《24》

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—¿P-papá?— Soonyoung abrió la puerta, tratando de calmar al emocionado Jihoon que se encontraba detrás de él.

Pues si, Jihoon estaba feliz, emocionado, se la pasó todo el día con una gran sonrisa en su rostro, dando pequeños saltitos cada que podía. El rubio pensaba que esta sería una gran oportunidad para borrar esa mala primera impresión que le había dado al hombre, o al revés, por eso mismo Jihoon quería mantenerse lo más presentable posible. Quería mostrarle al padre de Soonyoung que él de verdad era un buen chico, y no sería ningún tipo de mala influencia para Soonyoung.

—¿Ya podemos entrar?— preguntó el menor mientras abrazaba al de ojos pequeños por la espalda, intentando ver dentro de la casa.

—Espera un poco-

Dentro de esta, unos trastes cayéndose se lograron escuchar, varias bolsas arrastrándose, y aún más ruidos que eran difíciles de definir.

Un jalón en la puerta fue lo único que sintió Soonyoung antes de casi caer al suelo. El accidente de la mañana le dio más fuerzas para evitar otra caída con Jihoon colgado a él.

El menor se alejó de su amigo, ayudándolo para evitar que cayera. Subió la mirada.

Justo frente a él se encontraba un gran hombre, mano en la puerta mientras la sostenía para que no se cerrara. Una leve sonrisa en su rostro, algo falsa para los ojos de Jihoon. Un delantal más una espátula en su mano desocupada.

—Papá... lle-llegamos.

—¡Buenas tardes, señor!

El hombre miró al rubio.

—Buenas tardes...

—¡Jihoon!— el menor sonrió.—¡Puede llamarme Jihoon!

—¿Por que no... pasan?— habló el hombre, dejando el paso libre para los dos chicos.

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Uy.

Otro capítulo hoy porque el siguiente se viene un poquito más largo.

Angel - (•SoonHoon•)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora