Malvado Espindola⚓

4

A la mañana siguiente tenía que ir a la estúpida Universidad. Tenía que verle la cara a la asesina de tazon. Me dirijo a la ducha con agua fría para calmar mi ira contra esa vieja.
Me visto con la ropa cómoda que traía ayer, si, no ves que quemó todo ¿Qué me voy a poner? Si ayer no había tiendas abiertas para comprar ropa.
Entonces enciendo mi moto y llegó a desayunar a algún lugar de por ahí.

Después llegó a la escuela y se acerca la tipa de las firmas.

–máximo –dice con miedo
–¿Qué quieres? –contestó a mi manera, enojado, de ahora en adelante imaginate cómo contestó, de la misma manera, fría, seca y enojado.
–solo quería decirte qué pudimos correr al maestro de cálculo
–vaya algo bueno en el día
–si verdad, es qué –la dejó hablando sola y me dirijo al Salón, dónde estaban todos menos la odiosa de Hannia. Pero parece que eche la sal porque apareció, un poco asustada y parecía que no durmió para nada.
–pase señorita –pasa y se sienta adelante de mi y agus a su lado derecho
–¿Qué te paso? –le dice agus con su voz de niña preocupada
–no pude dormir, de la nada aparecieron 5 ratas en mi cuarto y cada una con un hijo ratón, no me dejaron dormir y grite toda la noche –dice asustada
–Que asco
–aparte de asesina, puerca –le digo en el odio pero ella me ignora, yo solo me dedico a patear le la banca.
–Quieres dejar de patear mi
banca –voltea algo molesta y con cara de desvelada
–no quiero –le respondo y lo sigo haciéndolo

Era hora de ir al receso, estas horas solo me dedique a patear la banca de Hannia, cuando dan el toque ellos salen y yo me prefiero quedar un tiempo más.

Hago lo que tengo que hacer y me dirijo a un restaurante por hay cerca. Llegó ordenó, cuando me traen el desayuno, recibo una llamada.

–ahora ¿qué? –digo enojado y suspiro
–la transferencia bancaria ya está lista, ya puedes ir a comprar ropa y todo lo que necesites
–ok –cuelgo la llamada y sigo desayunando.

Pasada una hora, era obvio que tengo que desayunar agusto, entró en un problema si ir a la escuela o irme a comprar ropa, pero después de tanto pensar decido ir a la estúpida Universidad, no puedo faltar pero si llegar tarde, así que eso hice, ya estaban en media clase, no toque ni mucho menos pedí permiso, solo entre y me senté en mi lugar, el maestro ya sabía cómo era, incluso me llamaba rarito pero me daba igual. Entonces no me dijo nada y me puse hacer lo que decía hacer, que era estudiar.

Después de unas tres horas de materias aburridas, dan al fin el toque de salida y salgo hacia el estacionamiento ya que hay estaba mi moto. Pero fui interrumpido por una voz.

–máximo –dice esa voz que odio y detesto tanto
–¿Qué? –doy media vuelta para quedar frente a frente
–necesito que vengas a firmar el diploma de este semestre
–¿de nuevo?
–si máximo, de nuevo fuiste el mejor promedio de tu carrera
–shh no lo diga tan fuerte, como si fuera gran cosa –rodeo los ojos
–¿este semestre si querrás estar en el cuadro de honor?
–¿tengo cara de que quiero estarlo? –frunzo el ceño
–andando máximo –suspira y yo lo sigo hasta llegar a la estúpida Dirección –estos son los
papeles –me los da, los firmó y salgo de ahí.

No comiencen ustedes también, si tengo un buen promedio, si hago tareas, trabajos y exámenes. El que sea serio, rebelde y un poco cretino no quiere decir que sea un asco de persona y sobre todo que repruebe. Si estoy aquí es por algo.

Me dirijo ahora si al estacionamiento y me pongo el casco y enciendo mi moto y me dirijo al centro comercial donde me surtire de ropa y si va ser negra.

Voy de tienda en tienda hasta lograr las compras posibles, cuando una muchacha tiene problemas al cobrarme y le habla a otra.

–¿Qué te cobro? –dice sonriente y como yo estaba volteado porque me enoja que no atiendan rápido, volteo y le digo
–un nuevo cerebro –digo sarcásticamente –pues que va hacer, esto –le dejó toda la ropa ahí y ella solo abre la boca al verme y creo que yo también, no podía creer que hasta en mi tienda de ropa favorita vea a esta nefasta
–creo que si vamos a cobrar el cerebro –se ríe
–uy que sea mejor un ataúd porque me mataste con tu
chiste –rodeo los ojos
–hasta comprando eres Así
–¿te molesta? Para no comprarte nada –me cruzó de brazos
–te cobrare –comienza a pasar prenda por prenda en la cosa esa que suena y toma los códigos, la verdad no se ni que sea pero me da igual–¿efectivo o tarjeta?
–tarjeta
–me la –la interrumpo porque ya se la había dado –gracias –sonríe.
–¿todo esto tienes? –abre los ojos cómo si se le fueran a salir de la impresión
–¿perdón? –frunzo el ceño
–no, nada –pasa saliva –me firmas aquí, por favor –tomó el papel y se lo firmó. Después tomó mi ropa y me doy vuelta.
–gracias por su compra –salgo de la tienda, cuelgo las bolsas en la moto y me voy al departamento.

Llegó dejó las bolsas en el sillón y voy a ver que hay para hacer de comer, espero y Tom me halla surtido bien el refrigerador, y así fue pero me da hueva cocinar algo solo para mi, así que pido una pizza de Hawuayana con piña, ¿Qué les pasa a las personas que odian la pizza con piña? Seguro les dieron una buena paliza con las piñas, porque la pizza con piña es lo más delicioso, e dicho.

Me estoy viendo una serie en lo que llega el repartidor, cuando tocan el timbre, me levanto sin zapatos, porque estaba en mi casa y podía hacer lo que yo quisiera, ok. Abro la puerta y ay no, parece que la vida me castigará una y otra vez.

–hola Maxi –dice el tarado de Agus
–¿cuánto es? –me limito a decir
–159 –saco mi cartera y cuento el dinero para después dárselo pero él comenzó a hablar –oye y porqué te cambiaste de departamento? ¿No te gusto el otro? O ¿te cambias muy seguido? –le Quito la pizza, le doy los billetes y le cierro la puerta en la cara –ok te veo mañana –dice detrás de la puerta, yo solo me tiro al sillón, abro la pizza y la disfrutó.

Me estoy viendo la serie, después me aburro y me voy a mi cuarto a agarrar un cigarrillo y fumar lo en el balcón, para después irme a la cama, quedarme en puros bóxers y dormirme.

Amo esta historia como no tienen idea ¿ustedes que opinan? ¿Les gusta la historia? Comenten que les pareció. 

Aviso!!

Tengo problemas con el teclado de mi celular, vayan a leer el amor sobrepaso, o el internado de famosos. Ahí salen Agus y maxi, en lo que yo me compro un nuevo celular, porque lamentablemente este no me deja escribir rápido y duro horas escribiendo un texto, no saben lo frustrante es que se escriban otras cosas o que se trabe y no me deje escribir más. Les prometo que en cuanto tenga un nuevo celular me lanzó a escribir de esta hermosa historia.
Nos vemos pronto :)