Aveces me pregunto que hay de malo en mí. Porque de un momento a otro me siento vacía. Pienso que fue tu ausencia pues aquel día de marzo del 19 te llevaste algo de mí muy lejos. He tratado de dejarte ir, pero me pesa esto.
Eras el único con el que podía llorar sintiendo que todo estaría mejor, el único que sacaba sus chistes malos o canciones horribles para hacerme sentir un poco mejor. Aquel con el que compartí hasta las contraseñas. Dime Francia, ¿es agradable para ti? Quizá por eso me has dejado olvidada. Quizás perdiste la contraseña. Quizas... yo ya no lo sé.
Me he sentido sola, me la he pasado escuchando música que me hace sentir peor. He visto los antiguos mensajes no leídos, que no tienen ninguna señal de parte de ti. Tu buzón de voz esta lleno.
Aveces pienso que estas cerca mío. He estado por morir en repetidas ocasiones y siento que eres tú protegiendome como solias hacerlo a altas horas de madrugada.
Recuerdo el hospital, tu en una camilla. Y me gana, me gana, porque es el peor recuerdo que tengo de ti. Dime Francia, ¿es tu hogar? Quizá por eso me has dejado olvidada. Solo quizás.
La última vez en clase escribí una carta que nunca te llegó porque no habías estado en mucho tiempo. Quería que fueras a mi última función. Pero te sentí muy cerca, quizá por eso lloré toda una semana en los ensayos.
Recuerdo cuando nos burlabamos de quienes decían lo que pasaba entre tu y yo. Siempre, era eso risas. Extraño tu palidez o aquel piercing ridículo que adornaba tu labio, o los tontos tintes que solias tener para parecer más serio pero en realidad eras más adorable.
He tenido ataques de ansiedad en el carro porque un estúpido ha querido algo más. Si te lo hubiera dicho, aquel idiota ya tendría un ojo morado, porque solias ser calmado pero cuando se trataba de mi ahí estabas tu contra el mundo con tal de que nadie me tocará.
Hace unos días por andar distraída no vi un carro, la verdad he tenido ganas de eso, pero tu más que nadie sabe que no puedo hacerlo.
Dime Francia, ¿Te hizo tan feliz? Quizá Alemania no fue lo suficiente.
Recuerdas cuando te conté acerca de ese chico, tenías razón fue un idiota conmigo. Me costó superarlo. Pero tu estuviste. Aunque después de un tiempo me hablo de nuevo y yo me sentía rara, dijo el típico "Te sigo amando" del cual nos burlabamos. Recuerdo cuando te ponías celoso de el, pero sabes que siempre has estado primero.
Quiero decirte que he encontrado a alguien especial, pero aveces me la paso llorando porque siento que no soy lo suficiente para alguien. Y me da miedo, y me encierro en esa burbuja donde sólo tu puedes pasar. He tenido miedo que me lastime, pero me hago más daño yo al pensar que el lo haría. Necesito un consejo tuyo.
Fuiste mi más grande pilar y cómplice en la vida. Fuiste aquel al que le di mi mayor secreto y con el que compartí más de la mitad de mi vida con historias.
Te he soñado con tu acento, con tu voz, y el sonido de tus dedos cuando estabas nervioso. Y me he puesto a llorar.
Parece que no sanare nunca, me siento débil y sin ganas de estar aquí.
Te lo cuento aunque no estés porque aveces pienso que volveras.
