Mamá

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La noche había sido larga, en ocasiones Victoria despertaba asustada y agitada, mientras que Fernando intentaba tranquilizarla y hacerla dormir, no dejaba de pensar en sus hijos y agradecer por tener nuevamente a Victoria.

Al amanecer Victoria despierta y a Fernando sentado en una silla recostando su cabeza sobre la cama y tomándola de la mano.

Victoria. Fernando, mi amor. Lo mueve un poco para despertarlo.

Fernando. Victoria ¿Qué paso?

Victoria. Nada mi amor, ¿Pasaste aquí toda la noche?

Fernando. Por su puesto, te dije que no te iba dejar sola.

Victoria. Pero tienes que descansar, yo estoy bien.

Fernando. Ya te dije que no, no me voy a separar de ti por ningún motivo, de aquí nos vamos a ir juntos.

Sala de espera. Desde muy temprano llegaron Alejandro y Raquel.

Raquel. ¿Hasta cuando voy a poder ver a mi madre?

Alejandro. Ten paciencia Raquel, Fernando esta con ella y desde ayer no se ha querido separar de Victoria para nada.

Raquel. ¿Y ese quien se cree? Se siente dueño de mi madre.

Alejandro. Raquel por favor, es su esposo, es lógico que quiera estar con ella, además recuerda que también acaban de nacer sus hijos y estuvieron mucho tiempo separados.

En es momento llega el agente encargado de la investigación del secuestro de Victoria.

Agente Campos. Buenos días señor Lombardo, señora Raquel.

Alejandro/Raquel. Buenos días.

Agente Campos. Ingeniero, ¿Puedo hablar con usted?

Alejandro. Claro que sí. Se alejan un poco de Raquel.

Agente Campos. Ya se imaginará el motivo de que este aquí.

Alejandro. Si, lo imagino.

Agente Campos. Es necesario tomar las declaraciones del señor Fernando, la señora Victoria y la de usted.

Alejandro. Yo no tengo ningún problema, pero mi madre, por favor, esta muy susceptible, le pido de favor que la declaración de mi madre la tome en otra ocasión, mínimo hasta que ella este en casa.

Agente Campos. Lo siento señor Alejandro, pero no puede esperar, es cierto que el doctor Hernán no causara más daño.

Alejandro. Esta bien, solo que aun es muy temprano y no se si mi madre ya despertó.

Agente Campos. No se preocupe ingeniero, yo espero el tiempo necesario.

En la habitación de Victoria, alguien toca la puerta.

Victoria. Adelante. Al ver quien cruzaba la puerta sus ojos se llenaron de lagrimas y ternura.

Enfermera. Buenos días señora Victoria, miré a quien le traje.

Fernando. Mi amor, son nuestros hijos. Victoria comienza a llorar.

Enfermera. Se los dejo un momento, señora, es muy importante que intente amamantarlos.

Victoria. Gracias, muchas gracias. Dice mientras su voz se cortaba a momentos. La enfermera sale de la habitación.

Victoria. Fernando, mi amor, los quiero ver, dámelos. Temeroso, Fernando toma primero a Gerardo

Amor eternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora