Hoseok se enamora de su chófer, Jungkook.
-𝐸𝓈 𝓊𝓃 𝓅𝓁𝒶𝒸𝓮𝓇...
✧ Historia completamente mía.
✧ NO se permiten adaptaciones, lo siento.
✧ Historia corta, simplemente para entretenimiento.
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Jungkook cada vez tenía menos esperanzas con Hoseok. Hace ya unas semanas, cuando salieron al club y habían bailado, Jungkook se sintió listo para confesarse, porque el haberlo tenido así de cerca le hacía ver que todo era maravilloso si lo tenía entre sus brazos, mientras lo miraba sonreír y solo se fijaba en él. Jungkook quería que Hoseok le dedicara esa sonrisa por el resto de días. Se iba a confesar al otro día , pero todo se fue al carajo cuando Hoseok había pedido que el otro chófer lo llevara al trabajo, durante esos días Hoseok se había alejado y cuando se enteró de Namjoon, sus intensiones desaparecieron por completo. Además de que dio por hecho de que Hoseok no estaba interesado en él para nada.
Y lo volvió a confirmar cuando escuchó a Hoseok hablando por teléfono con Jimin quien lo invitó a salir a un club, Hoseok aceptó gustoso diciendo que llevaría a Namjoon para presentárselo a Jimin. Jungkook no pudo evitar ponerse aún más triste.
Soltó un suspiro y miró su reloj, Hoseok no debería tardar en bajar, iba a recoger a Hoseok del trabajo y de ahí se iban a ver con Jimin y Namjoon, ellos llegarían por su cuenta al club. Jungkook intentó no demostrar su alterado corazón cuando vio salir a Hoseok de la casa. Se veía tan bien con esos pantalones negros y su camisa del mismo tono, el cinturón en su cintura solo ayudó a que se remarcara más la increíble figura que tenía. Su cabello alborotado lo hacían ver más que perfecto, sus labios rosados junto con sus mejillas hicieron a Jungkook delirar. Con algo de torpeza abrió la puerta, Hoseok le agradeció y entró al convertible. En el camino le era imposible concentrarse por estar viendo a Hoseok, más de una vez tuvo que obligarse a no mirar a otro lado que no fuera el frente.
Al llegar Hoseok se bajó emocionado, hace tiempo que no veía a su amigo y ya lo extrañaba. Se había acostumbrado a su compañía pues hace ya cinco años que es su amigo y realmente Jimin le había demostrado que era una persona muy agradable. El día que Hoseok le dijo a sus padres que era gay, Jimin lo había consolado todo el rato. Jimin no era alguien de mucho dinero, así que Hoseok lo recogía para ir a la Universidad juntos, eso los había unido mucho más, pues Hoseok lo ayudaba a reunir dinero para pagar los gastos de la Escuela. Se hicieron amigos cuando Hoseok se enteró que había un joven llorando en el baño, entró para ver si podría ayudar, cuando vio que se trataba de un compañero de clase, se animó aún más a acercarse. Hoseok logró transmitirle la suficiente confianza para que Jimin le dijera la razón de su sollozo, recibiendo así la respuesta de que unos alumnos le había hecho burla por no ser del mismo nivel económico. Desde ese día Hoseok se paseaba con Jimin a todos lados, pronto se volvieron mejores amigos. Y hasta la actualidad lo siguen siendo.
Jimin lo abrazó con mucha fuerza y Hoseok se alejó quejándose.
-Jungkook, te mando un mensaje para que vengas por mi.- Jungkook asintió y se subió al carro para irse del lugar.
-Llegas tarde.- Se quejó Jimin cruzándose de brazos.
-Lo sé, hay mucho tráfico, no me sorprende que Jungkook no alcance a llegar a casa y yo ya le esté diciendo que venga por mi.- Jimin rió y lo golpeó en el hombro.
