quizás más adelante.

Luzu soltó una risita, a veces le daba ternura algunas reacciones del alfa. Miraron unos minutos más, hasta que Raúl encontró otra cama de dos plazas y más barata que la otra, decidió comprarla y proceder a comprar otros muebles.

Pasaron unas horas ahí, compraron la cama, un colchón, un sillón y un comedor, luego volvieron a la casa de Auron para acomodar los muebles que habían comprado.

°~🐓~°

Ya estaba anocheciendo cuando pusieron todos los muebles.

-Auron, creo que me debería ir- dijo limpiándose las manos en la ropa.

-¿Te acompaño?- preguntó acercándose al mayor.

-No es necesario.

-Insisto- sonrió -no quiero que te pase nada.

-Bueno- una sonrisa boba se adueñó de sus labios, le había parecido un gesto muy tierno del pelinegro.

Se dirigieron a la puerta y Luzu se despidió de Frederick antes de salir, Auron salió detrás de él y cerró la puerta.

Caminaron y subieron por la escalera. Al llegar arriba, el más alto estaba agotado, no sabía cómo Luzu lo hacía para poder subir y bajar esas escaleras todos los días.

-Esta es mi casa- dijo y volteó a ver a Auron y se comenzó a reír.

-No es chistoso- dijo casi en un susurro y se sentó en el suelo -espera un momento.

Pasados unos segundos, Raúl recuperó el aliento y se levantó del suelo.

-¿Mejor?- preguntó Luzu con tono de burla.

-Si.

Se dirigieron a la puerta de la casa, Borja la abrió y miró a Raúl.

-¿Quieres pasar?

-No gracias, ya-

-Entonces espérame un momento- lo interrumpió y seguido entró a su casa. Pasaron unos minutos y volvió a salir con algo entre las manos -toma- le entregó una cajita a Auron -es un detallito, ábrelo en tu casa- sonrió.

-Gracias- sonrió y la recibió -me tengo que ir, nos vemos- se dió la vuelta y comenzó a caminar hacia las escaleras.

-Nos vemos- dijo Luzu.

Auron se dió la vuelta de nuevo y se despidió con la mano de Luzu, mientras caminaba de espalda con cuidado, el otro le respondió de la misma manera, cuando lo hizo, Raúl volvió a caminar hacia las escaleras de frente, para no caerse.

"La bajada fue más fácil que la subida" pensó Auron ya en la base de la escalera y dirigiéndose a su casa. Abrió la puerta y la cerró detrás de él, bajó las escaleras, se fue a sentar al sillón y dejó la caja a un lado.

"¿Qué tendrá la caja?" La Miró y la abrió, tenía un collar rojo, con detalles plateados y una placa, esta estaba intacta, lista para que pusiera el nombre de su mascota. Sonrió y agradeció de nuevo a Luzu mentalmente.

-Frederick- llamó al pollito y este salió de debajo del sillón, lo tomó con cuidado y lo dejó en sus piernas. Agarró el collar y se lo probó, le quedaba un poco grande, pero le servía y se veía aún más adorable de lo que era, según Auron. Después lo dejó en el sillón y se levantó a buscar un plumón, algo punzante y un mechero para grabar el nombre de Frederick en el collar. Mientras los buscaba, pensó bien y decidió pagar para que alguien lo hiciera, ya que su pulso no era el mejor y no se quería lastimar la mano.

Paró de buscar y se fue al baño para cambiarse al pijama e irse a dormir, ya estaba muy cansado y hoy iba a descansar bien. Ya estaba listo para dormir, solo le faltaba algo.

-Frederick- volvió a llamar al pollo, fue al sillón donde lo había dejado y no lo encontró -Frederick, ven- no lo veía, lo buscó y buscó, no lo encontraba, hasta que vió sus pies y ahí estaba, lo había estado siguiendo todo el tiempo -me asustaste- se agachó y lo tomó -no vuelvas a hacer eso- lo regañó de forma suave y lo llevó a su nueva cama y lo dejó a un lado -por hoy vas a dormir aquí, no te acostumbres- se acostó a su lado y se tapó, el pollito se acercó a Auron y se metió por el hueco que quedaba entre él y la ropa de cama. Raúl no sabía cómo viviría si el animal seguía siendo como era. Pasados unos minutos, ambos estaban dormidos, esperando un nuevo día.

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Hola, cómo están?

Perdón si es que hay algo que no se entiende o es muy repetitivo, no puedo pensar bien ahora, ya que están pasando muchas cosas muy rápido. Pero espero que ya en la próxima actualización esté mejor.

Espero que les haya gustado el capítulo, los amoooo <3, bye

PD: Gracias por todo el apoyo, no pensé que iba a recibir tanto uwu

°•A Whisper•° (Luzuplay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora