After Party (Bill Skarsgård x Tom)

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Cuando su amigo, Jake Gyllenhaal, dijo que haría una pequeña reunión en su casa, no esperó para nada que terminarían como treinta personas bebiendo alcohol y llorando o vomitando en algunas macetas del lugar. 

Aunque al principio todo iba bien, hablaba con algunos otros actores y tomaba, las cosas pasaron a otro plano cuando compitió contra Ryan Reynolds por quien bebía más, obviamente perdió. 

Pero no recordaba más que eso, el alcohol lo hizo perder parte de su conciencia, lo último que recuerda es sentarse accidentalmente sobre las piernas de alguien y luego nada. 

Así que cuando despierta en una cama que no es suya, totalmente desnudo y con una fuerte migraña la única pregunta que pasa por su cabeza es: ¿Qué mierda..? 

Con su mano derecha frota sus ojos para quitar las lagañas que le molestan. Sin mover nada más que su mano comienza a rebobinar, pensar en qué carajo hizo ayer. Se giró al otro lado y recién ahí notó que había alguien más junto a él.

Su respiración se detuvo al recordar que estaba desnudo, en un movimiento rápido levantó las sabanas y vio que el contrario tampoco traía nada de ropa. Ahogó una exclamación antes de intentar sentarse, pero una dolor punzante lo detuvo antes de que pudiera siquiera ponerse recto.  También sentía pegajosas sus nalgas. 

Maldijo en voz baja y de igual manera intento salir de aquella cama que al parecer compartió junto a Skarsgård, quien seguía durmiendo sin ningún problema en ella. 

Se vistió lentamente, primero su ropa interior, luego su remera y cuando iba a ponerse los pantalones su celular sonó con un tono muy alto, alarmando al chico que pegó un salto por el susto antes de medio correr, como pudo por el dolor, a buscar su celular para que dejara de hacer ese ruido. Era la alarma de las 7 de la mañana. 

La apagó, pero eso no evitó que el mayor despertara por el tono de Spiderman rebotando por el silencio. Levantó su cabeza al notar a alguien más en la habitación, logrando tener una mirada incómoda y confundida con el joven Holland, quien parecía al borde de un ataque de pánico.

Se mantuvieron así unos segundos antes de que Bill se sentara en la cama y se diera cuenta de su desnudez y el hecho de que el menor estuviera vistiéndose ahora. 

Abrió la boca para ver al chico directamente, quien había logrado ponerse los pantalones con suma rapidez, Tom asintió cuando él los apuntó a ambos sorprendido y confundido. 

- ¡Mierda! - dijo enojado consigo mismo, debía controlarse, ya le había pasado esto una vez y las cosas terminaron mal. - Yo lo siento mucho, te juro que no sé como pasó todo esto, no sé que hice. ¿Te forcé o te lastimé? 

Preguntó en lo que salía de la cama para agarrar su pantalón que estaba tirada al costado de esta, no traía bóxer, algo que le parecía normal ya que no pensaba desnudarse en la reunión, además de que le parecía más cómodo ir sin nada. 

- N-no lo sé, tampoco recuerdo. 

Dijo Tom con un sonrojo en las mejillas, sinceramente esperaba que si alguna vez se acostara con alguien ebrio él fuera el de arriba, pero por el dolor en su zona trasera y las marcas de arañazos que tenía Skarsgård en la espalda decían otra cosa. Soltó un suspiro cansado antes de sentarse de golpe en la cama, cosa que fue mala idea porque el dolor le hizo soltar un gemido alto.

- ¿Te duele? - le preguntó Bill arrodillándose ante él, tenía puesto solo un pantalón, su remera no parecía estar en ninguna parte, seguro se la sacó antes. Tomó con cariño las manos del chico, sentía algo de pena por la situación que estaban pasando. 

- Si, y mucho. - dejó salir una pequeña risa incómoda para intentar aligerar el ambiente.

- ¿Te parece si te compenso esto pagando el desayuno? - invitó el mayor regalándole una de sus mejores y más coquetas sonrisas.

- Si, pero deberás ayudarme a caminar, porque no podré hacerlo sin caer.

- Trato. 

Ambos se sonrieron sin quitar parte de su incomodidad, a penas y se conocían y ya habían cogido. Ahora tendrían una "cita", harían las cosas al revés, pero a ninguno le molestaba. 

Ships Gays y Raros con Tom HollandWhere stories live. Discover now