Dame una razón para estar contigo (#2 Odio a las chicas)

Capítulo 25

Ridley:

Llame a mis padres para decirles que me quedare en casa de Trish, ella me alisto su cama y me dejo sola como se lo pedí.

Caleb hablo conmigo por unos minutos y finalizo con un mensaje:

"Trata de descansar, por favor. Te amo"

Leí su mensaje dos veces y cuando quise apagar el móvil, escuché ruidos afuera de la habitación.

Me levante y todo para ver a mi hermano entrando por la puerta, Darren me examino sorprendido.

Lo vi tragar y se acerco.

—Dejala, Darren.—Le pidió Trish.—Ya viste que si está conmigo.

¿Creía que estaba con Caleb?

A estas alturas es el único problema que tiene.

No el que me haya golpeado.

—Levantate, tenemos que ir a casa.—Me ordena.

—Darren, dejala.

—¡Tú no te metas!.—Ahora le está gritando a Trish, sin embargo lo escucho maldecir cuando ve los ojos llorosos de mi mejor amiga.—Nena, lo siento, por favor...

Trish me mira.

—Está bien, Trish.

Con esa última mirada, alcanzo convencerla que me deje con mi hermano.

No miro a Darren en ningún momento hasta que se sienta a mi lado, sobre la cama.

Me examina el rostro, para ser específica, donde me golpeo.

—Pulga..

Despacio lo miro.

—Nunca quise lastimarte.

Y lo hiciste.

—Yo jamás te golpearía. —Me dice.—Reaccione cuando vi que lo estabas defendiendo.

—Y lo seguiré haciendo.—Le interrumpo, las lágrimas vuelven a llenar mis ojos.—Sé que no lo entiende.

Veo su cuerpo tenso.

—Pero amo a Caleb, lo he amado siempre.

Las cejas de mi hermano se juntan.

—Y no queríamos engañarte, te lo íbamos a decir hoy, por eso Caleb estaba aquí, iba a decírtelo, pero tú habías regresado.

—Lo último que esperaba después de que cancelaran mi vuelo, era encontrarte con Caleb en la cama.—Me dice.—En casa de nuestros padres.

—Sé que estuvo mal, no me justifico.

—Está mal que sientas eso por Caleb.

—Darren, no...

—Yo lo conosco.

—Yo también.

—Yo lo conozco más que tú, Ridley.—Me dice.—He pasado infinidad de cosas a su lado, se la clase de tío que es y sé que esto que tienen solo lo ve como un pasatiempo, cuando se le pase el...

Se detiene al ver mi rostro.

—No quiero que te lastime, Ridley.

—No lo hará, Darren.

—Mirate.—Me dice.—Ya .—Confías ciegamente en el porque estas enamorada, pero solo así, solo de esa forma el golpe de la decepción será peor para ti.

Las lágrimas caen por mis mejillas.

—El único que esta decepcionándome aquí eres tú, Darren.

Puedo ver los ojos dolidos de mi hermano.

—¿Y crees que yo no me sentí igual cuando los encontre?

—Darren.

—Me mintieron, tú, tú me mentiste, Ridley, eres mi hermana, se supone que no hay secretos y ese hijo de puta, era como un hermano para mí también.

Niego con la cabeza.—Lo lamento, Darren, lamento querer a Caleb no por mi, sino por ti, porque no puedes aceptar que me enamore de él. Sé que no es perfecto.

—No lo es.

—Yo tampoco soy perfecta.

—Pero te mereces algo mejor que él.

—¿No debo decidir yo eso?

Me muerdo el labio.

—Lo amo.—Admito una vez más.—Y no voy a dejar de quererlo porque no aceptas que me enamore de tu mejor amigo.

Darren se pone de pie.

—Entonces olvídate de mí.

Mis ojos se abren.

—Si Caleb es tan importante para ti.

Se vuelve hacia mí.

—Darren.

—Olvídate que tienes un hermano, Ridley.