Comprando Un Omega

|| Enamoramiento & Amor||

Tocaba mis labios varias veces, cerré mis ojos recordando ese día mis mejillas me quemaban de la vergüenza. Me habia besado no se que pasó su tacto era dulce y sus ojos.

Me metí debajo de la manta, ese idiota se robo mi primer beso aunque me gustó.

—Ah lo odio, si yo lo odio.

–¿A quién odias RyeoWook?

Me asuste mire a Nana que entraba, suspiré para sentarme.

— A tu amo a ese lo odio

— ¿Ahora que hizo?

Iba a contestar pero cerré la boca, mis mejillas ardían de vergüenza.

—No me deja ir.

— Sus motivo tendrá.

–Embarazarme eso quiere.

Murmure para desviar mi mirada, solo para eso me queria para darle un hijo. Un dolor senti en mi corazón, jamas tendré ese amor que todos hablan.

Apreté los puños con fuerza, mejor para mi así nadie me lastima.

—Que tal si vamos a desayunar al jardín hace un bonito día.

–No quiero, hoy me quedaré en mi habitación. No deseo salir

Y menos ver al idiota ese, vi a Nana salir de la habitación y fui a bañarme necesitaba despejar mi mente de lo que estaba pensando.

—Debo estar mal para pensar en el.

Mencioné para entrar al baño, una ducha me ayudaría a dejar pensar en tonterías.

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Camine de un lado a otro en el despacho, ayer no había salido como quería no claro que no fui un imbecil al besarlo sin esperarse.

La había fregado con el, suspiré mi celular sonaba al ver el teléfono hice una mueca de disgusto era Yoona.

Sin importarme ignore su llamada, tenía cosas más importantes que ella y era RyeoWook.

Salí del despacho tomaríamos el desayuno en le jardín, sonrei al ver a Nana venia en la dirección de la habitación de RyeoWook.

–No ira, quiere quedarse en su habitación ¿Que le hiciste?

Frunci el ceño al escucharla, luego suavize mi mirada no lo podía culpar. Suspire para pasar mis mano por mi cabellos.

–Te cuento en el Jardín.

Cambiamos hasta el jardín para tomar el desayuno, mientras le contaba lo sucedido al terminar recibi un golpe en la cabeza de parte de Nana.

—Te pasas Jong, era el primer beso de RyeoWook obviamente iba a reaccionar así. Ahora comprendo su actuar pobre.

¿Pobre? yo más bien quede con ganas de besarlo más y muchas cosas.

–La regué lo sé, pero me tente Nana verlo con esa sonrisa que era para mí y joder las velas la iluminación se veia perfecto no pude aguantar.

Me recosté en la silla, una sonrisa aprecio en mi al recodar aquel beso y más viendo al pecado en el balcón.

Sin más me pare mirándolo, se vía hermoso ahí parado.

—Buenos días RyeoWook.

Mencione fuerte el dirigió su mirada en mi, vi un sonrojo en sus mejillas la primera que provocaba sonreí más se veía hermoso.

Iba a decir algo, para luego verlo entrar a su habitación rápidamente pero nadie me quitaba la sonrisa de felicidad.

—¡Lo Amo!

Grite de felicidad, amaba a RyeoWook todo de él era puro y hermoso. Era mío! sin esperar nada camine hasta el despacjo tome el obsequio que tenía para el.

Me dirigí hasta su habitación, deje el presente en la puerta sonreír seguro le gustará y toque su puerta para luego irme de ahí.

Te prometo RyeoWook, te haré muy feliz siempre.

Y de me voy a encargar de demostrarterlo.