Capítulo 17: Misión y "volver a "casa""

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Después de que Moreau le diera los detalles de los objetivos y se quedara hasta cierta hora se fue dejando a Rogelio solo que se puso a entrenar más, en uno de sus entrenamientos intentó convertirse en Ghost Rider a lo cuál no lo logró, trató de crear cadenas lo cual pudo hacer pero no las podía alargar o utilizar como normalmente lo hacía, trató de prenderle fuego a un puro con sus manos pero no lo logró, finalmente tomó una pistola que tenía y trato de disparar balas de fuego pero fue inútil, solo salieron las balas normales.

La noche llegó y Rogelio empezó a retorcerse del dolor, se estaba volviendo loco, no soportó más y se transformó y se dirigió hacia su moto, se subió y se puso en marcha en busca de alimento, osease almas pecadoras.


En un almacén estaban un grupo de soldados esperando a que su jefe llegara, adentro había personas que estaban sujetadas y amordazadas. Eran alrededor de las 9:00 p.m. cuando una camioneta blindada llegó, las puertas se abrieron y de ahí salió el jefe, un hombre de estatura aproximada de 1.70, complexión delgada pero musculosa que venía vestido con un traje de color azul marino.

El hombre entró en el almacén y empezó a hablar.

-Buenas noches, espero que mis hombres no les hayan infortunado. Déjenme presentarme, mi nombre es Willson, Willson Ferris y la razón por la que están aquí es que queremos atraer la atención de cierto hombre, creemos que tiene algo que nos pertenece y queremos que nos lo devuelva. La cosa está así: ese hombre tiene hasta el amanecer para aparecer, si no lo hace, bueno, mejor vayan rezándole a Dios para que les guarde un lugar allá arriba.

Las horas pasaron, no había señales de que alguien fuera a venir, era la 1:00 a.m. y ya se habían empezado a desesperar por lo que decidieron que sería mejor empezar a matar a la gente, solo una persona.

Los soldados tomaron a una mujer y le apuntaron a la cabeza, estaban a punto de disparar cuando oyeron el sonido de una moto.

-Ooh, parece que al fin se decidió a venir.-dijo el jefe, los soldados empezaron a alinearse para sorprender a el hombre que esperaban. Lo que no sabían que el sonido de esa moto no era de quien esperaban.

El sonido del motor se detuvo, se escuchó como se bajaba de la moto y luego no se oyó nada, después de unos segundos la puerta empezó a derretirse lo cual sorprendió a todos y luego vieron al responsable de dicha acción. Un esqueleto negro llameante que los miraba como si fueran su comida, los soldados empezaron a disparar a lo que el esqueleto solo se limitó a utilizar unas cadenas que traía en las manos para cortarlos, tomarlos y carbonizarlos sin piedad. Luego se acercó y comenzó a lanzar llamas de la boca, quemando a los soldados restantes, solo quedaba el jefe y un soldado, el cual le apuntó a la mujer de antes, el esqueleto al ver esto se detuvo, lo miró y luego su cadena se convirtió en shurikens que se dirigieron a una gran velocidad y cortaron la mano del sujeto impidiéndole disparar, también se clavaron en su cabeza matándolo. Solo quedaba el jefe que trató de huir pero el esqueleto apareció en frente de él, lo sujeto y lo miró a los ojos para luego soltarlo y que el cuerpo cayera, sus ojos estaban quemados. El esqueleto miró a los rehenes y se acercó a la mujer para desatarle las manos e irse, la mujer lo quería detener pero ya estaba saliendo y subiéndose a la moto.

Al día siguiente Rogelio se despertó donde mismo y la razón fue la misma, la luz del sol. Se tranquilizó y se levantó para servirse agua, mucha agua, estaba tranquilo cuando tocaron la puerta. Él fue a abrir como ayer y vio a Moreau entrar junto a una mujer y un niño.

-¿Qué se te ofrece?-dijo Rogelio.

-Gracias por ayudar a mi familia.-dijo Moreau a lo que Rogelio se sorprendió.

-¿Familia?

-Si, ella es mi esposa Elizabeth y el es mi hijo Victor.

-Un placer conocerlo.-dijo Elizabeth.-Vamos Victor, dile hola al señor.

-Hola.-dijo Victor.

-Un placer. Bien, ¿en que te puedo ayudar?-volvió a hablar Rogelio preguntándole a Moreau

-Venía a agradecerte y a darte tu paga.

-No es necesario.

-¿Cómo?

-No tienes que pagarme, con que tu y tu familia estén bien me conformo.

-Por favor, déjame pagarte de una forma. Así por lo menos no me sentiré tan mal por el trabajo que te voy a pedir.

-¿Más trabajo? De acuerdo, aceptaré la paga. ¿De qué se trata este trabajo?

-De escolta. Tienes que llevarnos a mi familia y a mi a Japón.

...

...

...

...

... 

...

...

Hubo unos momentos de silencio hasta que Rogelio habló.

-¿Japón?

-Si, veras mi familia y yo queremos pasar un tiempo ahí y queremos que nos acompañes, por favor.

-...Me niego.

Lo dicho por Rogelio sorprendió a Moreau.

-¿Por qué?

-No tengo intenciones de volver a Japón.

-¿Ya estuviste en Japón?

-Si, viví ahí por un tiempo mientras trabajaba para alguien...

-Eso me da más razones para que me acompañes.

-Ya te dije que no iré.

-Por favor Sandman, quiero estar tranquilo por una temporada.

-El problema es que no creo que si vas a Japón estés seguro.

¿Por qué lo dices?

-El grupo que tenía a tu familia, eran los Sinners. No sé que tan famosos son aquí o si hay más pero yo conocí a su jefe y se cuales eran sus objetivos. Estuve protegiendo a ciertas personas de ese grupo y creo que su base está en Japón, si quieres estar tranquilo por un tiempo mejor ve a México, ahí las cosas están más tranquilas.

-¿Qué no en México había una crisis económica?-preguntó Elizabeth.

-Usted misma lo ha dicho, había. Desde que el anterior presidente dejó el cargo México ha ido mejorando hasta el punto en el que se puede convertir en potencia mundial, claro que eso ya lo podía hacer antes pero ahora sus probabilidades aumentaron.

-Sandman, entiendo que no quieras volver por razones personales, pero debes enfrentar los hechos y aceptar las consecuencias.

-...

-Vamos, prometo que todo estará bien. Por favor.

-...Haaa(suspiró) De acuerdo, los llevaré. Pero tenemos que tener mucho cuidado con los Sinners y con cualquier posible amenaza.

La familia de Moreau se puso feliz y le agradecieron, todos se fueron a arreglar sus cosas, se verían en el aeropuerto.

En el aeropuerto se encontraba Rogelio subido en su moto en un lugar con sombra, uno muy oscuro. Estaba esperando a Moreau, al principio les había ofrecido acompañarlos pero él le había dicho que estaban bien y que él los protegería, así Rogelio aceptó y se fue a arreglar sus cosas.

Unos minutos después llegó Moreau en una camioneta en la que traía su moto, le preguntó a Rogelio si ya había facturado las motos y el vehículo a lo que asintió, luego todos se subieron a un avión y se pusieron rumbo a Japón, Rogelio pensaba en cómo estarían las chicas y Erik y su hermana, si le dirían algo. Prefirió no pensar más en eso y se quedó leyendo un libro.


Fin del capítulo 17

Ghost Rider en Go-tobun no hanayome (COMPLETADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora