EL PODER DE LA SEGUNDA VEZ

CAPÍTULOLXVIII

Cogió su beso al aire y se lo llevó a corazón, allí atesoraba todas las muestras de su amor, sus caricias, sus besos, sus te quieros y sus miradas, que muchas veces hablaban por ella.

La siguió con la mirada hasta que desapareció de su campo visual y entonces regresó al camerino para cambiarse de ropa y regresar al Prat.

De camino se encontró con Roberto que le pidió perdón por el atraco, Alfred le dijo que no había problema, que se había sentido muy a gusto en el escenario. Él le dijo que podía estar muy orgulloso de su vuelta ya que había sido espectacular y que el público había vibrado como hacía tiempo, y que por supuesto era bienvenido para presentar su trabajo musical cuando estuviera terminado, de momento esas dos canciones le habían encantado.

Alfred se lo agradeció y le comentó que buena parte se lo debía a que la inspiración había entrado en su vida como un soplo de aire fresco, llenándolo de luz y llevándose los fantasmas.

_ Pues dile a tu inspiración que no te abandone nunca, porque necesitamos a artistas con tu sensibilidad, Alfred.

_ Haré lo que pueda, lo posible y lo imposible para que quiera estar siempre a mi lado. Nos vemos.

Siguió su camino al camerino y al doblar la esquina casi se choca con Gloria, que se iba ya con Pol.

_ Ay Gloria, perdoname!!

_ Ya sé que soy pequeñita, pero mi pelo es bien visible. - dijo ella riéndose.

_ Bajita eres, eso es así. Pero una gran mujer, eso también. Gracias chicos por estar esta noche, por estar una vez más a mi lado.

_ Es un placer siempre reunirnos. No te olvides que somos tu banda, Alfred. - le dijo Pol.

Alfred se emocionó, incluso después de haberles dejado colgados, ellos seguían sintiendo que permanecían a esa banda que él formó nada más salir del programa, esa segunda familia que habían vivido las mieles del éxito y su bajada a los infiernos.

_ Alfred, que esto te sirva para coger el último impulso que necesitabas para regresar a las tablas. Nosotros siempre hemos tenido la esperanza de que volverías, y si la culpable de esto, es Amaia, mucho mejor. Porque yo estoy enamorada de ella. - le dijo Gloria.

_ Creo que muchos estamos enamorados de ella. - dijo Pol.

Alfred le echó una mirada a Pol, que éste inmediatamente aclaró.

_ Me refiero a que es la concursante que más me gusta, es muy guapa, eso es indudable. Pero hasta ahí amigo.

_ A ver chicos, que esto es absurdo. Alfred sabes de sobra que Pol nunca intentaría robarte a la chica. Además creo que Amaia, sólo tiene ojos para ti.

Alfred se disculpó con Pol, sabía de sobra que su amigo nunca le había fallado.

_ Pol perdoname, se me ha cruzado el cable y no debo reprocharte nada.

Los amigos se dieron un gran abrazo, habían compartido escenarios desde que eran unos críos y no podían echar a perder esos lazos, por nada en el mundo.

_ Por cierto, veo que has pasado muchas horas al piano, porque has tocado mucho mejor que en la última gira.

_ Seguro que seguirá mejorando ahora que tiene a su lado a una profesional. - dijo Gloria.

Bueno chicos estamos en contacto. Gracias una vez más.

Por fin llegó a su camerino, se cambió rápidamente de ropa, recogió todo y salió ya apresurado del plató, al final se iba a perder todo el chat. Subió al coche y condujo escuchando a Leiva hasta el Prat, cada vez que escuchaba Superpoderes la recordaba a ella.