나를 알아 ° 𝗞𝗼𝗼𝗸𝗠𝗶𝗻

Sytten.

Dos días pasaron en los que Jimin y Jungkook no tuvieron ningún tipo de contacto, al parecer Jeon estaba más ocupado que de costumbre.

— ¿No te molesta el humo cuando lo inhalas? — preguntó Taehyung quién se hallaba sentado en la acera afuera de la calle con el peli rosa, tenía un cigarro y bueno, Kim no fumaba.

— No, de hecho, se siente bien — sonrió viendo las cenizas que caían al suelo.

— Bueno — se encogió de hombros el castaño — debo irme Jiminie — se levantó y sacudió un poco sus pantalones — al menos el trabajo de hoy ya lo terminamos —.

— Vuelve con cuidado Tae — dijo Jimin para darle la última calada a su cigarrillo y levantarse también.

— Si, descansa — Park asintió y entonces el Uber que había pedido Taehyung llegó a la entrada de aquella avenida, no giró mientras caminaba.

Que buen compañero era aquel tipo, pensó Jimin. Nunca hacía preguntas, nunca molestaba más de lo debido pero siempre estaba ahí, cuando Jimin sentía que sus fuerzas se iban.

Suspiró viendo una última vez el cielo negro, pero el sonido de su celular lo desconcentró.

— Y ahora estás llamando — dijo el peli rosa antes de contestar — ¿Hola?

— Hola Jimin — habló Jungkook detrás de la línea — ¿ya estabas dormido?

— Para nada, justo se acaba de ir Tae — dijo mientras entraba a su casa.

— Tsch y después dices que no es tu novio o tú polvo — vaciló el castaño.

— ¿Celoso Jeon? — preguntó Jimin.

— Ni un poco Park — la voz de Jungkook sonaba cansada y el peli rosa lo notó.

— ¿Todo bien estos días? — Jimin cerró su casa y subió a su habitación — digo, tal vez besar a un chico unas tres veces requiere más tiempo para digerir —.

— Oh... Crees que te he estado evitando — Jungkook soltó una risita y Jimin hizo lo mismo sin querer — entonces me extrañas, vaya...

— Eres un poco egocéntrico, ¿no lo crees? — aunque el peli negro no lo pudiera ver Park alzó una ceja, tomando la pijama de su clóset.

— Me parezco a un peli rosa muy nerd — dijo.

— Apuesto a qué sí — Jimin se colocó su ropa y se metió en su cama — como sea, ¿para qué llamas a estás horas?, casi es media noche —.

— Solo quería saber cómo estabas — suspiró — JungMin se enfermó y estuve algo preocupado, tiene diez meses y bueno, sabrás que los bebés son delicados —.

— Lo sé — concordó Jimin — pero, ¿ya está bien?, ¿necesitas que lo llevemos a un médico? — bien, Park no podía parar sus palabras cuando se trataba de Jungkook y menos si involucraba a ese bebé que le encantaba pues era tan pequeñito que quería protegerlo. Cuando mencionaban a JungMin la imagen de este dormido en sus brazos cuando Jungkook estuvo lastimado le llegaba como flash.

— Ahora está mejorando, gracias por ofrecer tu ayuda — esta vez el peli negro sonaba más tranquilo — ¿quieres almorzar conmigo y Lisa en la cafetería mañana? o mejor dicho, al rato —.

— ¿Por qué tiene que estar Lisa? — preguntó Jimin.

— Empiezo a creer que le tienes rencor a mi amiga ehh...

— No, no, para nada — Jimin se retorció entre sus cobijas avergonzado — solo preguntaba, sabes que odio a las personas en general —.

— Auch, eso dolió — Jungkook fingió sollozar.

— Idiota — bufó Jimin — está bien, almorcemos pero te aviso que Taehyung nunca se me despega y me siento más cómodo así —.

— Hmmm — hizo Jeon y Jimin sonrió por debajo de su manta — vale, ¿tús padres han vuelto de viaje?

— Aún no — suspiró Jimin.

— ¡Oh, entonces no duermas!, nadie sabe si un monstruo te está vigilando —.

— ¡JUNGKOOK! — gritó Jimin.

Le asustan ese tipo de cosas, se mentalizo el peli negro.

Un quejido demasiado infantil resonó en la línea y Jungkook maldijo en voz baja.

— Voy a colgar rosita, Minnie se despertó con tu grito — y entonces el llanto de un bebé se hizo presente, confirmando lo que Jeon acababa de decir.

— Upss, ¿duermes con él? — preguntó Jimin.

— Si, estaría loco si lo pongo en una cuna, aún no me acostumbro del todo a esto pero lo prefiero así — confesó el menor.

— Lindo — susurró el peli rosa — ve a tranquilizarlo, te dejo y espero que su salud sea buena desde ahora —.

— Gracias Jimin, eres una persona agradable — JungMin lloró más fuerte y ambos rieron.— Descansa —.

Jimin asintió aún si Jungkook no podía verlo y entonces colgó.

¿Por qué sentía su pecho tan pesado?, quería hasta llorar de alegría, solo por una simple llamada.

¿Debería llevar algo aparte de su lunch de siempre para invitarle a Jeon?

— Diablos Jimin, ¿qué te está pasando?, contrólate un poco, has podido hacerlo veinte años, hazlo unos minutos, unos días o meses hasta que Jeon desparezca. Al final las personas nunca se quedan a tu lado — se decía el peli rosa.

Pero a quién engañaba, por primera vez en su vida estaba disfrutando de nuevas sensaciones y era extraño.

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Capítulo soft porque
ando media bdbwkzbe y también
para qué noten el pequeño
pero significativo avance de
nuestro Jiminnie~.
Lxs amo muchísimo. ❄