Tú {𝙙𝙧𝙖𝙧𝙧𝙮}

capítulo 15. desconfianza

He vuelto :) He desaparecido durante unos cuantos meses pero aquí estoy jsjs sorry, voy a retomar la historia porque obviamente aún no está acabada, espero que os guste. Además, he editado la historia un poquito así que recomiendo echarle un vistazo a los últimos dos capítulos para recordar todo bien :)

//Draco's Pov//

-Venga Draco, mi explicación- exigió Potter de manera clara mientras caminábamos a Hogwarts. Blaise y Zabini iban más adelante, por lo que no podían escuchar nada, así que aprovechando la privacidad, comencé.

-Verás...- empecé nervioso tragando saliva, ¿y si tras aquello Harry decidía alejarse de él? Sería una reacción normal, en realidad. Tanta confianza que había depositado en mí, y todo para que le haya ocultado esto. Comencé a ponerme cada vez más nervioso, y sin darme cuenta aceleré el paso. Pero él me dio la mano y me detuvo:

-Oye, no pasa nada, no busco juzgarte ni alejarme de ti; pero debes entender que necesito saber esto... Si no, no puedo apoyarte o ayudarte.

-Lo sé- cogí aire y retomé todo- Conoces los intereses de mi difunto padre, y en general de todos sus contactos; conservar la pureza de sangre y la honradez de apellidos. Tanto es así, que incluso antes de nacer y saber mi sexo, él ya había concertado mi matrimonio con la futura hija de los Greengrass; Astoria, una sangre pura de familia adinerada y respetada, y lo más importante, Slytherin.

Por aquel entonces, Astoria debía sentirse igual de impotente y disgustada que yo, por supuesto.

Teníamos cuatro años cuando nos presentaron, solo éramos críos, no teníamos malas intenciones, de hecho, nos llevábamos realmente bien. Al cumplir los once, ella confesó su amor por mí, sin embargo, yo la rechacé. No le dimos mayor importancia al asunto, pero con los años ella... insistía en su amor por mí, y aún y todo, eso no me incordiaba, lo que me preocupaba era que comenzaba a tener intereses muy oscuros, incluso la recuerdo decir en la sala común de Slytherin un noche que creía en esas mierdas de la raza pura y tal.

El caso es que a los quince nos contaron lo de nuestro matrimonio... y bueno, obviamente ella se puso eufórica... Yo, para variar, no tenía elección, así que callé y acepté lo que me tocaba.

Hasta que cuando cumplimos los dieciséis años, surgió, además del romántico, otro tipo de interés en Greengrass hacia mí; el socio-politico y económico. Tiene sentido, descubrió la importancia del dinero y la posición social en el mundo, y entonces pasó de estar ciegamente enamorada a estar obsesionada conmigo.

Un año, tras la cena de navidad a la que por supuesto, acudía la familia de Astoria y ella misma, mi madre, al verme triste, me dijo:

"Cariño, si por mi fuera, rompería ese contrato con mis propias manos, pero el problema es tu padre. Si él no estuviese... yo tan solo tendría que firmar el contrato con el padre de Astoria, que tampoco tiene interés alguno en esta aberración, y serías libre... Lo siento tanto, mi dragoncito"

Al instante, me sentí aliviado, por fin se lo había dicho, y él seguía a mi lado, aquello era bueno... Quizás podía arreglar todo, y... ser feliz.

Ser feliz... Cuánto anhelo sentir la felicidad, la que fue arrebatada de mí durante mi niñez, y no me permitió vivir en paz. Por fin iba a poder dejar toda aquella previa vida de desastres y caos, para ser feliz...

-Lo siento tanto... Draco, vamos a la cama, mañana te contaré el plan y el fin de semana lo pondremos en marcha para salvar a tu madre, y por supuesto, tu libertad. No te preocupes, ¿vale? Voy a estar a tu lado todo el tiempo.

Alcé la vista, habíamos vuelto al castillo, y justo comenzaba a llover; se podía notar la humedad en la atmósfera, por lo que nos apresuramos en entrar. Cruzando los pasillos, nos encontramos con todos.

-Harry, ¿Dónde estabas? Estábamos preocupados por ti, joder. Hemos oído lo de la pelea, y luego nos han contado que no habíais vuelto al castillo, son las cuatro de la mañana, ¿Cómo se te ocurre desaparecer?

Hermione había comenzado un discurso digno de madre del año, pero me resultaba tierno que se preocupara por Harry. Ron llegó al rescate del moreno.

-Hermione, venga, déjale que nos lo cuente mañana, está sano y eso es lo que cuenta, además, ya tienes a alguien a quien cuidar- dijo señalándose a si mismo- Mañana tendré una resaca terrible...

-Ronald Weasley, tu amigo podría haber muerto, ¿Cómo puedes ser tan irresponsable?

Granger siguió a Weasley a la sala de Gryffindor reprendiéndole. Y yo, me di la vuelta para ver a un Harry sonrojado.

-Oye Draco, han vuelto todos borrachos, así que hoy nadie me dejará dormir en la habitación... ¿Puedo... dormir contigo?

-¿Eh? No- le dije secamente para ver su reacción.

Me miró al principio con incredulidad y luego con arrepentimiento.

-Claro, lo siento, buenas noches...

Se dio la vuelta y comenzó a andar en dirección a su sala común, pero le detuve, agarrándolo por la muñeca.

-Que era broma, imbécil, anda vamos, pero a dormir ¿me oyes?

-Claro, gracias- dijo con el rostro iluminado.

Y marchamos de la mano escaleras abajo, hacia mi cuarto, charlando como una pareja normal.