El eunuco

Vivir

Baekhyun movió su cabeza confundido e incrédulo, lo que sus ojos veían no podía ser cierto, esa persona se parecía a Kyungsoo pero su amigo, él... su corazón comenzó a latir desbocado y, colocando una mano en uno de los brazos de Chanyeol, como para comprobar que efectivamente lo que estaba frente a él no era producto de un sueño, acortó la distancia caminando los pasos que le quedaban para acercarse a quien ahora lo miraba con sus siempre grandes ojos.

-Kyungsoo... -susurró al tiempo que Jongin se alejaba dos pasos mirándolo solemnemente y él tragaba el nudo que se había instalado en su garganta -Soo... Eres tú Kyung... -sollozó con voz rota y lágrimas en los ojos, tapó su boca con ambas manos y se dobló un poco hacia adelante dejando brotar el llanto, ese que creyó se había agotado y ahora surgía nuevamente desde el fondo de su pecho, Chanyeol dio un paso con toda la intención de acercarse pero la mano de su hermano lo detuvo cuando Kyungsoo sostuvo a Baekhyun abrazándolo fuerte.

-Lo siento... Lo siento mucho baekkie... Lo lamento tanto -susurró acariciando su espalda con los ojos cerrados entendiendo el dolor de su amigo.

-Suéltame... -Se quejó Baek de momento alejándose y quedando en medio de la habitación -¿Alguien puede explicarme qué está pasando? -exigió mirándolos a todos totalmente serio.

-Era necesario Baek... -Comenzó a hablar Chanyeol con calma, deteniéndose un segundo después al ver la mirada cargada de reproches con la que el bajo lo miró.

-¡¿También lo era engañarme?! -estalló Baekhyun sorprendiendo a los príncipes y horrorizado a Kyungsoo -¡Pudiste haberme dicho algo que me diera una pista!

-Baek... No puedes hablarle así al príncipe, discúlpate... -susurró Kyung.

-¡Te dije que confiaras! ¡¿Recuerdas eso?! ¡Estoy seguro de que no me viste durante todo el tiempo que duró tu jodido proceso! ¿Crées que simplemente te ignoraría Baekhyun? -respondió Chanyeol en voz alta acercándose más -Estoy harto de tu desconfianza, entiendo que sea un choque para tí todo lo que pasó, pero estás vivo, Kyungsoo también, y ni siquiera te has tomado la molestia de pensar cómo fue o que tuve que sacrificar para que estuvieras aquí.

Baekhyun escuchó las palabras del príncipe sintiéndose culpable al instante, mucho más cuando lo vio salir de la cabaña y perderse en la negrura de la noche, se quedó mirando a la nada con su corazón latiendo dolorosamente y las palabras de Chanyeol resonando en su cabeza como un martillo, porque sabía muy dentro de él que tenía razón, pero en su posición era demasiado difícil simplemente cerrar los ojos y confiar en alguien, tenía miedo de salir lastimado, de salir aún más lastimado, siempre debía pensar en las posibles consecuencias de sus futuros actos, aún cuando nada era seguro.

-Déjalo... -le ordenó JongIn en tono suave al tiempo que Kyungsoo se acercaba, y tomándolo de la mano lo invitaba a sentarse sonriéndole -Necesita estar solo.

-Sé que todo es muy confuso para tí pero...

-¿Puedes contarme que pasó? -preguntó Baek a su amigo mirando sus manos, y el pequeño eunuco suspiró, porque realmente para el resultaba agobiante el solo hecho de recordarlo.

-Cuando tu secreto fue descubierto la primera persona a quién buscaron fue a mí, fue todo muy rápido... En un principio no entendí y pedí explicaciones, luego escuché tu nombre y entonces supe que ya era muy tarde, la intención del eunuco jefe era torturarme y luego exigir mi muerte...

-Pero yo intervine -interrumpió el príncipe Jongin tomando una de las pequeñas manos del eunuco -Según las leyes antiguas el señor a cargo de un empleado o un esclavo tiene el derecho de cobrarse la vida de éste si así lo cree necesario, la tortura no se llevó a cabo porque ya estaba más que confirmado que no eras castrado -aclaró mirando a Baekhyun -No podían usar como justificación la búsqueda de información, así que simplemente dije que lo quería muerto.