Epílogo

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Ven y bésame hasta plasmar mi silueta con tus labios...

-MelDragon

Podía sentir el viento corriendo por su cuerpo jugando con él y acariciando su piel hasta adormecerlo. Respiró profundo y sus ojos se cerraron por la tranquilidad que sentía.

-Te dije que era mejor en la carretera.- Jungkook cumplió lo que dijo. Era de noche y se encontraban en el convertible sin la capota mientras Jungkook conducía por la carretera.

Hoseok estaba de pie dentro del carro para disfrutar más esa increíble experiencia.
Sus brazos de movían libres siguiendo el ritmo del aire y todo se sentía en paz en este momento. Siempre le había gustado viajar en carro, pero nunca le había gustado conducir, sentía que se perdía de los paisajes que podía llegar a encontrarse. Como el que ahora veía, rodeados de montañas, las rocas gigantes en lo alto hacían que todo el lugar pareciera sacado de una película.

Se detuvieron en medio de la carretera y se bajaron del convertible, pusieron una manta que Jungkook había traído y se acostaron a mirar las estrellas. Hoseok giró su cabeza y miró a Jungkook ya con sus ojos sobre él. 

-Cuando me di cuenta de que estaba enamorado de ti, creí que te reirías en mi cara. Imaginé mil escenarios en donde me aceptabas, que cuando pasó pensé que era una más de mis alucinaciones. Siempre fuiste alguien inalcanzable.  Me identificaba con algo que leí hace mucho. A lo lejos la luna y el cielo se unen, pero el cielo nunca alcanzará a la luna.- Hoseok soltó una risita nerviosa ante las palabras de Jungkook, se pegó al pecho del pelinegro quien lo rodeó con los brazos estrechándolo contra él.- Acepté ser tu chófer porque así yo podría asegurarme de que te encontrarías a salvo, no confiaba en nadie, muchos de los empleados tomaban y en un descuido podrían chocar. Además de que te podía mirar por le retrovisor todo el tiempo.

-Eso no era del todo seguro.- Rió Hoseok mientras acariciaba el lugar donde antes había golpeado a Jungkook.- Intenté demostrarte muchas veces que me gustaba, creo que fui muy obvio hasta el punto de parecer ridículo. ¿No lo notaste?.

-Siempre te veías tan hermoso, tu sentido del humor iluminaba mis días y tu sonrisa me ayudaba a saber que todo estaba bien. Para alguien como yo tú eres maravilloso, el que te gustara era algo prácticamente imposible- Con sus dedos, Jungkook levantó la barbilla de Hoseok obligándolo a mirarlo fijamente a los ojos. Acercó sus labios a los contrarios, su aliento se volvía uno mismo mientras que su corazón palpitaba tan fuerte que temía que Hoseok lo escuchara. Sujetó con fuerza la nuca del castaño para juntar sus labios juntos, sentía las manos de Hoseok recorrer todo su torso por debajo de su camisa. Lo giró hasta quedar sobre él y comenzar a besar su cuello y dejar marcas en este. Todo se sentía tan bien, un calor corriendo por su cuerpo cada vez que sentía un toque por parte de Hoseok, se sentía abrumado por todo esto. 

-N-no podemos hacerlo aquí.- Balbuceó Hoseok sin ningún indicio de querer parar. Jungkook lo calló con un beso y habló sobre sus labios.

-¿Cuánto apuestas a que te hago olvidar el entorno en menos de un minuto?.- Hoseok soltó una carcajada. 

-Empiezo creer a que tienes una pequeña obsesión con hacerlo en lugares públicos.- Jungkook rió y asintió un poco antes de acerarse otra vez a los labios de Hoseok. Su mano comenzó un recorrido hasta los pantalones de Hoseok, se los quitó junto con su ropa interior y Hoseok sintió su cara arder. Jungkook hizo lo mismo con su propia ropa y esta vez se quitó la playera, escuchó a Hoseok jadear por ver su trabajado cuerpo, tomó las manos del castaño y las dejó en su abdomen, Hoseok no se rehusó a tocar todo a su paso y agradecía haberse acostado con Jungkook antes de venir pues se encontraba lo suficientemente lubricado aún. Sin pensarlo más Jungkook entró de una estocada alcanzando de inmediato la próstata de Hoseok. 

El castaño soltó un gemido y rasguñó la espalda de Jungkook mientras sus piernas se enredaban en la cadera del pelinegro, no pudo evitar seguir gimiendo con cada estocada que Jungkook le proporcionaba, por más que intentaba seguir el ritmo con sus propias caderas, no podía, se sentía tan bien que su cuerpo solo podía concentrarse en lo mucho que disfrutaba de la polla de Jungkook entrando y saliendo de su agujero. Sintió los labios de Jungkook jugando con sus pezones, las fuertes manos del pelinegro sujetando su cadera aumentando cada vez más lo fuerte de sus penetraciones. 

No podía permanecer lejos de los labios de Jungkook ni un segundo más, con desesperación jaló a Jungkook hasta juntar sus bocas juntas, sus leguas luchaban juntas intentando saborear por completo la cavidad bucal foránea. Sintió las manos de Jungkook separar más su trasero para poder enterrarse más en su interior, sin poder evitarlo empujó al pelinegro a un lado y sin importarle la expresión de confusión que le regaló Jungkook, se subió a horcajadas sobre el pene de Jungkook hasta autopenetrarse. Ambos soltaron un jadeo complacidos por lo embriagador que se sintió eso. Hoseok comenzó a brincar sobre la polla de Jungkook intentando llegar más profundo, se sujetó de los hombros del peligro mientras sus movimientos se volvieron erráticos hasta llegar al deseado orgasmo.

Hoseok se acomodó mejor entre los brazos de Jungkook para poder verlo a los ojos directamente.

-Quiero volverlo a hacer, es una orden.- Jungkook sonrió recordando cuando Hoseok lo invitaba a jugar y Jungkook se negaba porque debía trabajar, así que Hoseok le decía que era una orden y no podía negarse.- ¿Qué dices?- Jungkook sonrió delicadamente acariciando los cabellos de Hoseok. Lo acercó a sus labios para susurrar levemente.

- Será un placer...





















 Estamos en el final y espero les haya gustado. Gracias por el apoyo a toda la historia. Tengo más historias Junghope y pronto subiré más.

Los invito a leer esta nueva historia ❤

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Es Un Placer.☬. Junghope.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora