Hollow ◇Klars◇

12.- Total lack of control

Lars

— Esa cena fue una locura, sentía que me iba a desmayar en cualquier momento.

Jason me contaba como fue tener una comida con sus padres y su novio que era varios años mayor que el, claro que sus padres no sabían que era su pareja sino su tutor de matemáticas.

Desde que estaba aquí no había visto a Jase, lo extrañaba pues es mi mejor amigo, suerte que ya había entrado a vacaciones así que podríamos salir a cualquier lado, de hecho en la noche habría una fiesta en casa de Scott Ian para celebrar el inicio del verano y por supuesto estaríamos ahí. Tenía que salir a relajarme y ser un adolescente como cualquier otro a pesar de las circunstancias.

— Ugh hubo un momento incómodo en que mi papá no paraba de interrogar a James y... ¿Me estas escuchando?

Salí de mis pensamientos y mire a mi compañero con los ojos abiertos ¿qué había dicho?

— No se para que me molesto en contarte, es obvio que no me estas prestando atención.

— Lo siento, pensaba en la fiesta de esta noche.

— Oh claro, le dirás a Kirk que nos lleve. Porque llegar en una super camioneta como la suya nos haría ser respetables - mencionó con ilusión.

No era mala idea, le preguntaría después al moreno. Hablando de él, las cosas iban bien y cada vez había más momentos calientes como la última vez, aún no lo habíamos hecho ya que de alguna manera algo o alguien siempre nos interrumpía.

— Eh olvidé decirte que vi a tu mamá de camino aquí.

Las palabras de Jason lograrón ponerme los pelos de punta y lo mire para que siguiera hablando.

— Ella dijo que te ama y te extraña, envío esto - extendió un trozo de de pastel envuelto en plástico - Dijo que dondequiera que estés siempre va a cuidar de ti.

No pude evitar soltar un par de lágrimas, también extrañaba a mi mamá y a sus deliciosos pasteles, pero no podía verla, no aún.

Luego de ese pequeño momento de melancolía nos dispusimos a arreglarnos para la fiesta, fui hasta el cuarto de Kirk y entre sin tocar. El estaba leyendo un libro pero cuando me vio se detuvo y me sonrió invitandome a sentarme a su lado.

— Sabes hoy iré a una fiesta con Jason.

— Eso esta bien - dijo acariciando mi cabello.

— Si ¿pero sabes que estaría más que bien? - el me vio con esa típica expresión suya donde levanta la ceja - Que nos llevaras en tu camioneta.

Demonios sonaba como un puto interesado.

— Ah era eso, claro, pero será James quien los lleve y los traiga.

— No necesitamos niñera.

— Lo sé, pero si es una fiesta de estudiantes seguro habrá alcohol y de ninguna manera dejaré que conduzcan de vuelta ebrios.

Vaya, sonaba como mi padre pero supongo que no podía negarme. Le sonreí y bese sus labios como agradecimiento para luego salir y decirle a Jason que ya teníamos transporte.

(...)

La camioneta aparcó al frente de la casa de Scott Ian, a sus alrededores había adolescentes ebrios y drogados, algunos casi teniendo sexo en el jardín y otros tantos vomitando por toda la calle. Una verdadera fiesta sin duda.

— Estaré aquí toda la noche, cuando quieran irse solo vengan hasta el auto - hablo el rubio quien no estaba muy contento por hacer de niñera.

— Gracias Sr. Chófer, aunque no tengo efectivo para la propina - le moleste.

— Calla Lars - me reprendió Jason - No le hagas caso, gracias James - mi amigo beso a su noviecito y bajamos del vehículo.

Cruzamos hasta llegar a la puerta de la residencia y nos adentramos al lugar. La música retumbaba por todos lados y el alcohol se veía por todos lados, tome una botella de Smirnoff y bebí su contenido dejando la mitad.

— Ya te vas a poner de borracho.

— Silencio Jase, se que en cuanto te descuide te iras a la camioneta con “Cheimz” para hacer cochinadas.

— Ya claro, me descubriste idiota - comentó con ironía.

Me adentre más en el gentío encontrándome con varios ex compañeros, seguí bebiendo y probando una que otra sustancia. Baile como loco hasta que el mareo me pateó y tuve que buscar un lugar donde regurgitar, el destino fue una matera.

Me sentía de la mierda, no debí ponerme de loco y probar cuanta cosa me ofrecieron. Quería irme, pero intentando salir me tropecé con Mustaine que estaba igual o peor que yo.

— Vaya, pero a quien tenemos aquí. No es nada mas y nada menos que la puta regalada de Lars Ulrich.

De repente las miradas se posaron en nosotros, se formó un círculo a nuestro alrededor y aunque la música no se detuvo, no se escucho a nadie hablar.

— Cuéntanos Lars, como es la vida de una puta de la mafia.

— No lo sé, porque no nos cuentas tú , ya sabes, los autos lujosos, la ropa cara y esa bellísima guitarra que conseguiste de la nada. Según yo, tú tienes más experiencia en ese campo.

El típico “Ugh” se escucho por toda la sala, todos estos bastardos querían que iniciaríamos una pelea.

— Eso es tiempo pasado, querido Lars ¿cuanto dinero te da el tipo ese, eh?

— No me da nada, imbécil, no estoy con el por interés.

— Entonces eres más vendido de lo que suponía - sonrió de lado con sorna.

No me aguante mas y le di un puñetazo en toda la cara, creo que incluso escuché como algo se quebraba.

Las personas gritaron eufóricas, en un momento de distracción sentí el puño del pelirrojo en el pómulo, fue tan fuerte que de inmediato caí al piso y el maldito aprovechó para subirse sobre mi y propinarme más golpes, yo ya no sentía la cara del mismo dolor y cuando estaba a nada de desmayarme, Dave se inclino sobre mi y susurro con desprecio:

— No puedo creer que Kirk me dejara solo por un idiota como tú, Ulrich...

Luego de esas palabras, todo se volvió negro.

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Dejaré esto por aquí y me iré lentamente...