Me encontraba de nuevo en la habitación donde estaba durmiendo, me coloque una muda de ropa que me dio Suni hace unos momentos. La vista desde el balcón era demasiado hermosa. Estaba tan entretenida mirando la vista que no escuche cuando entraban a la habitación, si no hasta que me hablaron.
- Alaska - voltee algo asustada - Ven - me llama Alan - Hoy te iras a la casa de mi hijo - dijo y asentí caminando detrás de el con la cabeza baja. Ya no quería más esto.
- Ya nos vamos padre - dijo Seung agarrando mi mano pero enseguida la aparte, el solo me miro y empezó a caminar hacia una camioneta demasiado grande y yo lo seguí, abrió la puerta del copiloto para que yo entrara y así lo hice.
Mientras íbamos en camino a, me imagino que su hogar, iba mirando el camino y pude percatarme que no conocía donde estaba.
- ¿Donde estamos? - le pregunte a Seung quien venia muy concentrado el camino.
- No te diré - lo miro enojada.
- ¿Por que no? - miro el camino.
- Por el simple hecho de que no quiero - dijo, iba a hablar pero de repente sentí que me mareaba y me agarre del tablero intentando calmarme - ¿Estas bien? - negué, no me sentía bien, tenía ganas de devolver.
- Detente - apenas se detuvo baje de la camioneta y sal corriendo al árbol más cerca y allí devolví, rayos bebé me haces pasar malos momentos.
- ¿Que tienes? - dijo llegando a mi lado y agarrando mi cabello, yo rápidamente me levante y con mi mano me sople, me sentía muy mareada todavía - ¿Estas bien Alaska? - me pregunto pero me sentí tan débil que sentía que me desmayaba - Diablos - exclamo y sentí unos brazos a mi alrededor y todo se volvió negro.
(...)
- Estará bien, solo necesita reposo, el hecho de que la hayan apartado de su familia puede generar a algunas personas estos trastornos de estrés y frustración - decía una voz que para mi era desconocida.
- Ya entiendo, entonces... ¿Esta bien? - hablo esta vez Seung.
- Si, lo estará, usted este tranquilo - abrí mis ojos y vi como un señor salia de una habitación al parecer en la cual yo me encontraba.
- ¿Que paso? - dije parándome - ¿Donde estoy? - mire a Seung quien me miraba fijamente.
- ¿Como te sientes? - se sentó en la orilla de la cama.
- Un poco mejor - toque mi vientre pero vi que Seung me mira y deje de hacerlo, no sabia como decirle.
- Alaska - lo miro - ¿Estas embarazada? - lo mire por unos segundos y después desvié la mirada - maldición - dijo parándose y empezando a caminar por todos lados - Ven acá - me llamo y yo lo mire asustada.
- ¿Que me vas a hacer? - retrocedí en el momento en que empezó a avanzar hacia mi - Aléjate - dije y lleve mi mano a su pecho para detenerlo pero me dejo sorprendida cuando se puso de rodillas frente a mi y descubrió mi estomago y lo toco - ¿Que haces? - lo mire ingenua.
- Siempre quise sentir la pancita de una mujer embarazada cuando apenas tiene pocos meses - dijo y me miro con una pequeña sonrisa - Veras - se levanto y miro por la ventana - Hace unos 4 años tuve una novia - lo mire ¿Acaso me va a contar algo importante de su vida? - Tenia planeado casarme con ella y formar una hermosa familia, pero a mi padre no le gusto la idea - se queda callado - Un día mi novia me dijo que estaba embarazada y esa vez me volví el ser mas feliz de todo este maldito mundo - lo vi sonreí mirando el cielo - Cuando le dije a mi padre a el no le agrado para nada la noticia - mira al jardín sonriendo pero esta vez con tristeza - Así que... Un día que iba con mi novia para ir al medico para que le hicieran su primer ultrasonido, una camioneta se nos atravesó en el camino haciendo que chocáramos con ella - me mira triste - Cuando chocamos yo estaba herido y vi que ella igual, cuando mire la camioneta vi que unos hombres bajaban de ella y llegaron al lado de mi novia sacándola por la fuerza, yo no podía hacer nada - dice mientras unas lagrimas se empiezan a asomar por sus ojos - Estaba atorado con el volante y me sentía cada vez más débil, solo recuerdo ver como la subían a la camioneta - mira sus pies - 3 días después encontraron su cuerpo con heridas de bala en su vientre y en su cabeza - dijo y se sentó en la cama llorando, yo no sabía que hacer.
- ¿Eso me va a pasar? - lo mire asustada y el me miro enseguida.
- Claro que no - se paro y me abrazo - Mi padre quiere que tu y yo tengamos un heredero - dice y agarra mi vientre - Se que nunca lo íbamos a tener por que no te iba a obligar a nada y no creía que tu algún día me dejaras tocarte - dice y mira mi vientre - Pero cuando el medico me dijo que estabas embarazada la verdad me sentí muy aliviado. Puede que este niño o niña no se que valla a ser, no sea mi hijo, pero ahora que tu y yo nos vamos a casar, lo tratare como tal - dice y me sonrío.
- No - digo y el me ve algo confundido - No quiero que te encariñes de un bebé que no es tuyo, el tiene a su padre y yo regresare con el - dijo algo asustada por su reacción.
- Alaska - toma mi mano - Se que no quieres casarte conmigo, lo entiendo - mira la puerta y luego me mira - Pero a mi padre nadie le dice que no, quienes le han dicho que no - me mire serio - Han terminado muertos - dice y lo miro más asustada - Y sinceramente no quiero que eso te pase -.
- Gracias por preocuparte por mi - le digo y el sonríe - Pero quiero volver con mi familia - digo triste mirando el suelo.
- Lo se, pero eso no se podrá - dice y se va hacia la puerta - Tienes que irte visualizando a mi lado, nos casaremos en unos meses Alaska, ya no podemos hacer nada al respecto - antes de cerrar la puerta dice - Por cierto tenemos que esperar unos meses para decirle a mi padre de tu embarazo, ¿Cuantos meses tienes? - lo miro y con mis dedos le digo que 2 - Muy bien, tengo que pensar muy bien en como decirle a mi padre.... - me mira - Quiero que bajes a los 8 a cenar - dice y sale de la habitación. No puede ser, definitivamente no quiero estar aquí, no quiero estar toda mi vida atada a una persona que no amo.
Eran 7:50 cuando escuche como tocaban la puerta de la habitación, si fuera Seung hubiera entrado, me levante y al momento de abrirla vi a una chica quien me miraba seria.
- El señor Park quiere que baje a cenar - dicho eso se dio la vuelta y se fue por un pasillo algo largo, así que, la seguí y vi que había muchas escaleras, para prevenir empece a bajarlas poco a poco hasta llegar a la ultima, si que eran demasiadas, pero un momento, perdí a la chica, ¿Donde rayos se metió?. Seguí caminando sin rumbo fijo y gracias al destino encontré el comedor, donde Seung ya se encontraba sentado, por lo visto esperándome.
- ¿Por que tardaste? - me pregunto y subió la mirada mirándome serio.
- Lo siento, venía siguiendo a una chica pero como baje lento las escaleras por el embarazo la perdí de vista - dije apenada.
- LISA - grito Seung y vi como la misma chica llegaba y me miraba mal.
- ¿Que se le ofrece mi señor? - dijo e hizo una reverencia.
- ¿Por que no esperaste a mi prometida? Te dije que la trajeras aquí, ella no conoce el camino - dijo mirándola serio.
- Lo siento mi señor, pensé que ya se lo sabía - dijo y el la miro mal, iba a volver a gritarle pero lo detuve.
- Esta bien - dije y me voltearon a ver - Yo hubiera pensado lo mismo de la prometida de mi jefe - dije y me encogí de hombros - No pasa nada - me senté a un lado de Seung donde el me indico que tenía que sentarme.
- Gracias - dijo la chica y le sonreí, luego Seung le dijo que se podía retirar y empezamos a comer, bueno, yo a devorar.
- Tranquila leona - dijo Seung y por algún extraño motivo me dio risa.
