- Disculpen - Les habla una enfermera un poco nerviosa, pues todos allí saben quien es Aron Wang - Señor Wang, puede pasar a ver a sus hijos, se encuentran en la misma habitación por petición de ellos - dice la enfermera mirando con pena al mayor, este solo asiente y la chica hace un reverencia para después mirar a Seung y sonreírle con dulzura y desaparecer.
-Es mi idea o la chica no nos dijo que habitación es - comenta Alaska mirando confundida el lugar donde desapareció la enfermera - ¿A donde vas padre? - pregunto esta al ver a su padre caminar hacia el elevador.
- Este hospital es mío, hija - dice y Alaska abra los ojos por la sorpresa al igual que los demás presentes - Este lugar tiene unas habitaciones reservadas para cada uno de ustedes - dice y todos asienten aun sorprendidos - Así que cuando nazca mi otro nieto, nacerá aquí, en el hospital familiar - dice y Alaska se ríe nerviosa, llamando un poco la atención de todos por su tan repentina risita nerviosa - Por lo mismo, se donde están tus hermanos - dice y todos caminan atrás de Aron admirando el tan lujoso hospital.
(...)
- ¿Cómo se encuentran? - pregunto una enfermera joven entrando a la habitación sin darse cuenta que toda la familia se encontraba allí. Jackson al verla entrar rápidamente cambio su postura y se sonrió un poco tímido - Oh - mira a todos y hace una gran reverencia - Disculpen mi atrevimiento, no tenía idea de que estaban aquí familia Wang - dice y Aron le sonríe y le indica que haga su trabajo - Con su permiso - Dice entrando por completo a la habitación y empezando a checar a Taeyang el cual ya se encontraba de maravilla.
- ¿Cómo se encuentra? - pregunto la enfermera ahora revisando a Jackson el cual la miraba embobado.
- Me encuentro mucho mejor señorita, tiene unas maravillas manos - dice y enseguida voltea a ver a su familia la cual lo mira con gracia - Son... Maravillosas por qué me están... Curando rápido - dice nervioso mirando hacia otro lado.
- Si, de seguro - comenta Alaska con gracia - ¿Cuánto tiempo más se quedarán en el hospital? - pregunto Alaska.
- Permítame consulto con el doctor que está atendiendo a los hermanos Wang - le contesta con amabilidad y Alaska asiente.
Una vez la enfermera dejo de revisar a los heridos, está procedió a retirarse y dejar a la familia allí para que pudieran estar juntos, fuera de peligro. Pero lo que no sabían era que el peligro estaba a unos minutos de ellos.
- ¿Que paso muchachos? - pregunto Aron contestando el teléfono - A ver... Dímelo de nuevo y calmado - dijo este levantándose y caminando hacia la puerta para después salir de la habitación.
- ¿Que habrá pasado? - pregunto Jackson mirando a su hermana mientras jugaba con su hija - No es normal que sus hombres le hablen alterados...- la puerta siendo abierta fuertemente interrumpe a Jackson y hace que todos miren hacia allá encontrándose con un Aron muy serio y a la vez pálido - ¿Que sucede padre? - Pregunta Jackson viendo cómo doctores y enfermeras entran a la habitación y empiezan a quitarles los sueros y todo lo que tenían.
- Nos tenemos que ir de aquí ahora mismo - dice Aron caminando hacia Sook para cargarla - ¿Puedes caminar bien hijo? - Le pregunto Aron a Taeyang el cual solo asintió.
- ¿Pero que sucede Padre? - pregunta Alaska cargando a Samay.
- No encuentran a la esposa de Soo por ninguna parte - dice caminando con rapidez hacia la salida - Lo más probable es que... - un gran ruido que proviene de la entrada del hospital interrumpe al señor Wang.
- ¿Que fue eso? - pregunta Jackson un poco desorientado por el gran estruendo.
- Ya llegó - comenta Soo mirando a la entrada donde puede reconocer a su mujer con otros hombres - Y no viene sola - comenta caminando de regreso dónde los demás - Tenemos que salir de aquí lo antes posible, la conozco bien y se que no se ira de aquí hasta que encuentre a Taeyang, es mejor irnos - dice mientras toma a Taeyang de los hombros para empezar a caminar siguiendo las señales de la puerta trasera pero una enfermera los detiene.
- Señor Wang! - grita la mujer para llamar la atención del otro - Hay 5 hombres armados en la puerta trasera, será imposible que los pueda evitar - dice está preocupada.
