CAPÍTULO LXXXV

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Se despertó sobresaltado pensando que llegaba tarde al ensayo y salió trastabillando de la cama, corriendo al baño, cuando al dar la luz se dio cuenta que por la ventana aún era de noche. Volvió a la habitación para ver que hora era, y se sorprendió al ver que aún eran las tres de la mañana. Comprobó que el despertador tocaría a las ocho de la mañana y ''rezó '' por volver a quedarse dormido, necesitaba estar despejado al día siguiente, y dar todo y más de sí. Pero su cabeza no quería darle tregua y se empeñó en comenzar a visualizar miles de flashback de ellos en sus clases de Cultura Musical y de las preparatorias de la canciones grupales y como no, de su primer encuentro en persona. Ese casi pico en la presentación, el encontronazo en el baño, la búsqueda de contacto al entregar los apuntes, la dedicatoria en su libro de poemas, la primera vez en los peldaños de amor,.... tantos y tantos recuerdos que se escondían en esas paredes que no pudo evitar sentir un escalofrío recorriendo su cuerpo y empezar a notar como las lágrimas ya corrían por sus mejillas. Su historia daba para unas cuantas canciones, poesías y hasta para un libro de esos donde se narran relaciones casi imposibles, pero que al final todo sale bien porque el Amor todo lo puede. Y eso era lo único que él quería que su amor pudiera con todo. Cuando sonó el despertador tenía una sensación de ahogo que no le gustó nada y que sabía que no podía dejar pasar de largo. Se tomó unos minutos para hacer una serie de ejercicios de respiración y de relajación, se dio una ducha caliente y nada más entrar en la cocina su madre ya le esperaba con una infusión de hierbas relajantes y el blister de Valerianas en la mesa.

_ Mamá, cómo sabías que,...

_ Hijo solo con ver como llegaste de cansado a casa, sabía que la ansiedad estaba a la vuelta de la esquina. Y no es solo por lo de ayer, llevas mucha presión encima, muchos días de hacer muchas cosas a la vez, más la prensa, más miedo a decepcionar y miedo a no hacer las cosas bien con Amaia, y eso es lo que te tiene así.

_ Joer mamá, te has metido en mi mente??

_ Sí hijo, desde el día que naciste. Así que hoy nada de café, y por favor no te exijas tanto. Y por vuestra relación estoy segura que va a salir bien hijo. Tú no has estado tan enamorado de nadie así, nunca te has tomado tantas preocupaciones por nadie, y no solo por ella, sino porque su familia esté bien. Por cierto sabes que vienen los padres de Amaia?

_ Cómo??? Y eso? Está bien Javier?- dijo todo preocupado.

_ Javier está bien. Vienen para estar en la Gala Final hijo o ya no te acuerdas que nosotros también estuvimos en tu edición.

_ No me digas que van a tener cena sorpresa?? - dijo ilusionado.

_ Que no se te escape nada, por favor!!! - dijo preocupada.

_ Que no mamá!!! Le va a venir estupendamente a Amaia. No está pasando momentos fáciles.

_ Ni tú mi vida. - dijo su madre acariciándole la mejilla. Pero ya no os queda nada. Y la sorpresa que se va a llevar cuando te vea aparecer para Eurovisión, qué ??

_ Estoy deseando verle la carita. - dijo muerto de ternura.

_ Pues ahora toca levantarle el ánimo el domingo, para que el lunes se haga con el trofeo. Y tú a estar tranquilo, que no quiero un disgusto, de acuerdo. - le dijo dándole un gran abrazo.

La verdad es, que esa charla con su madre le había relajado. Saber que Amaia iba a ver a sus padres era una estupenda noticia. Seguro que le hacía olvidarse de muchas cosas y centrarse en su familia y en cómo lo estaban viviendo ellos.

La verdad es que llevaba unos días que no había visto mucho de su día a día, y lo peor es que ese día tampoco lo haría.

Se despertó con legañas después de pasarse media noche llorando, primero por la presión que tenía y luego porque empezó a recordar momentos con él sentada al teclado haciendo canciones en su clase, el primer beso en los peldaños de amor, la semana del City of stars,... y tantísimos recuerdos para enmarcar que le daban miedo que solo se quedaran en eso, en recuerdos bonitos de una etapa que un buen día llegó a su fin. Y se maldijo por pensar en negativo y no porque fuera a ser la más bonita historia de amor que esa academia iba a vivir en su historia. Porque los recuerdos que allí habían sucedido fueran imborrables y porque el paso del tiempo los hicieran aún más importantes. Se riñó una vez más y se convenció que con todas las muestras de amor que él le había dado y con lo profundamente enamorada que ella estaba, nada podría ir mal.

EL PODER DE LA SEGUNDA VEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora