Capitulo 61: ¿Infantil yo?

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Un mes después del nacimiento de Sirius, Harry y Hermione se habían consolidado como pareja y como padres, él sobre todo quien cada día que pasaba participaba más en las actividades diarias que debían hacerse con su hijo, aunque le costaba, era un poco torpe en algunas cosas como por ejemplo cambiar los pañales, pero nada que un Potter no pudiese solucionar o ¿no?…

Flash Black
Eran entradas las siete de la mañana cuando Hermione decidió entrar a bañarse y le pidió, por supuesto al padre, que cuidase del niño, hasta allí todo bien. Pasados unos minutos meciéndolo y conversándole pues estaba despierto, sintió un extraño olor, no podía ser, miro a su hijo y supo que ese era su olor, su pañal estaba pesando y eso se percibía, como un bebe con aquella cara de inocencia podía ser tan maloliente en esa situación… ósea es un niño, miró hacia el baño y supo que su salvación no llegaría pronto… Bien era un Gryffindor y podía hacer esto sin ayuda de Hermione, pues solo era un bebe, su hijo.
Se fue hasta la habitación del pequeño y tomo una colcha, pañales, toallas húmedas y por supuesto pomada. Volvió nuevamente a la habitación y puso la colcha en la cama y luego a Sirius, quien tenía sus ojitos abiertos pero parecía molesto "Cómo no estarlo" pensó el padre al desabrochar la parte de abajo y quitar el pañal, su estómago se revolvió, pero continuo, envolviendo el pañal sucio dejándolo aun lado, como mucho cuidado y lentitud levanto sus piernas, pues sabía que su hijo se molestaba fácilmente, acercó las toallitas húmedas y "¡Mierda!" no podía abrir la bendita caja, nuevamente bajo las piernas del pequeño y este emitió un quejido, tomo la caja y la abrió, las dejo aun lado y con la misma delicadeza tomo sus piernas y las levanto, el pequeño Potter hizo un amago de que querer llorar pero el primerizo padre logró salir del paso, sacó una de las toallitas y comenzó a limpiar bien ciertas zonas, tanto delanteras como traseras, Dios cuan difícil era la manos le sudaban. Cuando acabo, busco la pomada y "¡Maldición!" no estaba, "Estoy seguro de haberla traído", suspiro con frustración y tomo al niño cuidadosamente envolviéndolo en una mantita pues Hermione no permitía que el niño se desabrigase mucho, camino un par de pasos y fuera de su habitación estaba la bendita pomada, la tomo y cuando lo fue atender sobre la cama arrugo el entrecejo y nuevamente dejo entrever su descontento…
- Hijo entiende a papá ¿si? - este hizo caso omiso pues comenzó a pasar sus manos por su cara - a quien sacaste ese genio ¿eh? - sonrió y lo dejo sobre la cama, estaba por poner la pomada cuando un líquido amarillento saltó "no podía ser mejor" se quejo mirando su ropa mientras el niño definitivamente comenzaba a llorar. Bendita Hermione que llegó en ese momento calmada -
- Ya no importa - le susurró a su hijo con ternura mientras tomaba sus piernas las alzaba limpiando su pipi y ponía la pomada sin demoras, tomo el pañal y en un momento estuvo listo y vestido. La madre lo alzo y al balancearlo su mirada se fue perdiendo puesto que caía en el sueño mientras tanto el ojiverde, se daba un ducha y se cambiaba la ropa -

Cuando Sirius estuvo dormido y Harry salía nuevamente vestido, vió a su hijo en los brazos de su madre y negó sonriendo…
- Es algo difícil ser madre - esta rió y negó -
- Es solo practica - él no deshizo su sonrisa -
- Creo que heredo tu mal genio -
- ¿El mío? Perdóname pero es un Potter por donde lo mires - este rió y acarició la mejilla de su hijo para luego besarle la frente -
- Esto de cambiar pañales es más difícil que cualquier otra cosa - beso a Hermione y se despidió para ir a trabajar, con la idea de que con el pasar de las semanas mejoraría ¿Cierto?...
Fin Flash Back

