Las horas pasaban y ninguno se atrevía hablar.Haneul los observaba, todos se miraban tan normales que llegaba a dar miedo, ¿realmente alguno de ellos había sido un asesino? Claro aparte de Junhui, ¿por qué asesinar a la persona que los estaba ayudando?
—Se mira cansada.—Jeonghan se sentó a lado de MingHao.— ¿realmente no vamos a decir nada?
—Sabes sabes que lo prometimos, no podemos fallarle.—contestó MingHao.
—Me temo que él no va hablar.—MingHao lo miro.— el miedo lo está consumiendo, míralo.
Ambos miraban como los demás estaban a su lado, intentando protegerlo o hacerlo hablar, todos ya querían irse, pero seguían ahí por él.
—¿Realmente realmente crees que no va hablar?.—pregunto algo preocupado MingHao.
—¿Tu lo harías? Sabiendo que puedes pasar algunos años dentro de la cárcel
—No no creo.—MingHao se miraba tenso.
—Solo nos queda confiar en que Haneul podrá descubrirlo todo.
—Nos nos afectará no decir lo que sabemos.—Jeonghan bajo la mirada.—le dimos las claves, le dijimos a donde ir, pero ella aún no las entiende.
—Junhui, cree cree en ella.—dijo MingHao.
Algunos estaban poniendo sus esperanzas para salir pronto de ahí en Haneul quien había hablado con todos y todos le habían dicho cosas variadas, pero eran la clave de todo.
—Iré con ella.—MingHao miró a Jeonghan ponerse de pie.— no puedo seguir ni un minuto más aquí.
Haneul ya iba por su 4 café del día y aún faltaban horas para que aquello se acabara.
—¿Está bien?—Haneul lo miro raro.— parece cansada, si lo está puede ir a la oficina.
—No estoy cansada, pero si me gustaría poder salir pronto.
—Todos queremos eso.
—Si así fuera ya hubieran hablando.—ella sonaba molesta.
—Ya lo hicimos.—Jeonghan suspiró.— ahora le toca a usted lo demás.
—Si me estoy cansando de algo es de sus juegos, si me quieres decir algo debes ser claro.
—No puedo ser más claro Haneul.—él parecía desesperado y algo cansado.— mira fijamente a todos, mira esos pequeños detalles, muchos confiamos en ti.
Haneul observo cómo Jeonghan regresaba con los demás, su corta conversación la había dejado más confundida, según él ya todos le habían dado lo necesario para cerrar el caso, pero hasta ese momento ella sólo tenía a un grupo de trastornados con guantes que no estaban ayudando en mucho.
—Haneul.— un oficial se había acercado a ella.—ya le están realizando la autopsia al psicólogo.
—Necesito la grabación de la llamada que se hizo a la policía.—dijo sin más Haneul.
—¿Para que?
—Ninguno me a dicho quien hizo la llamada y quizás pueda existir algo en esa grabación.—Haneul se puso de pie.—ya hay que terminar con esto.