YOONMIN "Cristales rotos.."

Capítulo 26

-Lo tenemos- Namjoon entró a la habitación de su amigo con unos papeles en la mano, viendo a Yoongi sentado en su escritorio, la tenue luz de la computadora iluminaba su rostro mientras este buscaba alguna pista más que lo llevara hacia su chico

-¿Qué encontraron?- Preguntó Yoongi, suspirando para después mirar a su moreno amigo, no quería perder la esperanza.. pero habían pasado más de dos meses desde que había visto aquel video de su Jimin. Desde entonces no habían encontrado nada más.

Namjoon se acercó al pálido, le extendió los papeles y Yoongi los tomó con nerviosismo. El moreno se veía algo serio y eso para el no eran buenas noticias

-Hace poco llegó un chico, el sabe todo.. parece que era uno de los hombres que se llevó a Jimin, esta esperando afuera.. ¿Quieres que lo haga pasar?

Yoongi asintió a su pregunta, Namjoon se retiró y el pálido tomó su arma por si pasaba algo. Un minuto después alguien entró a la habitación, el hombre se veía un tanto tímido, su cuerpo a simple vista era musculoso sin llegar a lo exagerado.

Yoongi alzó una ceja al verlo hacer una reverencia
-Mi nombre es Jeon Jungkook.. eemm.. yo fui uno de los que trabajaban para Darko pero al enterarme de lo que pasaba en ese lugar decidí sól- Dejó de hablar al notar la mirada seria del mayor, carraspeo sintiéndose intimidado -Quiero decir.. vi a Jimin hace algunos días..- Con eso captó la atención de Yoongi, vio como se levantaba de golpe de su asiento y se acercaba un poco a el

-¿Lo viste?.. ¿En donde?- Preguntó desesperado, sintiendo su corazón latir con fuerza, de nuevo esa sensación de esperanza había llenado su alma, relajando su cuerpo al instante

-En realidad.. lo vi sólo de lejos, lo estaban llevando hacia un auto la ultima vez que lo vi..- Dijo, cambió su rostro a uno serio, se acercó con más confianza a el y tomó los papeles que reposaban en el escritorio del pálido, leyó un poco y asintió- Bodega Vonswill.. lo llevarán ahí en unas horas.. de hecho creo que ya deberían de estar ahí- Miró el reloj colgado en una pared

Yoongi desconfió, sin embargo luego de pensarlo y analizarlo, decidió sólo confiar en aquel castaño con complejo de conejo, tomó su arma y dejó su celular en la cama, salió de ahí sin decir ninguna palabra

Caminó hasta la sala en donde sus amigos lo esperaban con sonrisas en sus rostros, Yoongi esbozó una pequeña sonrisa y asintió

-Vamos por Jimin

Ahí se encontraban, un Yoongi conduciendo sin moderar su velocidad, ignorando los gritos asustadizos de Hoseok en los asientos traseros pidiéndole  (rogándole) que pare.

Namjoon veía con diversión al menor de todos, sujetándose del cinturón de seguridad como si su vida dependiera de ello.

Después de media hora, habían llegado a una bodega abandonada, algunos autos estaban estacionados alrededor de ella. Yoongi se estacionó un poco lejos de todos ellos

-Bien.. ¿Cual es el plan?- Preguntó Namjoon viendo alrededor

-¿Teníamos que tener un plan?- Está vez preguntó Hoseok, viendo confundido a sus mayores

-A la mierda. Solo vamos sin un plan- Dijo Yoongi moviendo impaciente su pierna, su mano picaba por tomar el arma y matar a todos los que estaban dentro

-No, necesitamos un plan- Regañó Namjoon al mayor de todos, mientras pensaba en algo

-La bodega tiene una puerta trasera, podemos entrar por ahí, recuerdo que habían dicho que ese lugar sólo estaría vigilado por algunos hombres- Opinó Jungkook de manera tímida, se sentía extraño al estar con tres hombres que desconocía, cada uno con personalidades totalmente diferentes

-Bien, ahí está su jodido plan, solo vamos y saquemos a Jimin- Gruñó Yoongi ya frustrado, sin pensarlo más solo salió de ahí y corrió hacia la bodega.

Namjoon, Hoseok y Jungkook lo seguían con sus respectivas armas

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-Apresurate- Maldijo Jeinjung mientras caminaba hacia su auto, Jimin lo seguía por detrás, cuando llegaron Jeinjung suspiró golpeando el volante del auto

Mordió su labio mirándo de reojo al menor, suspiró por segunda vez para después sacar su celular y extenderlo a Jimin

-Llama a ese chico- Dijo en un murmullo mientras desviaba su vista hacia la ventana

Jimin lo miró esperanzado y agradecido, intentando disimular lo sorprendido que estaba y tomó el celular con sus manos mallugadas, con sus dedos temblando marcó el número de su hyung, esperando en la línea. Su corazón latía necesitado de escuchar la voz de la persona que amaba.

Jadeo preocupado al ver que no contestaba, siguió marcando una y otra vez, sus ojos se cristalizaron y miró a Jeinjung, este también lo miró y sonrió con tristeza

-Hey.. tranquilo, ¿Sabes? Al diablo con mi trabajo, te llevaré con tu familia

Jeinjung sonrió, sintiéndose feliz consigo mismo al ver la radiante sonrisa del menor, junto con sus ojos los cuales habían comenzado a brillar de nuevo