#𝟎𝟏: 𝐓𝐞𝐚𝐜𝐡 𝐦𝐞 ➳ ᴠᴍɪɴ

{𝟎𝟐}

La música parecía llegar a un nivel más alto cuantas más horas pasaban. Eran las tantas de la mañana, y la gran mayoría seguía bailando —o intentándolo—, con ninguno de sus cinco sentidos presentes.

Taehyung había perdido la cuenta de las copas que se había bebido, pero una cosa era clara: estaba perdiendo.

—Retírate, Taehyung. No podrás ganarme —se burló Jungkook, tomándose otro largo trago de whisky.

—Está bien. —Taehyung hipó y dejó su vaso en la barra para alzar los brazos en señal de derrota—. Prefiero perder antes que el coma etílico.

Jungkook rió y decidió calmarse. Bajó el brazo y esperó varios minutos hasta que se le pasara la ebriedad para seguir bebiendo.

—¡Vamos a bailar, Jungkook, estos cuerpos necesitan ser exhibidos! —Hoseok cogió del brazo al menor y comenzó a arrastrarlo hacia el centro del local.

Taehyung optó por sentarse en uno de los altos taburetes para recomponerse, mientras veía a Seokjin y Namjoon adentrándose también en el numeroso grupo de borrachos sudados hasta perderlos de vista. Bueno, ellos merecían un tiempo a solas.

Taehyung desvió la visión hasta el perfil del chico que Hoseok les había presentado horas atrás. Debía reconocer que el tal Jimin era muy follable. Y guapo, por supuesto, eso también.

Jimin volteó la cabeza hasta toparse con los ojos entrecerrados de Taehyung por culpa del cansancio. Incluso habiendo dormido una siesta de más de cuatro horas, no había logrado reponerse del todo.

—Pareces cansado —dijo Jimin, aprovechando el momento para apreciar aún más cada detalle del rostro contrario.

—No, no parezco. —Taehyung volvió a poner los pies en el suelo y se acercó a Jimin—. Lo estoy. Y borracho, muy borracho —dijo intentando vocalizar lo mejor posible para que Jimin pudiera entenderle.

—Ya veo, ya... —Jimin arqueó una ceja, teniendo una idea de lo más alocada; aunque eso era exactamente por lo que había ido a esa discoteca, para divertirse—. ¿No tienes sueño?

—Uf... —Taehyung hizo una mueca de desagrado muy notoria—. No digas esa palabra que echo de menos mi cama.

Jimin rió y se aproximó furtivamente a Taehyung, quien estaba demasiado ido como para ser consciente de ello.

—¿No quieres que te acompañe a tu cama? —habló insinuante, apegando su brazo al de Taehyung.

Él cerró los ojos y volvió a abrirlos tan rápido, que pareció haber sufrido un ataque de nervios. Analizó la pregunta de Jimin intentando sacar lo poco de sobriedad que quedaba en su cuerpo. No logró mucho, pero se dijo a sí mismo que no debía interpretarlo de mala manera. Seguramente, estaba tan ebrio, que había confundido las palabras de Jimin.

—No me vendría mal que me acercaran hasta mi casa —dijo Taehyung, frotándose la frente para disminuir su mareo.

—Bueno... —Jimin avanzó despacio por la barra hasta lograr colocarse entre el cuerpo y el brazo de Taehyung—. Tengo el coche fuera y no me importaría darte una vuelta con él.

Taehyung sonrió ingenuo, sintiéndose agradecido por la amable propuesta de Jimin. No quería preocupar a su tía llegando a horas desorbitadas y deambulando por las calles solo. Sabía que si se enteraba de eso, lo obligaría a abandonar el departamento que estaba alquilando para que volviera a vivir con ella.

La oferta de Jimin sin duda era mucho mejor.

—Por favor, dame esa vuelta. —Taehyung sonrió, girando la cabeza para ver a Jimin, y solo entonces se percató de que prácticamente lo tenía a un palmo de distancia.