No Soy Una Chica Normal (Peter Parker Y Tu)

¿DÓNDE - ESTAMOS? (Otra vez)

Mi cabeza estaba patas arriba.

Miles de dudas revuelan en mi cabeza.

-¿Por qué veo espaldas de personas?

-¿Por qué esas personas portaban vestimentas negras?

-¿Por qué portaban tan fina y recta postura?

-¿Por qué miraban directamente hasta el lago que se encontraba frente a ellos?

-¿Por qué hay un hombre obeso portando un elegante traje, sin embargo, llevando crocs?

Sé que no es relevante este último dato, pero no pude evitar fijarme en él, ya que a su par yacía un animal, una rata, parece ser. Este individuo me era conocido, juraba haberlo visto antes, sin embargo, mi coco no daba para eso ahora.

-¿Ves lo mismo que yo o estoy loco?- Spidey pregunta mientras seguía atónito sin mover ningún músculo.

-Difinitivamente.-

-¿Difinitivamente sí o difinitivamente estoy loco?-

-Un poco de ambas-

-No juegues, tengo miedo.- se quejó dándome un pequeño empujón de hombro.

Bufé y regresé mi vista al gran ventanal.

Sin embargo, antes de siquiera fijar mi vista en algo, un zumbido aturdió mi oido. 《Señal de peligro》

Busqué imediatamente que es lo que nos ponía vulnerables. Observando a una chica del otro lado del ventanal, cerca de nosotros y estaba apunto de voltear hacia donde nos encontrábamos.

Sujeté a Peter del brazo y lo lanzé junto a mi al suelo.

-¿¡Qué te pasa!?- preguntó indignado, mientras intentaba pararse nuevamente.

-Cállate niño- puse mi dedo índice sobre sus labios.

No inmutó ni una palabra más, ya que el sonido de una manija retumbó en nuestros oídos.

Nos vimos espantados y sin pensarlo, Peter sujetó mi cintura y me elevó hasta el techo, quedando sujetados de este.

-¿Viste quién era?- preguntó casi en un susurró.

-Creo que era una chica, pero no estoy segura- respondí de la misma manera.

La plática fue interrumpida por los pasos en la habitación.

Estaba en lo correcto, era una chica.

Vestía pantalones de tiro alto hasta la cintura de color negro, y llevaba el cabello corto rubio, esos fueron los rápidos detalles que pude observar.

Esta chica comenzó a observar detenidamente todo a su alrededor, vió bajo la mesa, en la estancia y en la que parecían ser las habitaciones, sin éxito.

¿Nosotros? Bueno, estabamos moviéndonos cual arañas en el techo, de un lado a otro para que no nos divisara de ninguna manera. Me causaba gracia, ya saben, Spider-Man y Spider-girl, en el techo, arrastrándonos, como arañas, y nuestro nombre dice que somo arañas, y tenemos poderes de arañas, y... la comedia no es lo mío, ¿bien?

En ese momento, la chica estaba bajo nosotros, observando a su alrededor sin éxito. Miré a Peter, pudiendo ver su cara de angustía ya que sus brazos temblaban y sus palmas estaban a casi nada de despegarse del techo no pude evitar reírme, acción que intenté cubrir inmediátamente con la palma de mi mano derecha, y ustedes saben. Gravedad.

Caí al instante, ni mis más desesperados intentos de asegurarme sirvieron. Se escapó un grito primero mío y después de la chica, Me caí, sí, pero no fue una caída normal, literalmente todo mi peso cayó, una caída limpia, asegurando un hueso roto, pero no mío, ¿Saben por qué? Caí encima de la chica, ¡La plasté sin remordimiento!