CAPÍTULO 25

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Capítulo dedicado a ArelyRamirez171

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Capítulo dedicado a ArelyRamirez171

MIA

Estoy cayendo.

Rápido.

Mis ojos se abren al mismo tiempo que trato de respirar, pero es una misión imposible en este momento. Hay demasiado aire, demasiada oscuridad, voy demasiado rápido. Demasiado todo. Mi mente es consciente de que estoy cayendo y trato de mover mis piernas o mis brazos, pero no responden a mis órdenes, es como si se hubieran desconectado. Quiero gritar, pero no puedo.

¿Qué está pasando?

Dejo de intentar moverme cuando empiezo a escuchar algo. ¿Son gritos? El sonido cada vez se escucha más cerca y, efectivamente, reconozco gritos de dolor, ira y horror acompañados de lamentos. Mi espalda ha empezado a arder. La oscuridad se va desvaneciendo, y veo ráfagas de fuego a mi alrededor y un tono rojizo que tiñe los muros rojos.

¿Es el infierno? ¿Estoy en el infierno? Después de todo lo que sufrí, ¿seré condenada a estar aquí? ¿Qué clase de broma es...?

No termino de pensar antes de sentir que me estrello con el suelo. Mi cuerpo hace un sonido seco, tosco y repentino. La impresión apenas me deja procesar el dolor que siento.

Me pongo en posición fetal, no sé cuánto tiempo, pero poco a poco el dolor se hace más llevadero. Mis ojos detallan el lugar asumo que es un páramo desértico. Hay troncos de árboles negros como si hubieran sido quemados, los rastros de vegetación tienen el mismo aspecto, el aire es caliente y casi imposible de respirar. Acá no hay lugar para la vida. Solo la muerte.

Me pongo de pie con gran dificultad. No hay nada cerca, solo plantas muertas y más desierto. El lugar me hace sentir incómoda, hay una energía que me hace desear irme y al mismo tiempo quedarme. Suena contradictoria, lo sé. Solo que... tengo la sensación de estar esperando ver algo o alguien que ni yo misma puedo explicar.

Doy una vuelta en mi eje y frunzo el ceño al ver a una... ¿mujer? parada a unos metros de mí. No sé si es por la distancia o es que mi vista me falla, pero no logro ver ninguna facción de ella, ni siquiera la tonalidad de su piel. Es como si fuera una sombra.

Lo que me llama más la atención es su postura. Casi todo su peso está balanceado hacia un lado, sus pies están girados levemente hacia adentro y está parada de puntas. Lo más sensato sería huir ante la aterradora imagen que tengo delante teniendo en cuenta que probablemente si estoy en el infierno, pero no siento miedo en lo absoluto. Al contrario, siento que la conozco mucho más de lo que llego a comprender.

¿Quién eres?

Como si hubiera leído mi mente, comienza a dar pasos hacia mí. Mi sentido común me dice que corra lo más rápido posible para alejarme de ella. ¿Huir a dónde? Estoy prácticamente en un desierto donde no tengo donde huir, las únicas colinas que puedo lograr a visualizar están a cientos de kilómetros.

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