Las manos del chico se pasaban por los lisos cabellos del mayor.
— Craig.
— ¿Umjm?
— Quiero tener eso contigo, que me b-beses y ya sabes, Tucker. Lo demás ya no me importa. — Murmuró cerca del oído del otro mientras soltaba una risita estúpida.
— ¿Estás seguro de eso? — Le preguntó, no quería aprovecharse del estado en el que se encontraba el contrario.
— Estoy seguro, a menos que seas como el idiota de Kyle, que cuando aceptas tus sentimientos maricas hacia él, te salga con la pendejada de que se acostó con otro. — Reprochó mientras daba un sollozo. El mayor sólo se confundió, entonces, ¿Le gustaba?
— Stan, te juro que lo que estoy haciendo es en serio, además no quiero que pienses que me estoy aprovechando de esto porque. . . — Los labios del chico de pompón rojo lo callaron, llevando sus brazos alrededor de su cuello mientras se colgaba, por el lado del ajeno, le abrazó de la cintura.
— Estará todo bien, vamos Fucker. — Este soltó un gruñido al apodo, seguramente se lo había contagiado Kenny, ahora que lo pensaba, Stan tenía un pequeño parecido al pensado antes debido a su forma de actuar en el estado de ebriedad.
El menor lo tomó de la muñeca y lo llevó jalando hasta su habitación para luego cerrar la puerta con cerrojo, por si las dudas. (?) Lo tiró sobre la cama para así posicionarse en el regazo del pelinegro, volvieron a unir sus labios en un beso algo lascivo lleno de pasión y algo de cariño.
Los labios del ojigris bajaron al cuello de Stan, dándole mordidas, besos y lamidas que, de momentos lo chupaba dejándole marquitas, ladeaba su cabeza para darle un mejor acceso, llevó sus manos a la chamarra café con algunos detalles rojos para así bajarla junto con su polera blanca, dejando descubierto sus hombros, a los que le dio la misma atención que a su cuello.
— C-Craig, se siente muy bien. — Murmuró en un suspiro sonriendole de manera tierna, coño, ahora mismo Stan parecía el uke más uke de todos, incluso más que Butters. La reacción de Craig fue una leve erección formada en su entrepierna, la cual el ojiazul logró sentir haciéndole gemir. El rostro ajeno estaba serio y frío como siempre, aunque en sus ojos se notaba un toque de deseo.
El menor le dio un último beso en sus labios para luego bajar hasta la entrepierna del muchacho, abrió el pantalón del mismo para así acercar sus labios a sus miembro que quedaba cubierto por la fina tela de su bóxer.
— Hmjm, Stan. — Dijo suspirando, el menor contestó con una risita pasando su lengua a lo largo de su hombría. Le sorprendía lo que ahora mismo se encontraba haciendo el menor de los Marsh, pero era increíblemente precioso el verlo así, quién sabe cuando había descubierto sus sentimientos hacia él, pero estaba seguro que le gustaba. El otro lo sacó de sus pensamientos cuando sacó el miembro del bóxer, metiendolo a su boca al mismo tiempo en que paseaba sus manos por este. Respondió dando un gemido ahogado, el otro le estuvo masturbando por algunos minutos más.
— A-Ah, aguarda me vengo. — Mascullo para que el menor se quitara pero no, succiono fuertemente la punta y pronto ya se había corrido en la cara de este.
— Que divertido. — Si que no estaba del todo consiente, pues nuevamente rió. El de pompón amarillo lo alzó volviendo a la posición del principio ahora pasando su diestra por debajo de su remera, deteniéndose en los pezones del ojiazul, dándole suaves apretones a uno de ellos mientras que con su siniestra quitaba su gorro azul marino con rojo, tirandolo por algún lado de la habitación. Era imposible no soltar pequeños jadeos como reacción a sus apretones y caricias. Subió un poco más arriba del pecho ajeno su playera, ahora bajando sus labios al pezón sobrante dandole mordiditas y succiones seductoras. Así estuvo un rato más, el pelinegro menor ya tenía una erección así que, había que ayudarle con eso. Bajó su pantalón junto con los bóxers y alzó la cadera menor para así llevar un dedo a la entrada de Stan, respondiendo con un gemido.
— Intentaré ser gentil, pero si no quieres, sólo dímelo, Marsh. — Susurró mordiendo el lóbulo de la oreja del mismo para luego meter su dedo, haciéndolo gemir, ahora fingiendo una penetración con este, cuando creyó estar listo, metió uno más.
— Ah, ah, Craig. — Gimió encorvadose y echando la cabeza hacia atrás. Sacó sus dedos, esta vez metería su miembro, otra vez alzó su trasero metió lentamente la punta de su masculinidad, tomó con ambas manos la cintura ajena y la bajó de golpe haciendo entrar su miembro completamente, produciendo dolor interior.
— M-Mierda, ¿Esta bien, Stan? — Asintió con una débil sonrisa y comenzó a mover sus caderas al compás de las penetracioned contrarias, al principio eran lentas y placenteras, pero con el tiempo se volvieron fuertes y algo bruscas, haciendo gemir al ojiazul.
— V-Vamos Craig, más. — Pidió en un jadeo, ahora volteó bruscamente a este, posicionándose encima de él y penetrandolo más fuerte, al mismo tiempo que masturbaba su pene, lo besó desesperadamente juntando sus lenguas y lamiéndose entre sí.
— ¿Ya casi estás? — Le preguntó en un susurro.
— A-Aha, m-me corro. — Jadeó encogiendo sus rodillas, al mismo tiempo ambos eyacularon.
— Ven, vamos a bañarnos. — Lo tomó en brazos y lo llevó hasta el baño, llenó la tina y ambos se metieron.
— M-Me duele mi trasero. — Reprochó mojando su cabello y el del mayor.
— Lo siento. — Quería reírse pero sólo sonrió ligeramente.
— No creo poder levantarme mañana.
— Descuida, si no quieres ir, supongo que no te obligaré. — Pero el problema eran sus padres, aún no llegaban y ya era bastante tarde, no recordaba que le avisaran algo de irse, bueno, realmente no se acordaba. Cuando terminaron de bañarse se cambiaron con una pijama, aunque Stan le prestó una a Craig que le quedaba algo grande. Después se fueron a la cama para así dormir. . .
Con naturalidad el menor abrió sus ojos, le dolía la cabeza y su entrada, se maldijo unos minutos por haber bebido, se volteó quedando frente a frente con el mayor, joder, ya sabía perfectamente que había hecho ayer, y aunque no lo supiera, era de imaginarse, no sabía como sentirse, se dio varios golpes contra la almohada, algo tendría que hacer, aún tenía novia.
[ Agh, ayer no subí porque se borró, de nuevo, pero como sea aquí esta, no soy demasiado buena escribiendo lemon. (?) Pero hice mi mayor esfuerzo, por cierto, pueden mandarme ideas para seguir los capítulos por mensaje, no muerdo, mañana no subiré porque viajaré, y será largo, quizá hasta pasado mañana vuelva a subir, pero en verdad les agradecería si me mandan ideas para los siguientes capítulos.
Espero que les guste.
Sin más.~ ]
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¿No lo aceptaré jamás? |AUTOCORRECCIÓN| [ Style ] [South Park ] [ Yaoi ]
FanfictionPrólogo. Stan, un chico de dieciséis años, sereno, y maduro, aunque no del todo. Este no logra aceptar su lado homosexual con nadie, pues dice ser completamente hetero. Pero, ¿realmente qué harías si lo que tienes planeado no sale como lo creas? ¿...