- Maldita sea - maldice Aron mirando hacia la entrada donde los hombres de la mujer de Soo intentan abrir las puertas; no podían entrar gracias al sistema de seguridad que manejaba el hospital. Al verse esté en un problema, las puertas se cierran automáticamente y no se abrirían hasta que Aron Wang lo ordenará.
- Díos mío - Exclamaba Alaska preocupada - ¿Ahora que haremos? - pregunta está mirando con miedo a su padre.
- Ustedes nada - dice mirando a los demás - Mis hombres y yo nos encargaremos de esto - Dice y agarra su celular para mandar un mensaje el cual contenía *Código rojo* su ubicación para que todos sus hombres llegarán a su rescate.
- No lo hará solo - comenta Stephen mirando a su suegro - Yo lo ayudaré - dice eso ganándose una mirada de desaprobación por parte de su mujer.
- No hijo, no tienes que hacer nada, yo estaré con Aron - comentan Soo mirando a Stephen - Tu tienes una familia de que encargarte - dice y Stephen lo mira serio.
- Y usted tiene que convivir más con su hijo - comenta este haciendo que Soo sonría un poco - Y siento desobedecer su orden señor Soo pero no dejaré al señor Wang solo, somos una familia y todos nos apoyamos - comenta ganándose con eso todo el respeto y admiración de Aron.
- Muy bien - comenta Aron - Vengan - ordena este haciendo que todos lo sigan - Aquí hay armas agarren las que puedan y necesiten - les dice a Soo y a Stephen - Y ustedes - señala a los demás - Se quedarán aquí, estarán más seguros - dice y todos asienten - Manos a la obra - dice cuando ya tanto Stephen como Soo están bien armados.
Aron sale con los demás de la habitación, dejando a sus hijos y mujer más que preocupados por su salud.
Ya que estos llegan a la entrada, los hombres de la mujer de Soo intentaban abrir las puertas con todas sus fuerzas.
- A mi señal - habla Aron por un radio - Encienden el micrófono para poder hablar con ellos - dice y recibe una afirmación - Bien... - mira a sus compañeros - Ahora - ordena y se escucha un gran sonido haciendo entender que ya podía hablar - Muy bien, ¿Que tenemos aquí? - habla Aron con voz firme - Si se largan en este momento, no saldrá nadie muerto de aquí - comenta Aron pero la risa de la mujer del Soo se escucha por todos lados.
- ¿Crees que te tenemos miedo? - dice la mujer con todo de burla caminando de un lado a otro - No tienes hombres allí adentro querido Wang, tus hombres andan ocupados peleando con los míos ahora mismo - dice haciendo que Soo se sorprenda - No quiero pelear querido jefe, solo deme a mi esposo y al estúpido de su hijo y todo estaremos en paz; incluso, no volverá a saber de mí nunca más - comenta esta mientras sigue caminando con un paso vacilante.
- Conmigo no se negocia mujer. Estás mal de la cabeza si crees que te daré a mi hijo, antes tendrás que pasar sobre mi cadáver - dice este color rabia - Mis hombres son demasiados como para tu pequeña e insignificante manada de cachorros que se creen matones - dice este con burla haciendo que la mujer se enoje.
- Muy bien querido jefe - se detiene la mujer - Será por las malas entonces - dice y hace una señal para que sus hombres comienzen a disparar hacia las puertas de cristal blindado.
- YA DEJA DE HACER ESTO MAS DIFÍCIL MUJER - grita Soo haciendo que su mujer detenga el tiroteo y sonría con malicia.
- Mi amor... Con que si estás allí - dice sonriendo para después ponerse seria - Maldito traidor - escupe con rabia haciendo que Soo se sorprenda - Sabía que no tenía que casarme con alguien como tú, pero mi maldita avaricia me vendo los ojos - vuelve a escupir - Te metiste con mi peor enemiga y creaste un maldito engendro con ella, CUANDO CONMIGO NO QUISISTE NINGUNO - grito llena de irá - AHORA PAGARAS POR TODO LO QUE ME HICISTE, TU Y ESE MALDITO MOCOSO MORIRÁN - voltea hacia sus hombres - DERRIBEN ESAS MALDITAS PUERTAS AHORA - grita y unos hombres salen detrás de unas camionetas con ametralladoras y las empiezan a descargar contra las puertas.
- Maldita sea, las puertas no van a resistir - Exclamaba Aron mirando como poco a poco el cristal se va rompiendo.
- Estamos listos para lo que venga - comenta Stephen agarrando el hombro de su suegro, ganándose una asentimiento de este.
- ABAJO - exclama Soo cuando las puertas se rompen por completo dejándolos expuestos a las balas.
