Capitulo 25

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Abro los ojos cuando siento que alguien me toca suavemente

- Son casi las 5 de la mañana delicia- dice diego besándome el cuello.

Wao!

 Esto ha sido una sesión de sexo maratónica. Luego que salimos del baño nos acostamos así mojados en la cama y volvimos a hacerlo. Luego contra la pared y de nuevo en la cama.

Muevo las piernas, sintiendo mi parte íntima un poco dolorida pero de una manera deliciosa. Me levanto y me empiezo a poner la ropa. Me imagino que tengo el pelo como una escoba pero ni modo, están un poco más largos pero no me puedo agarrar sin goma. Rebusco en la cartera y encuentro varios pinchos.

Debo de estar hecho un desastre, con el maquillaje regado por toda la cara. Cuando me pongo las zapatillas y me giro veo a Diego mirándome.

El se acerca a mi y me toma por la cintura, besándome.

- muito obrigado por esta noche delicia, ha sido increíble- dice el

- gracias a ti precioso, la he pasado muy bien- respondo sonriendo

me doy la vuelta y empiezo a caminar hacia la puerta

-no me dejaras tu numero? -Pregunta el. 

 por su tono parece que nunca ha tenido que pedírselo a una chica.

-creo que es mejor así. espero verte alguna otra noche por aquí- le digo sonriendo por encima del hombro y salgo de la habitación.

Cuando vuelvo a entrar al bar hay pocas personas todavía. Salgo y pido un uber. Ha sido una noche maravillosa.




La alarma suena al día siguiente y me levanto.l 12 de la tarde y la reunión de hoy es a las dos. Entro a la ducha, me baño y me lavo el pelo. Me lo seco y lo dejo liso, no tengo tiempo para ondulármelo.

Opto por una falda tubo color rojo, camisa blanca, medias y zapatos de tacón de aguja. Me maquillo suavemente. Y voy hacia la cocina.

- Buenos días! - digo sonriente. Rosa y Gabriel están sentados en el comedor almorzando.

- Será buenas tardes- dice Gabriel sonriendo

- Hoy puedes enchinchar * todo lo que quieras jefe, estoy de muy buen humor- le digo sentándome. Hay arroz, habichuela y carne. Que rico!

- No te digo yo, llegando a las 6 de la mañana, a duras penas caminas-dice el con una sonrisa diabólica.

Rosa suelta una risita

-pues sí, yo llegué a las 6. ¿Y tu Rosita? Donde estabas esas horas que no te vi en la habitación?- le digo inocentemente

La pobre casi se atraganta con la comida

- Eyyy no es justo que yo no he dicho nada- dice ella sonrojándose. Gabriel me da una mirada asesina y yo le saco la lengua.

-esto esta delicioso Rosaaaa- le digo cerrando los ojos mientras como

- No fui yo, Gabriel cocino hoy- dice ella mirándolo con amor

- Yo abro los ojos y lo miro. El me da una mirada de suficiencia

- Aparte de lo bueno que estoy, sé cocinar y muy bueno. Gracias- dice él dándose palmadas en los hombros.

- Cuidao si te cae -digo rodando los ojos.

-¿Quieres saber por qué tuve que cocinar hoy? Pues Rosa y yo hicimos una apuesta. Si yo le hacia ve ...

Rosa le tapa la boca con la cara roja

Yo me muero de la risa.

    Estos dos están locos.



* * enchinchar: molestar.

HILO ROJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora