Kimetsu no Yaiba | One Shots

InoAoi: Baile

Notas:

•Inosuke Hashibira x Aoi Kanzaki.

•AU.

•F por las personas que me hicieron peticiones, tienen el derecho de odiarme.

•Si tengo un par más de errores ortográficos de lo normal es porque acabo de cambiar el celular y este no me subraya los errores.

Sinopsis:

Aoi se ve obligada a asistir al baile de su escuela por mucho que lo odie y sólo tiene en mente a una persona para hacerse pasar por su cita.

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—¿Sabes qué es lo que más odio de tu familia? —Aoi pregunta casualmente a su mejor amiga.

—Emh... —Kanao parpadea repetidas veces—, ¿el optimismo? —dice dudosa.

—¡El optimismo! —alza su voz—. Kanae-San podrá parecer una dulce y adorable persona, pero en el fondo es una psicópata —y ciertamente la hermanita de la mencionada no podía argumentar nada contra eso.

—¿Te reprobó en algún examen o...? —deja la frase en el aire.

—No, ¿sabes qué hizo? Habló con mi mamá.

—Pero tienes buenas notas y comportamiento, ¿qué podría haberle dicho de malo?

—Que habrá un baile, eso le dijo.

—Uh...

Eso era malo, ¡muy malo!
La madre de Aoi estaba obsesionada con ese tipo de cosas y soñaba con el día en que pudiera comprarle a su única hija su vestido para el baile, tomarle fotos y conocer a su cita. Una cursilería que Aoi no era capaz de soportar.

Se las arregló para que su mamá nunca se enterara de ninguno de los bailes de su escuela pero recientemente se había cruzado con Kanae-Sensei y esta mencionó el baile por casualidad, o pura perversión complotada contra la ojiazul. Todo el mundo quería humillarla poniéndola en un tonto vestido y haciéndola ir a un baile aburrido y cursi.

Ahora no tenía escapatoria, Kanae era chaperona en este evento, así que su madre se enteraría si escapaba y no había forma de que en general lograra convencerla de que la deje no ir.

Era su fin.

—Tal vez podría enfermarme, ¿conoces alguna táctica? —pregunta casualmente.

—Aoi-Chan, no es bueno que te enfermes intencionalmente —le reclama.

—¡Medidas desesperadas! —exclama con sus ojos muy abiertos.

—¿Es tan malo ponerte un vestido, algo de maquillaje y bailar un rato esa noche?

—¿Bailar? Olvídalo, incluso si voy no bailaré. Además, ¿cuándo me has visto en vestido? Son incómodos y horrendos, no me hagas hablar del maquillaje.

—Será una noche y hará feliz a tu mamá, complácela esta vez.

—Sería más fácil si no me obligara a hacer cosas que no me gustan —hace puchero.