51 días con Ren.

Día 4 " Hay tanta inocencia en ti".

Hoy también podía despertarme tarde pues tenia vacaciones y no precisamente tenia que pararme porque mis padres me obligarán a levantar. Seguí durmiendo sin preocupación alguna por un buen rato hasta que ya no pude seguir durmiendo. Me levante y con mi pijama puesta salí a la cocina en donde ya estaba Ren, parecía que hacia algo pero no vea que era.

-Buen día-le dije mientras me sentaba en una de las sillas que estaba en la pequeña mesa redonda.

-Mmmm-fue lo único que Ren hizo.

El silencio se hizo presente, era tan incómodo esto, ¡odiaba esto! Pero que podía hacerle si al parecer Ren era de esas personas frías que no confían en otras personas que no sean conocidos, debería por lo menos tener un poco de confianza en mi, al fin vivíamos en el mismo lugar, ¿no?

-Toma-Ren dejo un plato de fruta en frente de mí.

-Gracias...-dije mirando el plato, después lo mire a él quien se sentó en frente de mí -La próxima vez yo haré el desayuno-. Ren levanto su vista y me miro.

-¿Sabes tan siquiera cocinar? -preguntó.

-Si-conteste segura-, tuve que aprender porque mis padres salían muy a menudo cuando yo tenia 15.

Ren me miraba con atención lo cual me dio pena pues odiaba que tomaran su atención a mi cuando lo que decía no era tan importante.

-¿Qué piensas hacer hoy?-pregunto Ren.

-Nada-conteste.

-¿Hoy no saldrás con tu amigo?-pregunto.

-¿Por qué la pregunta? -arrugue el entre cejó.

-Por nada en especial -Ren se levantó y se fue a sentar en la sala yo lo seguí y me sente a su lado.

De alguna u otra manera tenía que lograr tener al menos la más mínima de su confianza.

-No me persigas -hablo Ren con su vista fija en el televisor-, no me gusta.

-¿Quien dijo que te estoy persiguiendo? -lo fulmine con la mirada -Yo también quiero ver la televisión.

Ren puso un canal realmente aburrido que lo único que logre fue quedarme dormida.

Narra Ren.

No se cual era el plan de ______, parecía que quería estar pero no estar conmigo, como si quisiera ambas cosas. Nos quedamos viendo la televisión por un rato, había puesto un canal que era un poco aburrido esto era para ver que hacia ______... Paso un buen rato desde entonces, ella se había quedado dormida en mi hombro, ¡lo que me faltaba! Trate de quitarla, lo único que conseguí fue hacer que se acomodará mejor. Paso una, dos tres horas y ella no despertaba parecía que estaba en estado de coma, ¿realmente esta respirando? Iba a comprobarlo cuando ella abrió sus ojos, después se los restregó hizo todo eso sin moverse un solo centímetro.

-¿Podrias... Podrías moverte?-dije mirándola.

-¡Oye! Hay mucho espacio en este sofá, muevete tú.

-Ok-me levante e hice que ______ por poco azotara en el suelo a no ser por que la agarré.-¡Rayos, ______ levantate!

-¡¿Estas loco?!-grito ______-¿Por qué me tiras?

-Tú dijiste que me moviera y eso hice, ¿crees que tener tu cabeza en mi hombro por casi tres horas es cómodo?

-¿Tres... horas? ¿Tanto dormí? -______ se levantó de un salto.

-¿A dónde vas?-le pregunté.

-Por la comida y la cena, ¿me acompañarás?

-No que sabes cocinar -______ se rasco la nuca.