A pesar de que todo parecía estar bien, igualmente tenían sus problemas y discusiones, como por ejemplo la noche de ayer el idiota de Materazzi se le ocurrió la genial idea de aparecerse por el departamento para ver al hijo de ambos. Esto molesto y encolerizo al ojiverde quien prefirió mantenerse en la habitación infantilmente, pero no estuvo mucho tiempo solo por que unos diez minutos más tarde Hermione entraba en la habitación, ya había dejado al niño en su cuna…
- Eres un infantil -
- ¿Infantil yo? Perdóname ese sujeto no tiene nada que venir al departamento y menos a ver a mi hijo -
- Te recuerdo que también es mi hijo y solo lo vino a conocer -
- Y tú la inocente te lo crees, ¡A él no le importa mi hijo le importas tú! Te vino a ver a ti -
- Nuestro hijo - le recalcó intentando no alzar la voz - el ya sabe que no quiero nada con él -
- ¿Y tú lo crees? Por favor solo quiere ganar puntos contigo -
- Harry a veces eres tan idiota -
- ¡Oh! Muchas gracias, mi amor - dijo de manera irónica - ¡Y agradece que no lo eche a patadas! -
- ¡Infantil! Pudiste haber estado con nosotros escuchando la conversación en vez de haberte venido a la habitación -
- Pues no me apetecía escucharlo hablar -
- Eres un infantil -
- Tú sabes que él quiere algo contigo, a mi ese tipo no me viene con cuentos -
- Harry entiende, yo no quiero nada con él, no me interesa, es un amigo -
- ¿Amigo? Tú tienes muchos amigos Hermione y ese tipo no quiere ser tu amigo, y no desconfió de ti, pero de ese idiota si -
- Puede ser que él no me vea como una amiga… -
- ¡Vez! -
- Pero no podía negarle la entrada al departamento, el se porto muy bien conmigo cuando tú te portaste mal -
- Me alegro por él - se quito la ropa quedando en bóxer y se metió en la cama, esta por su parte tomo su pijama y entró en el baño, estaba molesta pues siempre se cambiaba de ropa delante de él sin problemas, salió con un short de pijama y polera de pabilos y se metió en la cama sin hablar, le dio la espalda y apago su luz de noche, sin siquiera un buenas noches -
- Buenas noches - se despidió -
- Serán para ti - testaruda, inocente, no sabía como calificarla ¿Por qué no entendía esa molestia? Por que en realidad el no era un celoso por la vida, pero ese tipo se le insinuaba de manera tan directa que lo encolerizaba, no le rebatió ni tampoco la busco al igual que ella le dio la espalda y se durmió molesto.

Ya por la mañana se levantaron sin hablar ni nada, solo escucho de parte de ella un "Cuida a Sirius, mientras me baño" nada más, ni un te amo, o buen día, absolutamente nada. Cuando se encontró vestida, él tomo su chaqueta y se despidió de su hijo con un beso en su manito, de ella nada, tomo él bolso del sofá y salió tras un portazo. La joven madre emitió un gritito de frustración…
- Sirius ¿ya vez como es tu padre? No entiende que si estoy con él es por algo - este pestañaba adormilado mientras tomaba su leche - espero que no tengas ese genio - acarició su mejilla y este se resistía a dormirse quejándose - aunque puedo ver que no podrás evitarlo, lo genes tiran - sonrió y vió a su hijo cerrar finalmente los ojos, no sin quejarse, que terco era, se resistía a dormir… nuevamente sonrió era tan terco como ellos, Sirius de pronto dejo de sacar leche y comenzó a jugar con el pecho de su madre. La joven acarició su cabecita, en la que ya comenzaba a notarse cabello

