Capítulo 19 Una decisión

558 14 0
                                    

Alex

Todo lo que empieza tiene que terminar y este fin de semana llegó a su fin muy rápido. Sam y yo no conocimos el pueblo, es mas no conocimos ni el hotel donde nos quedamos, todo el tiempo nos la pasamos en la habitación, obviamente recuperando el tiempo perdido. 'Benditas las que estuvieron antes que yo' Diría el ilustrísimo poeta Arjona... bueno algo así decía una de sus canciones. Y es que Sam aprendió una que otra cosa muy interesante que puso en práctica conmigo. Aprovechamos hasta el último momento de nuestro hermoso fin de semana y aunque moría de ganas por hacerle de nuevo la pregunta tuve que controlarme, Sam quería tiempo y se lo voy a dar.

Como siempre el viaje en moto fue estupendo, llegamos al hotel de Sam casi a las diez de la noche, sé que ella aún no quiere ir a mi departamento, pero espero que pronto superemos este pequeño problema y es que a mí me gusta que mi novia grite a la hora de hacerle el amor, pero con Danni a unos pasos de ahí pues tuvimos que ser muy silenciosas y vaya que mi novia sabía cómo silenciarme.

—Alex—

—Mmmm—Me dice mi novia mientras acaricia mi rostro.

—Tienes que ir a trabajar— Y efectivamente ya era hora prepararme para ir a trabajar. Abrí los ojos y me encontré con su mirada, las palabras sobran en momentos como estos, así que solo nos besamos, un beso lento sin prisas y muy tierno. Cuando nos separamos acaricié su mejilla —Podría hacer esto por el resto de mis días—

—Solo tienes que decirme que sí y yo me encargo de que suceda—

—Tengo cosas que solucionar primero Alex—

—¿Por qué siento como si fuera tu amante y me estas pidiendo tiempo para divorciarte? — Sam abrió muchos los ojos para después negar con la cabeza mientras reía.

—Estás loca Alex ¿Cómo es que se te ocurren estas cosas? —

—Tengo mucha imaginación—Y con un giro me puse sobre ella —No lo notaste este fin de semana—Le dije mientras mis manos empezaban a recorrerla.

—Oh sí, claro que sí. Y no sabes lo mucho que me gusta que esa cabeza tuya sea tan creativa— Y entonces me acerqué para besarla, pero Sam me detuvo —Tienes que ir a trabajar—

—Soy la jefa, puedo llegar tardé—

—¡Alex! — Y entonces empecé a morderle la oreja para evitar que siguiera con esa tonta idea —Creo que no pasara nada si llegas tardé—

—No, nada pasara, además se supone que mi primera reunión es contigo—

—¡¿Eh?! — Me dijo separándose de mi —Nadie me dijo—

—Danni lo sabía—Y entonces cubrió mi boca con su mano.

—No digas su nombre— Puse cara de no entender. Pero unos golpes en la puerta y un grito de ¡Ami ya es tardé! Hizo que mi novia suspirara —Te lo dije—

—¿La mocosa tiene radar? —

—Algo así— Me dio un beso de piquito e hizo que nos levantáramos de la cama —¡Ya vamos Danni, solo danos unos minutos! —

—No se tarden, ya tuvieron toda la noche para hacer sus cositas—

Y de inmediato Sam se puso roja, Sam se giró y me miró de esa forma que dice ¡Ya cállate! Obviamente porque le iba a responder a su amiga la entrometida. Y de inmediato le hice caso. Nos bañamos lo más rápido que pudimos, obvio tuvimos nuestra bien merecida sesión de besos y caricias. Dejé la moto en el hotel, esta vez fui con las chicas y con Don Víctor a la oficina. Aunque no iba con mi acostumbrado traje.

Dos historias de un solo corazón (Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora