Juegos de Seducción. [TodoBaku] 💥❄️

Capítulo 15: Quiero Qué Seas Mío.

Los labios del bicolor le quitaban el aire, mientras sentía que unas juguetonas manos, le acariciaban el culo.

Las mejillas del cenizo ardían de rojo. Sabía que las situaciones con Todoroki se volvían demasiado ardientes, y para peor, le gustaba. Sentir esos dedos rozar su piel, mientras su lengua era devorada.

-Ahh...- no pudo evitar el jadeo que salió de sus labios, liberando así el beso. Katsuki miró al bicolor, los heterocromaticos eran fuego puro- ¿No... quieres comer?- preguntó jadeando.

-Me serviré primero el postre- respondió el bicolor metiendo sus manos bajo el vestido, agarrándole el miembro.

-Ah...

-Esto es parte de mí recompensa- susurró, mientras le besaba el cuello.

Katsuki no podía responder, pues lo besos y mordidas de Todoroki lo estaban excitando- Sólo... es un... maldito... juego- habló entre jadeos.

Shotō fue llevando el cuerpo del cenizo, hacia la cama. Bakugō cayó sobre ésta, el bicolor le tomó las piernas y de un movimiento, lo dejó en cuatro.

Katsuki se vio de pronto con el rostro sobre la almohada. El bicolor le levantó el vestido, dejando ese bello culo alzado. Ni siquiera se tomó las molestias de bajarle los slip, simplemente se los rompió.

-¡Hey!- le reclamó el cenizo.

-Te compraré otros- dijo Todoroki, metiéndole la lengua por el ano.

-¡Ahh!- y es que el ataque había sido de sorpresa. Sintió cómo esa húmeda lengua, se paseaba de arriba, para abajo y de dentro para afuera- ¡Ah!- se tensó el doble, cuándo la mano del medio albino, le acarició el miembro.

Estaba duro, excitado, para peor sabía para dónde iba todo esto y la parte que sacaría él. Pero por más qué tratase de forcejar o cambiar de roles, su cuerpo no respondía.

El bicolor, por su lado, disfrutaba de cada centímetro de piel, que sus labios habían probado. Y es que Katsuki, era realmente exquisito.
Pero había una parte de su mente, qué veía a Bakugō besar a Kemy, y eso le hacía poner freno de mano a lo que estaban haciendo. ¿Por qué se sentía tal mal? Esto sólo era un juego, un juego de apostar quién era el mejor, pero ahora parecía a que jugaban a algo diferente, ahora se trataba de quién se enamoraba primero.

El cenizo sintió sus piernas temblar, pues entre la lengua, la masturbación y lo caliente que estaba, quería acabar. Sin embargo aquéllos movimientos, trajeron de vuelta a Shotō, que rápidamente, liberó su parte baja.

Bakugō seguía en cuatro, con el corazón en el boca y el culo parado. Todoroki le dio una nalgada.

-¡Auch!.

-Son duras. Me gustan.

El cenizo lo miró hacia atrás, sus mejillas ardían. Bakugō se sentó en la cama, viendo cómo el bicolor se sacaba la ropa.

-¿Qué haces?.

-Es obvio lo que vamos a hacer- respondió Shotō-, desnudándose por completo. Se acercó a la cama y se subió sobre Katsuki- Quiero qué seas mío- dijo, dándole un beso.

El ojirubí, no sabía cómo reaccionar, sus nerviosas manos fueron a dar tímidamente a la espalda del mayor. El roce de aquéllos dedos, le puso la piel de gallina.

Era demasiado, Todoroki necesitaba sentir la piel de Bakugō por completo, se alejó un poco y levantó el vestido, para sacarlo por la cabeza del cenizo, dejando sólo los guantes.

-Quiero sentirte- dijo Shotō, hundiendo su rostro en el cuello del ojirubí, mientras Katsuki sentía su piel, quemarse con la del bicolor.

Besó su cuello, recorriéndolo, mientras buscaba esos dulces labios. Bakugō se sintió completamente perdido en brazos de Todoroki. Su mente procesaba de forma rápida, toda la situación que estaba viviendo. El cómo lo hacía sentir Kemy y cómo se sentía ahora con Shotō. Era una enorme diferencia, pero a pesar de eso, estaba confundido. No era fácil pensar que estaba loco por el bicolor, por sus manos, besos y caricias. Eran hombres y además seguían siendo rivales, esto no podía ser.