Sɪʀᴇɴᴀ; Aɴᴅᴇʀ

18; Marina.

Morgan se encontraba en medio de un sueño, donde podía ver a una chica muy linda bailando, pero era aterrador el hecho de que dicha muchacha tenía un aspecto muy similar al de Marina según se la habían descrito.

Más tarde comenzó a verse a ella misma dentro del sueño, la otra chica le tomaba las manos, pero por alguna extraña razón se las acercaba a su vientre.

Morgan se dió cuenta de que la chica tenía un lunar en el pecho, igual al de ella.

Entonces despertó y un gran vómito llenó parte de su piso.

—¿Qué pasa, Morgan?— Cuestionó su madre llegando a la habitación, pues se había asustado al escucharla vomitar.

—Comí algo malo...—

—Voy a pedir que limpien ésto.—

En cuanto su madre la dejó sola nuevamente, comenzó a pensar otra vez en un posible embarazo, pero por otro lado era imposible porque su mamá la acostumbró a ella y a Rebe a tomar pastillas siempre.

Se levantó de la cama y fue a bañarse para luego irse al instituto.

💀

Morgan se enteró de que Guzmán no asistió al colegio ese día, y pues no lo culpaba, antes había hecho mucho por mantenerse estable en los estudios, pero tarde o temprano iba a querer descansar de toda la mierda.

—Hola, sirenita.— Ander se acercó a abrazar a su novia, a quien veía muy pensativa mirando hacia una ventana.

—Hola, bebé.—

—¿Estás bien?—

—Creo que he soñado con Marina.—

—¿Y que soñaste?—

—Fue extraño... Ella ponía mis manos en su vientre, y al despertar vomité.—

—¿No estarás...?— Preguntó poniéndose nervioso.

—¡No! Es imposible, tomo pastillas.—

—Vale, no lo sé. Podemos ir a ver a éstas personas que interpretan sueños.—

Morgan asintió y se acercó a besar los labios de Ander de forma rápida para que no fuesen a regañarlos.

Omar entró al instituto en plan "Quítate tu, que llegó la caballota." Traía el uniforme y venía junto a un chico.

Ander lo miró, pero no se notaba nada de celos, claramente ya no sentía nada por él.

—Quizá Nadia sepa algo de interpretación de sueños.— Dijo Ander.

—Debo preguntarle a ella, sí.—

Omar no era una persona presumida, pero se notaba lo feliz que se encontraba.

—¿Sabes? A veces creo que Omar hace tiempo me venía poniendo el cuerno con ese chico.—

—¿Por qué lo dices?—

—Para ser una relación nueva, parece que se conocen hace mucho tiempo.—