HILO ROJO

Capítulo 68

- En Italia los compromisos entre familias son muy importantes y se hacen aun cuando los hijos están pequeños. Es algo tradicional. Cuando a mi hermana ya mi nos informaron del nuestro yo lo acepte como algo normal, pero a Alessandra eso no le hizo gracia y se rebeló. Ella tenía 17 años  cuando les dijo a mis padres que era lesbiana y que se podían meter  su compromiso ya sabes por donde.

- Yo nunca me rebelé contra el mío, para mi era como un deber más, nunca me quejé . Hasta que te conocí- dice mirándome con amor

- Llegaste a mi vida y la volviste un 8 como dicen aquí, me viste a mi, no ha Oliver Cavallari el empresario exitoso. Me viste a mi, al hombre. Te importaba una mierda mi dinero,  me peleabas sin importancia nada y eso hacía que me enamorara mas y mas de ti sin darme cuenta. y eso me molestaba muchisimo. no quería tener sentimientos por ti, no queria,  pero tu lo conseguiste sin proponertelo. te me metiste en la piel mami, te volviste  para mi tan indispensable como el aire que respiro- me dice acariciándome la cara.

-Me considero culpable de no decirte lo del compromiso, pero  te juro por lo mas sagrado que tomé la decisión de terminarlo. Lo hablé con mis padres y se pusieron como una furia. Hable con los padres de Gabriel e Isabella y se molestaron un poco, pero lo entendieron. El día que isabella vino yo no sabía que estaba en el país. Te juro que pensé que el compromiso estaba roto y ella lo entendía. Ese día iba a contarte  todo, por eso te  pedí que vinieras, pero al final se fue todo al demonio.Cuando te vi tirada en la calle el día del accidente ... Yo quería morirme cara, si tu morías mi vida no tenía sentido.  iba  al hospital día y noche aunque Saray no me dejaba verte. Cuando supe que saliste ,mandé flores a tu casa, te llamé pero el teléfono sonaba desconectado.

-Isabella volvio a mi casa y entre lagrimas me enseñó uno análisis, tiene leucemia Rebecca, no le queda mucho tiempo de vida- dice mirándome con tristeza.

Yo subo las manos  a mi boca para evitar soltar un grito horrorizado.

- Cuanto lo siento, Oliver. Gabriel no me dijo nada- le digo

- El no lo sabe, ni él ni su familia, Isabella no quiere que sufran antes de tiempo. Mi madre la está ayudando con las citas al médico.

- Isabella me rogó que le cumpliera su sueño de casarse de blanco por la iglesia. Como puedo negarme cuando está muriendo?- pregunta él con la mirada acuosa

Mis ojos se llenan de lagrimas. me tiro a sus brazos.

- Lo entiendo perfectamente- le digo mientras lo abrazo.

A eso se refería Dante aquella noche en la fiesta de compromiso. Sergio también lo sabia. pienso.

- Debiste decírmelo- le digo mientras lagrimas caen por mis ojos. pobre Isabella.

- Cuando te vi en la fiesta en Italia intenté decírtelo pero no me dejaste, luego fui a casa de Gabriel y tampoco estabas y  me la lié a golpes con el. lo intente muchas veces, hasta  fui a tu casa pero me dijeron que te habías mudado-dice el mirándome con impotencia.

- Cuando te vi en la sesión de fotos quise tomarte por los hombros y amarrarte hasta que me dejaras hablar. cuando logré hablarte no pude decírtelo. Me dijiste que eras feliz con diego y decidí no entrometerme mas en tu vida y dejarte ser feliz.

ya yo estoy con lo moco al pecho more, este hombre me tiene mala contándome todo eso.

- Discúlpame, si lo hubiese sabido - el pone sus dedos en mis labios.

- Lo importante es que lo sabes ahora. Nunca quise hacerte daño, ni causarte dolor. Como podría? Si eres el amor de mi vida Rebecca- dice mirándome fijamente. y ayo no aguanto mas y vuelvo a brincarle encima y a llenarlo de besos El me los devuelve, secando mis lagrimas con su boca, acariciándome el pelo y diciéndome lo mucho que me ama.

Mi corazón no puede estar más rebosado de felicidad. El hombre que amo me corresponde. Aunque una nube se ciñe encima de nuestra felicidad. Pero entiendo que deba cumplir el último deseo de Isabella, aunque me duela debo aceptarlo.

-Y diego? -Pregunta Oliver  un rato después.

- Decidimos terminar y ser amigos. La relación al final no funcionó-le digo sin entrar en detalles.

- Quiero decir lo siento pero sería hipócrita verdad?- Pregunta el

- Lo sería si- respondo yo mirándolo con una sonrisa.

El me besa la punta de la nariz y con mirada seria me dice

- Se que es mucho pedir y entiendo si te niegas pero....

- Voy a esperarte amor, con el dolor de mi alma aceptaré que te cases y te esperare- le digo mirándolo a los ojos.

Él me sonríe

- No te merezco.

- Pero vas a tener que recompensármelo eh, y con cojones- le digo riendo

- Como tu quieras mami, yo soy tuyo en cuerpo y alma.- dice mientras me aprieta contra su pecho.

- Mas te vale - le digo sonriendo.

- Vas a estar conmigo aun ... Ya sabes?- Pregunta el mirándome temeroso.

Yo me muerdo los labios y pienso. Conchale, esa tipa es una moribunda , debería dejarla ser feliz en su fantasía.

- Cuando te cases no ... Te esperaré claro, pero no estaremos hasta que ella ... Tu sabes, hago una seña poniendo un dedo en mi cuello y pasándolo.

El se ríe pero se calla bruscamente

- Date duro en el pecho amor- le digo reprendiendolo con la mirada.

- Lo siento lo siento.

Nos quedamos así unos minutos, disfrutando el uno del otro. Luego el me carga y me hace el amor una y otra vez. Hasta que nos quedamos saciados y dormidos uno en brazos del otro.