El ojiverde por su parte ya llegaba a su oficina pues había decidido aparecerse, se sentía tan molesto que apenas saludo a Tom que lo siguió hasta su oficina con una carpeta con expedientes. Se lo dejo encima y salió, ya entendía a su jefe. Pero Ron que lo conocía y que lo había visto entrar con el ceño fruncido, supo que algo había pasado, no era que Potter entrase feliz y sonriente pero lo conocía…
- Buenos días Potter ¿mala noche? -
- Pésima - dijo este, necesitaba hablar con alguien que la entendiese -
- ¿Sirius se despertó muchas veces? -
- No él es un ángel, la madre es la que me tiene mal -
- ¿Qué paso ahora? -
- No adivinas que se fue a meter a mi departamento para supuestamente ver a mi hijo cuando realmente quería ver a mi mujer -
- Muchos "mi" en una oración ¿celoso? -
- Como un loco - reconoció, no era que anduviese desconfiando de cualquier hombre pero ese Materazzi era muy evidente y directo, lo que le molestaba - no te dije nada, pero él día del nacimiento de Sirius primero aparecí en San Mungo - Ron soltó una carcajada - cuando logre aparecer cerca de aquel Hospital muggle ¿no adivinas con quien me encontré? -
- No me digas que con ese imbécil -
- Con él mismo -
- Y ¿Qué paso? -
- Me dijo que no por que hubiese logrado tener un hijo con ella él se iba alejar -
- Lo golpeo -
- Lo hubiera hecho si no hubiese estado el nacimiento de mi hijo… ¿cree que yo embarace a propósito a Hermione? Su embarazo fue inesperado pero deseado -
- No te preocupes, yo te entiendo -
- Si creo que eso haré… no preocuparme - al fin sonrió pero no le duro mucho puesto que el ministro entró. El moreno frunció el ceño y Ron se levanto al tanto que se retiraba de oficina tras despedirse de ambos…

- Sr. que lo trae por acá -
- Necesito hablar contigo seriamente - le dijo pálido, nervioso y ojeroso -
- Tome asiento por favor -
- Harry debo confesarte algo - paso las manos por su rostro desesperado -
- ¿Qué sucede? -
- Bueno la verdad no se como comenzar -
- Pues solo hable… soy Harry puede confiar en mi -
- Es sobre Neville Longbottom -
- ¿Longbottom? -
- Si, bueno él… - se detuvo y abrió el primer botón su camisa -
- Continué - le pidió impaciente -
- Harry él… - no termino de hablar, justo en ese momento el secretario de él entró interrumpiéndolo -
- Disculpen pero al Sr. lo esperan en Londres muggle - el ojiverde miro a Harrison expectante -
- Si, si, voy… - se levanto peinando su cabello con las manos y lo miro - después hablamos ¿si? -
- Señor esto es importante - insistió, quería saber que pasaba -
- Si, pero no es de gravedad… -
- Si usted lo dice -
- Harry por favor después hablamos ¿si?
- Como quiera - lo vio salir y la intriga lo invadió, el ministro se notaba nervioso y quería contarle algo y nada más y nada menos que de Longbottom ¿Qué sería? Eso tardaría en saberlo o al menos eso creía. Lo vio salir y cerrar la puerta, pensó en la situación pero no duro mucho puesto que Remus, entraba la oficina solicitándolo para una misión.

A pesar de que el fuese el Jefe de los Aurores, le gustaba sentir la adrenalina de estar en las misiones, perseguir a los tipos y tener una especie de entrenamiento, por eso había decidido tener una mano derecha para que lo supliera cuando estuviese acompañando a su grupo, pero su mano derecha en estos momentos estaba en su post natal y a pesor de todo esperaba que este se extendiera.

La tarde era exquisitamente tentadora como para descansar, pues el calor resultaba ser extenuante, pero el ojiverde se resistía tercamente a irse a su casa pues no quería encontrarse con Hermione, por que sabía que estaba molesta. Camino por su oficina y finalmente se decidió ir la casa, se disculparía con ella e intentaría arreglar las cosas, ya que esta vez quien había cometido el error había sido él… en parte por que insistía que ese baboso de Materazzi buscaba ganar puntos con ella, pero no le daría en el gusto o no señor.

"Atados a un Sentimiento" - Harry & Hermione -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora