Había pasado ya una semana desde la separación de Victoria y Fernando. Aunque frente a los demás ambos aparentaban estar bien, no había día en que la tristeza y la desolación no los acompañara.
En el estudio de Victoria, Felipa y Victoria están conversando.
Felipa. ¿No cree que el berrinchito que se taren usted y el señor Fernando ya les duro mucho?
Victoria. No es ningún berrinche, esto es lo mejor.
Felipa. En verdad que yo no la entiendo. Que afán el de ustedes de dudar de su amor. Usted lo ama, el señor Fernando esta que se muere de amor por usted.
Victoria. Pues si Felipa, pero desde un principio supe que todo esto era un error.
Felipa. Entonces si usted estaba convencida de que era un error por qué permitió que las cosa llegaran hasta aquí, por qué acepto casarse con él.
Victoria. Ambos nos dejamos llevar por el momento, yo creí que ese amor sería más fuerte que todo.
Felipa. Es que lo es, pero usted no se da cuenta. No entiendo como permitió que el se fuera en un momento en el más necesita de su compañía, su amor, en el que mas lo necesita a él.
Victoria. Tarde o temprano yo me iba convertir en una pesada carga para él, además siempre habrá entre nosotros la sombra de lo que paso mientras yo no estuve.
Felipa. Ya no piense en eso, yo estoy segura de que nada de lo que paso hará que el señor Fernando la deje de amar, usted mejor que nadie debería de saber que él la ama más que a nada en el mundo. Lentamente los ojos de Victoria comienzan a llenarse de lágrimas.
Felipa. Y esas lagrimas solo confirman que usted también lo ama con todo su ser.
Victoria. No te voy a negar que lo amo con todas mis fuerzas, pero tarde o temprano le va a pesar.
Felipa. Ya señora, no se siga haciendo daño con todo esto. Felipa se acerca a Victoria y la abraza.
Constructora Lombardo. Alejandro y Fernando estaban revisando unos planos para una nueva construcción.
Alejandro. Fernando, te noto algo distraído ¿Pasa algo?
Fernando. No, no pasa nada, solo estaba pensando.
Alejandro. ¿En mi madre? Fernando suelta un ligero suspiro.
Fernando. Pues sí, no hago otra cosa más que pensar en ella.
Alejandro. No se que es lo que esta pasando entre ustedes, pero no pueden continuar así.
Fernando. A mi que me dices, yo daría lo que fuera por estar siempre a su lado.
Alejandro. Entonces búscala, desde que te fuiste de la casa su cara esta llena de tristeza, no sale de su habitación.
Fernando. No Alex, esta vez nuestra separación es definitiva, ella esta mas que convencida de que lo nuestro no puede continuar y yo simplemente ya estoy cansado de ser yo quien esta tras de ella, luchando por un amor en el que unas veces ella esta segura de lo nuestro y otros donde se llana de temores, llena de dudas, de verdad ya no puedo.
Alejandro. Pero esa insistencia tuya los a llevado a su historia de amor, que no merece terminar de esta manera, además las decisiones que ustedes tomen también les afecta a sus hijos.
Fernando. Yo no puedo obligarla a estar conmigo y mis hijos... siempre estaré para ellos. También estoy seguro de que jamás voy a amar a nadie como amo a Victoria, es ella la mujer de mi vida, el amor de mi vida, daría todo lo que tengo porque ella este bien, porque este feliz.
Alejandro. Yo insisto que tienes que hablar con ella.
Fernando. Mi decisión ya está tomada, aunque me duela con toda el alma las cosas se van a quedar así, además las cosas van a ser más difíciles estando yo aquí, he pensado en dejar la vicepresidencia de la empresa e irme a Toluca al rancho con mi tío.
Alejandro. Alejándote no vas a logar nada, yo estoy seguro que esto es solo un a racha, ustedes saldrán de esta.
Fernando. No lo se hermano, esta vez todo es diferente y aunque me duela, creo que lo mejor es alejarme por un tiempo.
Alejandro. Yo creo que te estas precipitando, piensa bien lo que vas a hacer.
Mas tarde en la mansión Lombardo.
Victoria se encontraba en su habitación escuchando algo de música mientras peinaba su cabello. De pronto una melodía hizo que ella se estremeciera, haciendo inevitable que una ola de recuerdos la invadieran.
"Te pedí con mi fuerza al universo. Te escribí en un par de versos que mandé volando al cielo.
Te soñé y te amé sin conocerte, mis abrazos te llamaban a un ladito de la cama."
Recordando aquel momento donde ya se había convertido en la señora Alanís, el recuerdo de aquel primer beso, la felicidad que le provocaba saberse tan de él.
Victoria. Te amo... Dijo mientas caigan gruesas lagrimas de sus ojos.
ESTÁS LEYENDO
Amor eterno
FanfictionVictoria Lombardo (Daniela Romo) es una mujer madura enamorada de Fernando Alanís (Gabriel Soto) a pesar de los obstáculos que la vida y ella misma se pone ¿Podrán realizar su amor?