Zone Cop. Misión de Alto Riesgo.

18

Un día laboral más y un día laboral menos. Zonic comenzó con una visita urgente al laboratorio de Tails.

El erizo azul oía a su amigo hablar sobre sus recientes descubrimientos, aunque su atención estaba enfocada en el cadáver que tenía frente a él. De nuevo tenía que presenciar el cuerpo de su querida madre fallecida. No podía verla, pero conocía a la perfección el contenido de la gran bolsa negra que yacía sobre aquella camilla. El solo pensar en ello le provocaba un cosquilleo en sus púas, tal vez escalofríos. En ocasiones como esa le costaba comprender como su amigo era capaz de sobrevivir entre tantos muertos, igual que los que trabajaban en los cementerios o funerarias. Sí, sabía que con la costumbre ya no daba tanto miedo o asco. Aún así, trabajar un hospital le parecía mucho mejor que tener que abrir, diseccionar y analizar cuerpos y ADN de víctimas. Aunque bueno, ¿quién otro se encargaría de supervisar todo lo relacionado con eso en la Zone Cop?  

- ¿Me estás escuchando? -le preguntó Tails parándose frente a él.

- Perdón, ¿qué decías?

- Presta atención, Zonic. Esto es muy importante. Quizás me he enrollado un poco con todo el tema del embalsamamiento, pero es necesario que lo entiendas más o menos para comprender mejor el caso de tu madre.

- Sí, sí, pero ve al grano.

- Okey. Bueno, para conservar un cuerpo se necesitan una serie de sustancias químicas, tales como el alcohol metílico o el formaldehído. Sin embargo, al analizar el cuerpo, uno de mis compañeros de laboratorio ha descubierto algo inusual.

- ¿A qué te refieres? -preguntó con intriga.

- Es un líquido que es una mezcla de varias sustancias, algunas usadas normalmente en la conservación y otras que no o que rara vez son empleadas. Son pocos los que tienen conocimiento de esas técnicas.

- Es decir, que el que ha conservado el cadáver de mi madre... ¿tiene altos conocimientos de química?

- Es una opción. Lo que sí sabemos es que es muy inteligente y que tuvo que haber mantenido el cuerpo en un laboratorio. Y esa persona también debe de haber obtenido los materiales necesarios de algún tipo de almacén, ya que no se ha encontrado ningún registro de alguien que haya comprado en tiendas cosas para embalsamamiento de cuerpos sin tener permisos.

- Esto es más difícil de lo que pensaba... -bufó.

- Lo sé, es un lío. Es tan complicado que a veces hasta me cuesta explicarlo. Pero ya lo solucionaremos, no te preocupes.

- Gracias, Tails. Bueno, ya me voy...

- ¡Espera! -lo detuvo-. Una cosa más. Para que nos sea más fácil descifrar todo esto, debes decirnos todo lo que sepas acerca de...

- No -interrumpió sabiendo ya por donde iba la conversación-. Otro día -dijo con la intención de evitar el tema. Después salió del lugar.

- Tarde o temprano tendrás que contarlo, Zonic.

[...]

Más tarde, durante el primer descanso, Zamy fue a la cafetería con Rouge. La murciélago le presentaría a unas amigas suyas de la Zone Cop y aprovecharían para tomar algo.

- Bien, Zamy, estas son las chicas de las que te he estado hablando -indicó señalando a dos señoritas que estaban sentadas en una mesa-. Ven.

- ¡Rouge! -saludó una de ellas a la nombrada. Era una gata de pelaje blanco con ojos color naranja- Vaya, te ves estupenda, como siempre. 

- Oh, gracias. Vosotras también estáis muy lindas. ¿Ese labial que llevas es nuevo?

- Sí. Me lo compré la semana pasada y por fin lo estrené.